Red Hood #1.5 » Jason Todd

Capítulo dos

Puedo sentir los brazos de Jason enrredarse  en mi cintura y sus labios presionarse en mi cuello dejando un beso allí.

—Buenos días — murmura levente.

—Buenos días — respondo al tiempo que termino de hacer el último hot-cake colocándolo en un plato.

—¿Por qué no me despertaste?  — pregunta —. Podría haber hecho el desayuno.

—Estabas demasiado cansado — me encojo de hombros —. Preferí dejarte dormir un rato más.

Jason me gira en sus brazos para que nos quedemos cara a cara, una de sus manos sube acariciando mi mejilla cuando se acerca para colocar sus labios sobre los míos. Nos besamos profundamente, entonces su otra mano se cuela por debajo de la remera que llevo puesta acariciando mi muslo y logra que un suspiro pesado se escape de mis labios.

—¿Podrían no tener sexo en la maldita cocina? — la voz de Artemis llega a mis oidos y coloco mis manos en su pecho haciendo que tomemos un poco de distancia.

—No estabamos teniendo sexo — réplica Jason girandose hacia ella.

—Buenos días Artemis — saludo —¿Te gustaría desayunar? — le pregunto tomando el plato de hot-cakes para llevarlo a la mesa.

—Solo café — responde secamente y se sienta en la mesa.

—Buenos días — la melodiosa voz de Kory llega a nuestros oídos.

—Buenos días — respondemos al unisono.

—Qué amable fuiste al hacer el desayuno, Camille — comenta sentándose.

Comenzamos a desayunar en silencio, a decir verdad, todavía sigue siendo incómodo. Ellas dos solo hacen que me sienta incómoda todo el tiempo, no es para nada como mi relación con Donna o Babs, ellas, al menos, son mis amigas.

—¿Alguna novedad? — pregunta Jason tomando un sorbo de café.

—No — comenta Artemis —. Solo que mientras ustedes juegan a ser espías internacionales nosotras nos quedamos aquí haciendo la comida y lavando su ropa interior.

—Un momento... — puedo escuchar la voz de Roy entrando a la cocina —¿Eso que comí lo cocinaste tú? — pregunta sorprendido —. Con razón estaba horrible.

—Si no cierras la boca voy a patear tú trasero, Harper — habla la pelirroja entre dientes. 

—Ustedes se quedaron para patruyar la ciudad — responde Jason —. No podíamos ir todos en esa misión y lo sabes Artemis.

—Bien, tal vez quiero hacer más que salvar a un par de personas por noche — réplica ella levantándose de la mesa enojada.

—Entonces vuelve a Themyscira — le dice Jason haciendo que ella se enfade aún más.

—Jay — lo llamo para que me preste atención —. Si quieren volver a Gotham pueden hacerlo, yo no voy a interferir con eso.

—Cami — Kory me habla desde el otro lado de la mesa —. Artemis solo quiere sentirse útil, no es por esta aquí o allá, solo necesita una misión más grande.

—Todavía no tenemos nada — responde Roy —. Irnos tanto tiempo fue un error.

(...)

Estoy sentada frente a la gran computadora que utilizamos aquí, cortesía de Wayne enterprises por acatar la regla de no matar. Necesito saber que anda mal con los rastreadores de Jason y Roy, pero al parecer esta todo en orden y siguen si emitir señal.
Comienzo a diseñar un prototipo nuevo para Jason, con todos los peligros que enfrentamos a diário necesito que el tenga un rastreador nuevo.