Psicosocial

Experiencia

¿Donde estoy?, Aquella pregunta resonó en el pensamiento de aquel joven pelinegro, solo caminaba de regreso a casa, solo caminaba, no sabía dónde estaba no podía recordar nada de lo ocurrido o como llegó a una camilla de hospital "que está pasando"pensó al notar que se encontraba fuertemente atado a una camilla de hospital estaba en un cuarto blanco, extrano pues pareciera ser un cuarto de hospital pero no parecía haber ningún mueble acordé, de hecho parecía ser una habitación vacía lo que lo hacía inquietante, trato de gritar pero su boca no respondió adecuadamente, al tratar de gritar solo conseguía balbucear algunas palabras sin sentido.
De repente alguien entro una persona, cubierta por una  capucha blanca.
"Veo que el prototipo salio bien, me alegra" una voz monótona resonó de la capucha, tranquila, inalterable" Bueno parece que estás más conciente de lo esperado, es una buena señal" al decirlo tomo la camilla y la llevo fuera del cuarto pasando por un pasillo largo, un pasillo sucio, paredes opacas con manchas que se intercalando entre el marrón y rojo, sonidos metálicos tanto de cadenas como herramientas para la carne, de repente crujidos que recordaban el grito de huesos al ser machacado pero ningún grito, apenas un quejido parecido a un susurro se podía escuchar. Un par de minutos después el encapuchado se detuvo
"Bueno pequeño Ken, es hora de la rehabilitación, no podemos dejarlo así, usted es nuestra pequeña esperanza"
"De que habla este tipo" el pelinegro na podía pensar, el pánico se lo comía poco a poco, su sangre se sentía helada, su cuerpo temblaba presiento el cruel destino que le esperaba, sus ojos se movía en todas direcciones buscando algún sentido a lo que veía pero todo se resumía en desesperación, no sabía dónde estaba, que le esperaba o al menos si saldría vivo de aquí? Lo único que sabía es que no sería nada agradable lo que sea que le esperaba.
"Lo estaba esperando" una voz conocida pensó el chico pero algo estaba mal  "yo me encargaré de su rehabilitación, ya que somos conocidos" algo repugnante estaba impregnado en esa voz tan familiar y querida " se que nos llevamos muy bien" algo enfermo.

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     Cuatro años después
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C

ansado y adolorido un adulto pelinegro habría sus párpados, obligados a moverse por el astro rey que dota de vida a un nuevo día, dejando al descubierto sus ojos grisáceos"mierda" con un suspiro pesado y chocante el pelinegro resopló por aquella pesadilla de tan mal gusto para él, se trataba de su muerte como el individuo que fue pero ahora se debía ver cómo quien era y quién es debe levantarse y acudir al trabajo.
"Es tiempo" un baño con agua fría salía ser su ancla a la realidad, su forma de atender al tiempo presente y en consecuencia actuar en el, se tomó su tiempo para vestirse, sus pesadillas rara vez lo dejan dormir más de 4 horas pero hoy pudo dormir 6, talvez ya se estaba acostumbrado a esto o quizá los medicamentos por fin empezaban a surtir efecto en todo caso podría tomase el tiempo para caminar al trabajo, 6 am es buen momento para recorrer las calles, el departamento suele estar limpio gracias a las trabajadoras de limpieza pero realmente es por el poco tiempo que pasa ahí "Espero poder terminar los trabajos en el laboratorio, necesito visitar la morgue" el pelinegro caminaba por la calle con un pequeño sandwich comprado en una konbini, realmente sentía asco que quería poner eso en su boca, no por el sándwich en si, cualquiera que lo probara realmente no lo despreciaría, pero para este chico era un tortura, sin apetito o simple reacción de las papilas gustativas esto solo es algo obligatorio, para tener algo en el estómago y así evitar las inconveniencia del ayuno las cuales podrían afectar en su trabajo, nada más.

División de inteligencia de Japón, DIJ  organismo capaz de mantener a ralla, perseguir y exterminar organización criminales con tendencias terroristas. Está organización capaz de llevar a cabo operaciones nacionales en contra de estos grupos cuenta con varios departamentos, Kaneki Ken investigador asociado rango AA, un joven prometedor capaz pero extravagante, es la imagen que el viejo guardia castaño de casi 1.80 obtuvo de chico"señor Ken, llega más temprano que de costumbre" un guardia quizás del turno nocturno aún terminando se turno "¿o talvez demasiado tarde?" casi con tono burlón el guardia trato de bromear con él pelinegro por su tendencia a llegar por la madrugada y en algunas ocasiones a media noche para trabajar en algún caso o saliendo a estás horas de la oficina así que verlo justo llegar justo antes de terminar su turno le parecío al menos digno de remarcar, a lo que esté solo respondió de forma tranquila "talvez, está vez dormí demaciado, la pereza no es una de mis virtudes Desmond" una respuesta acorde lo que se espera de un investigador educado y tranquilo, la realidad es que el pelinegro solo deseaba no tener que hablarle, le parecía un perdida de tiempo, no lo despresiaba ni nada por el estilo, de hecho le parecía un hombre respetable, pero sinceramente no le importaba su existencia simplemente no podía conectar con él, pero malas relaciones sociales podrían jugarle en contra en el futuro, "ya lo veo señor, pero sabe puede que sea lo mejor y tal vez así una alma femenina lo tome, aún recuerdo cuando conocí a mi querida esposa" una característica del guardia, además de ser una criatura nocturna, era su inigualable amor a su difunta esposa que no dudaba en expresar su amor a pesar de su ausencia, el anciano parecía tener presente su recuerdo en cada ocasión en la que podía relacionarlo,"bendito aquel día" el anciano parecía prepararse para un gran monólogo pero el pelinegro intervino a tiempo "lo detendré justo ahí, señor Desmond, creo conocer de cabo a rabo su historia, pero si lo desea en otra ocasión podemos charlar" siendo lo más educado que podía con el cerebro a mitad de rendimiento Ken evitó la emotiva historia de amor del anciano ya desgastada para el"estos jóvenes, olvidan el hecho de que toda buena historia de amor debe ser escuchada las veces que sea necesario" con un tono de disgusto el hombre corpulento expreso su descontento, cierto su historia contada una y otra vez podría cansar a algunos, pero quién se atreve a interrumpir una historia al empezar"no lo dudo pero por hoy solo tomaré un café he iré a mi oficina dejaré el amor para otro dia" Ken decidido tomo un café genérico de una máquina mientras Desmond se quejaba a un en la puerta"talvez no está del todo mal hablar con él" con su café en la mano se dirigió a su oficina, a reanudar su búsqueda del Búho.

Bueno, no fue exactamente sábado pero no fue domingo, espero que les guste y ya me voy a dormir