A sky full Of Stars

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  De luto
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Sentí como si me faltará el aire y con un nudo en la garganta, con tantas ganas de gritar por mi tristeza, la diversión de la casa en el árbol termino después de que Cameron pronunciará las palabras "padre" y "muerte".

*Flash - Back*

Apenas tenía los dies años, cuando pasaba mucho tiempo con papá.

—Papá cargame—

—Alice pesas más que tu papá—

—Papi malo— dije con una mueca.

—Hija no te enojes, ¿Quieres que te cuente la historia de porque te pusimos Alice?—pregunto.

—Si—dije con una sonrisa muy grande.

—Tu mami y yo nos conocimos en un cine, ¿Sabes que película fuimos a ver?—

—No, ¿Cuál?—pregunte.

—Alicia en el país de las Maravillas, no era la película más adecuada para que surgiera amor, pero ¿sabes porque la conocí en un cine?—

—Agarraste de las palomitas de la extraña, osea mami, y... no recuerdo que más Papi, sigue contando—dije.

—Y me pegó con su bolso—dijo riéndose.

Yo sabía que era el mejor papá del mundo mientras duraba ahí, después de una semana lo llevaron a la guerra, el se ofreció era un especialista en medicina, así que fue a ayudar, recibíamos dinero y cartas de mi Papá  desde muy lejos, pero para ser sincera yo no necesitaba cartas ni dinero, yo necesitaba que mi papá estuviera con nosotros conviviendo como una familia normal, amándose y apoyándose entre ellos, quería tantas veces contarle a Papá que había ganado un trofeo a la mejor corista de la ciudad, que a Cameron le creció barba y parecía más anciano que chico de veinte años, y que lo quería tener aquí conmigo.

*Fin Flash - Back*

De seguro Mamá debería de haberse sentido de lo peor, a pesar de todo la muerte de mi papá nos unió más como familia, pero en otras palabras también nos hacia falta. En mi corazón es donde había un espacio muy grande que ocupaba mi papá, experimentaba la tristeza y el hechar de menos a alguien muy preciado como él.

En el funeral mis tías no dejaban de hablar de nosotros, como era de esperarse de ellas siendo las más chismosas de la familia.

—¿Qué pasará con los pequeños?—dijo tía uno.

—Se quedará viuda, nuestra excuñada, pobrecita—expreso tía tres.

—Cuidado que los chamacos, están escuchando— dijo tía dos.

Murmuraban lo que querían, eran como víboras lanzando veneno a un vaso de agua fría tomado por nosotros. Cameron no evitó que ellas estuvieran murmurando en el funeral de su hermano.

—Disculpen, tías pueden irse a otro lado a platicar, creo que no es momento de hechar en cara que son más chismosas en el funeral de su hermano — dijo Sam enfadado.

Se fueron sin decir nada avergonzadas de aquel comentario que había hecho mi risueño hermano Cameron, en este momento el era tan serio, aunque la verdad me siento mal por no poder hacer algo para que regrese papá y dejemos de sentir tanta tristeza incrustada en el corazón. Todos nos transformamos de un momento a otro por perder a alguien muy querido, mamá lloraba demasiado, mi hermano estaba tan callado, yo no podía dejar de llorar y temblar, aunque Sam estaba conmigo, el también conoció a Papá, el también sentía y comprendía lo que ese día me puso de malas.

Dije unas palabras, desde el lugar donde estaba yo para hablar, estaban personas que habían perdido brazos, piernas e incluso hasta un ojo, básicamente los pacientes de mi papá cuando estaba en la guerra ayudando, también estaba la familia de Mamá y Papá, Sam y amigos de Papá.