Melanny estaba en casa de Candace. Se podía ver a Melanny viendo la ropa del armario de Candace y tirando en algún lugar de la habitación la ropa que no le gustaba, o sea, toda la que veía.
—Esta camisa se parece al día en que naciste, nunca debió suceder—bromeó Melanny y Candace le sacó el dedo medio.
A veces Melanny era cruel con Candace, y Candace era muy dulce con Melanny, pero así era su relación.
Son mejores amigas desde hace 8 años y son inseparables. Claro a veces tenían peleas. Melanny era muy molesta y dramática, algo que a Candace le alteraba demasiado ya que era muy tranquila.
—¡Demonios! No tienes ropa decente, el siglo pasado dice que le devuelvas su estilo—Siguió Melanny hasta que terminó de sacar toda la ropa de Candace del armario.
—¿Entonces para que me pides ayuda? Y para tu información, yo me visto bien, el problema es que a ti te gusta vestirte como una prostituta—Las dos rieron y Melanny tuvo una idea.
—Ya sé que puedo ponerme—Melanny sacó una caja que estaba escondida de bajo de la cama.
Abrió la caja y sacó un vestido negro, un poco largo y lindo para la ocasión.
—No, ni lo pienses Mel. Ni siquiera lo he usado yo—Negó repetidas veces.
—Vamos, lo cuidaré como si fuera mi teléfono, no le voy a hacer nada.
—No y punto—Dijo Candace cansada.
—Está bien, no lo usaré—Melanny se cruzó de brazos.
Al final Melanny fue a la cita con el hermoso vestido negro. Era molesta la capacidad que tenia de manipular a cualquier persona a su antojo. Candace no se dejaba, pero Melanny es como una niña pequeña en un supermercado, al final le compras lo que pide para que deje de lloriquear.
Candace acomodó un poco el desorden que había dejado Melanny, y se tiró en su cama.
No había hablado con Matthew, tal vez se arrepintió de la cita que iban a tener.
Candace agarró su laptop y empezó a buscar empleos, estaba pensando en dejar el que tenía ya que no producía nada y la paga no era tan buena. Además que el jefe las hacia pasar toda la noche en la oficina, para comer frituras y odiar a todo el mundo.
Le preguntó a varios amigos si conocían a personas que estén buscando trabajo.
¿Jardinera? No.
¿Contadora? A penas sabe contar hasta 100.
¿Cocinera? Absolutamente no, se le quemaba hasta el cereal.
¿Inspectora de papas fritas? ¿Acaso eso existía?
¿Niñera? Bingo.
Le pasaron todos los datos. Al parecer necesitaban que comenzara mañana mismo, ya que los niños no tenían madre y el padre trabajaba demasiado y no los atendía. Tenía que trabajar de 10 a.m a 5 p.m, no era el mejor horario, son 1.500 dólares mensuales, era más de lo que le pagaban en Born.
Ya satisfecha con el trabajo, se quedo dormida sin darse cuenta.
•••
Candace se levantó a la una de la mañana exactamente, por unos ruidos en la puerta.
Se levantó y buscó algo que pudiera servir como arma. Lo primero que encontró fue un jarrón que le había regalado su padre en navidad.
Avanzó lentamente hasta la puerta y la abrió.
Una Melanny muy ebria cayó cuando Candace abrió la puerta. Melanny rió un poco por el impacto.
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Bee Mine🐝
Teen FictionUna de las cosas de las que se arrepentía era haberse metido en una página que era la copia barata de tinder. Fue una idea estúpida y absurda. Se arrepentía demasiado de haber hecho tal cosa. Lo odiaba. Se odiaba a ella misma. Odiaba a el mundo en q...