¿Algún día pasará? (#ADP)

Capítulo 6.- Me atrevere a caer por ti

Maratón (3/3)

Jane's POV

—Que maravillosa noticia, Jake— digo con fingido entusiasmo— Me alegra mucho que allás vuelto.

—A mi también, Lodge— me dijo con una sonrisa— y sabes ¿Por qué estoy tan feliz?— me pregunta. Pero antes de que pueda contestar el lo hace —Porque te acabo de ver a ti.

Me quedo congelada. No sé qué decir, supongo que ya mis mejillas estarán rojas como un tomate porque me están empezando a arder.

—Gra-gracias— tartamudeo al contestar pero luego me recompongo — ahora sí me disculpas, necesito irme.— dispuesta a marchar, camino un poco por su lado, hasta que me agarra del brazo cuidadosamente.

—Espera, ¿Puedo volver a verte?— considero esa idea.

Jake no es ningún santo. Es un mujeriego y, por mi parte, no me apetece mucho que digamos. Pero si lo pienso bien podría salir con él para olvidar a Diego. No es por ser una persona egoísta ni nada por el estilo, pero necesito olvidarlo.

—Claro, ¿Mañana al salir del colegio, te parece bien?— preguntó, sabiendo que las respuesta va a ser afirmativa.

—Excelente. Entonces nos vemos mañana, Lodge, si no es que te vuelves a chocar contra mi— dice con una pequeña sonrisa.

—Ya quisieras. Nos vemos mañana Jake.— y con eso salgo disparada en busca del cuarto de conserje.

Espero que nada malo halla pasado.

Andrea's POV

Estoy un poco asustada.

Jane no ha llegado y llevo como cinco minutos encerrada en este pequeño armario con Mark y me siento incómoda. No sé qué puede llegar a pasar.

—Andrea, ¿Vamos a tener que esperar mucho? Necesito hacer otras cosas— por fin, hablo Mark con un poco de irritación en su voz.

—Pues de aquí no te vas a mover hasta que nos disculpes a las dos por no haber ido a tu primer entrenamiento, Mark— dije yo, obstinada de su actuación hipócrita.

—Yo no les voy a dar ninguna disculpa hasta que ustedes me digan por qué faltaron a mi entrenamiento— dijo él, con un poco de dolor en su voz — Era mi primer entrenamiento. Ustedes lo prometieron, me dijeron que estarían ahí para apoyarme, soy yo el que quería que ustedes me vieran, ¿Por qué no fueron?

—No soy yo quien debe contártelo, no es mi asunto— dije y tenía la razón, no puedo contarle lo que le pasó a Jane, ella se lo debe decir, si es que quiere contarle.

—Asi que ¿No me vas a decir nada? Eeeh— cambio su rostro a uno un poco juguetón. Ok, definitivamente él es bipolar. Empezó a acercarse y hay entre en pánico.

—Mark, ¿Qué est... JAJAJAJAJA— no pude terminar de cuestionar cuando ya estaba estallando en risas por las cosquillas que me empezó a hacer. Me retorcí un poco en mi lugar y resbale, a lo que él tuvo que sostenerme, una mano en mi espalda y otro alrededor de la cintura. Estábamos demasiado cerca, tanto que podía sentir su respiración pesada.

—Mark, creo que deberíamos separarnos— susurré lo suficientemente alto para que él lo escuchará.

—¿Por qué?— cuestionó, su nariz rozando a la mía. Estábamos demasiado cerca, pero no podía hacerlo.

El solo pensamiento me volvía loca. El hecho de ocultarle a mis mejores amigos que estaba saliendo con alguien me mataba. Jane, al ser mi mejor amiga, lo tendría que saber, pero no he tenido el valor de contárselo. Porque sé que, cuando sepa quién es, se volverá loca.