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Un mes embarazado, exactamente un mes según la última ecografía que le hizo Daysi. Erick apenas se había enterado hace unos días que iba a ser papá, y que tenía a un mini Christopher en la pancita, pero no pudo tomarlo de una mejor manera, él hablaba mucho con su pancita desde entonces, e incluso en momentos, Christopher se había encontrado con su pequeño acostado, solo admirando o acariciando su abdomen, acurrucado en sí mismo.

Su vientre había crecido apenas un poco más, Christopher no sabía cómo era posible, pero desde que se enteró que sería cosa de solo menos de setenta días y que aproximadamente le quedaba un mes y una semana para que Erick le entregara el maravilloso regalo que era un hijo; él había notado que la pancita de Erick crecía y considerablemente también.

Yenny iba a visitarlo con frecuencia, incluso Zabdiel y Joel pasaban agradables días en su casa, Christopher y Zabdiel no habían vuelto a tocar el tema de la beca, eso gracias a que él le pidió que no hablaran de aquello frente a Joel, el Castaño aún estaba algo sensible, aunque intentara no demostrarlo.

-¡Oh, vamos, Zabdiel! ¡Yo también quiero cerveza!

Joel meneó su cola con insistencia. Christopher, Zabdiel, Erick y él habían decidido pasar ese día juntos en la playa, en esa parte alejada que era más que nada privada para las personas que tenían sus casas ahí, aunque realmente la única que se podría apreciar a kilómetros de distancia era la de Christopher, y eso ayudaba muchísimo a que el pequeño Erick no tuviera que esconderse. Christopher y Zabdiel llevaron dos six packs de cerveza, al igual que un poco de leche para Erick y mucha más comida para Joel, colocando unas toallas sobre la arena, se sentaron a apreciar el mar, esperando la hermosa puesta de sol, Christopher le había hablado a Zabdiel muchísimo sobre ella, y Zabdiel deseaba ver si se podía inspirar alguna forma con la imagen.

-Ya te dije que eres muy pequeño, idiota. -Zabdiel gruñó, harto de la insistencia del pobre felino. Joel entrecerró los ojos, alzando una ceja después.

-Oh, claro imbécil. Ahora soy "pequeño" pero cuando estoy entre tus piernas chupándote la Hmmm... ¡Mmm!

Zabdiel cubrió con una de sus manos los labios del menor y este pasó descaradamente su lengua por sobre la palma de la mano del mayor, causando que la alejara al instante, ante la mirada atenta de Erick y Christopher.

-Polla.- Dijo el Castaño, con una victoriosa sonrisa.

-Ugh ¡Eres un puerco, Joel!

Erick rió fuerte al observar la sonrisa burlona en el rostro de Joel, clara señal de victoria, captando así la atención de todos los demás. El minino cubrió sus labios, inclinando sus orejas hacía abajo, él no había querido hacer tanto ruido, solo la risa salió. Christopher dejó un dulce beso sobre su mejilla, acomodándolo mejor entre sus piernas, porque sí, el cuerpo de Erick se encontraba descansando entre las piernas de Christopher, con su espalda pegada al pecho del mayor y este inclinado hacia atrás, apoyado en la palma de sus manos.

-¿Qué es gracioso, Erick? ¿Acaso no te gustaría saber a qué sabe la cerveza? -Erick negó con la cabeza, y soltó un par de maullidos, mientras Joel bufaba y se cruzaba de brazos, volteando el rostro para ya no verlo.- Eres tan idiota, no hace daño si se toma solo una vez, esto de que estés embarazado te hace tan aburrido.

Erick subió la mirada hasta arriba, alto, alto, queriendo encontrarse con los ojos de Christopher, así que se dejó caer un poco más, hasta que por fin sus dulces y grandes ojos conectaron con los del mayor, y le hizo un puchero, recibiendo un beso por parte de este.

-No, nene, no eres aburrido. -El minino sonrió, moviendo un poco su cola, otra vez levantando algo de arena, sintiendo como le hacía cosquillas a su piel, volviendo a reír, llevando ambas manos a su aún pequeña pancita, acariciándola por mero instinto. - ¿Hambre?

Neko Corporation~ Chriserick  JobdielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora