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La música pareció detenerse un instante que pareció eterno, todo lo demás también. Pero la manera en cómo esos ojos brillaban fue suficiente para que todo volviera de forma estruendosa.
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Jungkook parpadeó, un poco desconcertado, desviando la vista del rubio para darse cuenta de que no sólo él lo estaba viendo. Seokjin y Yoongi también tenían sus ojos en él, a la espera de que hablase o algo, pero sólo se había quedado ahí de pie completamente en blanco unos segundos que le parecieron eternos. Sus manos estaban sudorosas y su corazón latía tan rápido que no tenía la más mínima idea del porqué de su reacción, negó, tratando de sacudirse aquella extraña sensación del cuerpo y aclaró su garganta para finalmente poder hablar.

—Es un gusto conocerlos— sonrió, un tanto cohibido.— A ambos.

Seokjin lo vio inclinarse y una sonrisa se dibujó en su rostro, quedando completamente encantado con el castaño. Se acercó a él de un paso, pasando un brazo sobre sus hombros para abrazarlo y pellizcando con su mano libre una de las mejillas del menor. Seokjin no había pasado por alto la manera en cómo Jungkook se había tensado ante su toque, prefiriendo actuar con naturalidad para hacerlo pasar desapercibido cuando éste pareció observar si alguien más se había dado cuenta de aquello.

—Eres tan lindo~ — expresó, viendo la forma en que la cara del menor comenzaba a ponerse roja.— Yoonnie me ha hablado mucho de ti, Kookie, ya era hora de conocerte.

Jungkook se relajó sin acostumbrarse todavía a aquella muestra de afecto y frunció los labios un tanto avergonzado por su reacción un poco hosca. Se giró para ver a su mejor amigo, encontrándolo con las mejillas coloreadas de un ligero tono rosado y una expresión seria.

—¿En serio?— inquirió, mirando ésta vez al mayor de los hermanos.— ¿Estamos hablando del mismo Yoongi?

Seokjin asintió varias veces, bebiendo de su vaso mientras miraba de reojo a su novio y de nuevo al castaño.

—Así es— reitera.— Y se preocupa mucho por ti, debes saberlo. Debiste verlo cuando me contó de tu cumpleaños número diecio-

—Seokjin— lo atajó el pálido.— Se supone que no debes decirle eso, es vergonzoso — Jungkook contuvo la risa al verlo, pensando que no podía verse más adorable, y mostró un puchero cuando éste lo miró; volteando los ojos. Añadió:— Al menos no deberías hacerlo en mi presencia.

Ambos, Jungkook y Seokjin, rieron ante lo último. Yoongi los observó, mascullando unas cuantas groserías al verlos burlarse de él como unos niños.

—Bien, Jin, ya está bien— Taehyung dio un paso, quedando junto a su hermano.

Jungkook desvaneció su sonrisa cuando el mayor de los Kim dejó de reír, girándose para ver a su hermano. La manera en la que Taehyung se movía, cómo hablaba, cómo lucía; le resultaba un tanto llamativas en un sentido inquietante. La manera en cómo su cuerpo reaccionaba ante su presencia era algo que no sabía interpretar y mucho menos aquella extraña sensación de familiaridad que le causaba escalofríos.

Escuchó;

—Hyung, Taehyung. Soy tu hyung— señaló.— ¿Podrías tratarme con respeto al menos? ¡Yo te he criado en mi espalda!

El rubio chasqueó la lengua, mirando a Jungkook detrás de su hermano para luego volver su atención a él.

—No seas dramático, sólo quería decir que ya es suficiente de hacer sonrojar a tu novio— señaló con un gesto al peligris.— Está claro que no es del tipo de chico que le dice a su mejor amigo que lo ama y lo muy importante que es, ¿o si?

Innocent. || KTH&&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora