TaeHyung y JungKook son tan unidos que en ocasiones cometen los mismo errores, aunque este último no podemos llamarlo error en su totalidad pues los bebitos que llegan a sus vidas no son errores si no un descuido.
▪Pareja principal: TaeKook.
▪Pareja...
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Habían pasado ya cinco años desde que TaeMin y JungMin llegaron a la vida de JungKook y TaeHyung, hbían pasado también cinco años desde que aquellos padres se habían convertido en pareja. Los bebitos ya no eran bebitos, eran unos niños de 8 años que iban a la escuela.
— Papá, debo quedarme a entrenamiento hoy y JungMin tiene clase de música. Llegaremos un poco tarde ¿De acuerdo?
TaeHyung frunció el ceño.
— Además, hoy es el día en que nos quedaremos en casa de MinHo, en casa de los tíos JiMin y YoonGi.
— De acuerdo, pero más les vale que me manden mensajes cuando YoonGi pase por ustedes y cuando lleguen a casa de ellos, ¿Entendido?
— Sí señor. —Respondieron los niños al mismo tiempo haciendo reír a TaeHyung.
— Suerte en sus clases, prácticas, sean felices niños.
— Gracias papá, saluda a papá JungKook por nosotros.
TaeHyung asintió observando como sus niños se marchaban dejándolo solo en aquella casa, como lo había estado últimamente gracias a que JungKook había estado llegando tarde durante semanas. El ahora rubio pensaba que tal vez JungKook había encontrado a alguien más, y esperaba que aquel hombre del que estaba enamorado le fuera sincero al respecto, pero JungKook se había limitado a decirle que tenía tiempo extra. Como si TaeHyung fuera a creerle eso.
El rubio terminó su café y se dirigió hasta la salida de su casa para ir a pasar el rato en el parque ya que no tenía clases ese día.
Mientras que JungKook entraba en la casa por la puerta trasera cuando se aseguró de que su chico se fue. El azabache tomó los ingredientes adecuados para hacer una cena romántica y comenzó con los preparativos. Mientras la comida se hacía JungKook decoraba todo con velas y pétalos de rosas rojas y blancas.
Cuando todo estuvo bien acomodado procedió a vestirse elegantemente, él le había pagado a MinHo para que invitara a sus hijos a dormir a su casa para tener todo el fin de semana para ellos solos. Y había funcionado pues sus hijos se habían marchado dejando a sus padres solos.
La vida de la familia Kim-Jeon era increíble, los niños eran maravillosos y la pareja había evolucionado convirtiéndose en una pareja formidable, SeokJin decía que estaban listos para el matrimonio pero los chicos no querían apurar las cosas. SeokJin y NamJoon habían adoptado un niño al igual que JiMin y YoonGi (el hermano de JungKook). Nada podría arruinar la felicidad de las familias.
— Estoy en casa y... ¿A quién le digo esto si siempre estoy solo?
— Hola amor.
— ¡Joder! Qué susto me has dado Kook. ¿Qué haces aquí?
