2- La Cita

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Ya en el colegio estaciono el auto en el estacionamiento que nos tienen reservado a Bryce y a mí por ser los capitanes del equipo de fútbol.

Una vez dentro saludo a las chicos del equipo y me percató de Arianny aun sigue a mi lado como si fuese su hermano mayor y dependiera de mi protección.

- ¿cuál es tu primera clase?

- Historia.

- Vale, vamos, esa es mi clase también.

........

Al final de la escuela me quedo a esperar que Arianny salga de su última clase para llevarla de vuelta a casa. La veo salir del aula con Bryce quien claramente le está coqueteando. Mi corazón empieza a acelerarse descontroladamente y mis puños se cierran, los aprieto tan fuerte que las uñas me lastiman en la palma de la mano. Camino hacia donde están y sin dar aviso ya lo tengo contra la pared, sosteniendolo fuerte por el cuello de la camiseta.

- No te le vuelvas a acercar- le digo en voz baja y amenazadora- ¡ENTENDIDO!- lo sostengo más fuerte por el pecho - ¿¡QUE SI ENTENDISTE!?

- Calma amigo, solo estaba hablando con ella- dice alzando ambas manos en son de paz. Lo dejo en el suelo y me arreglo la camiseta. A nuestro alrededor hay formado ya un círculo de curiosos que se han parado a observar lo que sucedía.

- ¿¡QUE MIRAN!?- les grito y veo por el ovillo del ojo como Arianny a unos paso de mi se sobresalta, bajo la guardia y camino hacia donde ella. La agarro de la muñeca y camino con ella hacia la salida entre la multidud.

Una vez en el estacionamiento se deshace de mi agarre y se aleja de mí.

-¿¡ Que diablos fue eso!?

- No conoces a Bryce. Solo trato de protegerte

- Yo puedo hacerlo sola. Gracias - abre la puerta del coche y sube. Yo aún no puedo contener mi rabia y me pongo las manos en la cabeza de manera airada. Subo al auto y conduzco a casa.

No espero que siquiera apagara el auto para ya estar fuera y subiendo las escaleras del porche de entrada.

Salgo del auto lo más rápido posible corro hacia donde esta y halo de ella para hacer que me vea a la cara. - Disculpame.

- Sueltame.

- Si prometes escucharme.

- Vale- suelto sus
mano despacio.

- Perdóname por lo de hace rato. Es solo que no soporto ver como imbeciles como Bryce se quieren aprovechar de todas las chicas que se crucen en su camino.

- Te lo agradezco, pero como te dije, se cuidarme sola - da la vuelta y entra a casa.

No me queda más remedio que hacer lo mismo. Una vez dentro subo a mi dormitorio y me deshago de mi mochila y de mi ropa. Entro a la ducha y al salir me recuesto en la cama por unos minutos...

........

Me despierta el sonido de mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón, me paro de la cama donde me había quedado dormido, lo busco en el suelo donde lo deje y veo una llamada ya perdida de Nathan. Decido ignorarla. Me visto y bajo a la cocina.

Ella es míaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora