76.

14 0 0
                                    

No fui a la escuela al día siguiente.
Necesitaba pensar en mi y en cómo me iba a levantar de esto.
Después de unas horas, alguien tocó en mi ventana.
La verdad creí que eras tú.
Pero era Camilo.

¿Ves que no podía parar de pensar en ti?

Dejar de pensar en tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora