Sospechas

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Dororo despertó mirando a su alrededor, se estiró sintiendo su cuello adolorido. Dormir en el piso de madera no era lo mismo que el pasto definitivamente, se estiraba bostezando, notó que el joven no estaba. Busco con la mirada por todo el lugar, no estaba en la esquina de siempre, de pronto oyó un sonido provenir de otro lado había una puerta al final de la habitación, no lo había notado. Caminó hasta la puerta y escucho sonidos de tela y unos movimientos, golpeó la puerta
Hola? Onii chan estás ahí? - dororo se sintió boba al recordar que era sordo, sólo abrió un poco la puerta para ver que ocurría dentro, un ojo de dororo espiaba mirando el interior vio al joven de espaldas este tenía su yukata bajada hasta la cintura, y su largo cabello suelto le caía por la espalda pero pudo notar que tenía todo su torso cubierto por vendas
Acaso está herido? - susurró sin dejar de mirar, en ese momento algo le llamó la atención, el joven tomó uno de sus brazos falsos y para sorpresa o horror de dororo se lo arrancó dejando a la vista una afilada cuchillada, esta tenía rastros de sangre.
Dororo ante la impresión retrocedió cayendo de trasero, de alguna forma el joven se percató de esto girando la cabeza hacia donde se encontraba ella, la chica sólo se paró y fue corriendo a su lugar, el joven inexpresivo pasó un trapo para limpiar la sangre de su espada.
Dororo estaba sentada en el piso asustada, pensando en que rayos significaba lo que había visto, por qué tenía una espada en su brazo? De donde la sacó? Y la sangre?? Acaso se lastimó a si mismo, es decir.. No pudo haber salido no? Tantas preguntas agobiaron a dororo, que ni se percató del joven que estaba detrás de ella. Ella reaccionó de un salto por el susto
Ho-hola.. - le dijo sonriendo nerviosamente - se dio cuenta que miré algo? Estará molesto?
El joven luego de unos segundos le pasó de largo yendo a tomar un bol con comida que habían dejado, dororo no lo notó pero habían dejado comida hace rato. Este fue a sentarse en su esquina de siempre a comer, esta sólo lo copió y fue a tomar su comida también sentándose alejada esta vez, ella lo observaba comer parecía un niño realmente tenía movimientos torpes y el arroz se quedaba en su mejilla, podría ser que pensó mal las cosas? No le parecía peligroso.. La espada la asustó pero debía haber una explicación no? dororo lo miró un momento y luego sintió terribles ganas de ir al baño.
Rayos es cierto eh estado aguantando por un día.. Pensó molesta ante sus necesidades, esta dejó el plato en su lugar recordando esa habitación pequeña, era un baño.
No quería hacerlo pero necesitaba ir al baño, caminó hasta pasar al lado de el ella por reacción le dijo
Iré al baño un momento.. - dijo como si la oyera, pero este ni la miró, dororo apresuró su paso hasta la puerta entrando y cerrando la detrás suyo. Se recostó contra esta, mirando bien el interior de la habitación, realmente era un baño! uno bonito, dororo se apresuró en utilizar el baño, una vez terminada notó que había un lugar con agua, seguro era para el baño, esta tomo un poco en sus manos mojando su cara y cuello
Que refrescante.. - dijo sonriendo, luego volvió a estar seria al recordar que el estuvo ahí más temprano, quizás habría algo, alguna prueba, algún rastro de a algo. El lugar era de madera como el resto, había una latona de madera grande con agua, un balde al lado seguro servía para bañarse y un mueble que servía como mesa, notó unas vendas amontonadas a un costado, tenían rastros de sangre sin duda pero notó otra coloración más.. Una más oscura, parecía sangre pero en otro tono. Podría ser humana? O de algo más? Dororo revisaba las vendas, luego vio hacia el pequeño desagüe que había para tirar agua se agachó observando el suelo de madera mojado, pasó sus manos notando un ligero tinte rojo.. Todo esto la confundía más, las pruebas apuntaban a que ocultaba algo extraño pero su instinto le decía que no era alguien peligroso o malo, estaba equivocada? Estaba de pie observando el desagüe, miró su mano aún con rastros del agua teñida perdida en sus pensamientos cuando sintió una presencia detrás suya, era él. La estaba observando fijamente, sintió escalofríos cuando este se acercó a ella
Q-que? - dijo retrocediendo, el joven se aproximó más tomando su mano manchada, ella se asustó ante el gesto y estiró su mano
Que te ocurre! No te entiendo nada, ni siquiera hablas o te comunicas - dijo avanzando a él - que es esto? - apuntando a las vendas con sangre - es sangre no? De donde salió eso? Que rayos ocultas? - dijo casi gritando y mirándolo. Este dio media vuelta yéndose
Oye! Espera! - dijo corriendo a él y tropezando con su kimono largo, cayó contra el piso - ay ay..
Se quejó levantándose de a poco y notando que el se fue, solo cambió su expresión a una de incertidumbre.
Que rayos ocultas. . - dijo parándose y saliendo de ahí.
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Se pasó la tarde volando, dororo mantuvo su distancia, sentía que estaba con un muñeco medio viviente que ni hablaba, eso la frustraba al menos podría intentar acercarse. El sol estaba por ponerse, cuando lo miró y pensó, quizás lo estaba juzgando es decir si realmente ocultaba algo malo no la hubiese matado o enojado al encontrarla husmeando? Quizás era ella la que actuaba raro, sería bueno intentar llevarse bien con él aún no sabía cuánto tiempo estaría ahí. Pensaba en que hacer para acercarse cuando tuvo una idea al mirarlo.
Se levantó y caminó hasta la mesa del lugar estaba segura que lo vio por ahí, encontró un objeto y se acercó hasta el joven el cual estaba sentado en su esquina, mirando a una pared. Al llegar a él se agachó logrando llamar su atención
Oniichan podría peinarte? Tener el pelo así suelto debe ser incómodo, dejame de lo atare - dijo sonriendo, quizás así lograría llevarse mejor con el y darle confianza, el joven ladeo su cabeza inexpresivo
Cierto no puedes oírme, sólo quiero arreglar tu cabello - dijo mostrándole el pequeño peine, este miro a su mano y la volvió a mirar
De verdad eres tan extraño - dijo rodeandolo y poniéndose detrás de él, el joven giró un poco mirándola sin entender, dororo tomó su peine - quedate quieto o no podré hacerlo bien
Dororo empezó a peinar su largo cabello, le sorprendió lo suave que era, pensó que sería más aspero pero era suave. El chico se sentía extraño con estas sensaciones pero no le desagradaba, dororo iba peinando cada sección de su cabello debía desenredarlo con cuidado
Si te duele algo solo haz algún gesto - dijo concentrándose en su tarea. Luego de unos minutos tomó todo su cabello recogiendolo en una coleta, el chico estaba quieto dejandola hacer lo suyo.
Taran! Ya quedó, acaso no es más cómodo así? - dijo dororo frente a el orgullosa de su peinado, este pasó sus manos sintiendo como su cabello ya no estorbaba como antes, era cómodo y nunca había sentido eso antes,aunque sus largos mechones caían por su cara aún le parecía cómodo.
Dororo sonrió al notar su agrado, el joven se estiró hasta ella y tomó su mano derecha, abrió su palma y con un dedo escribía sobre su mano algo
Ah?.. Que estas? - dororo entendió entonces, el podía escribir! Sintió como con su dedo formaba las palabras, aunque no sabía mucho de escribir o leer su madre le había enseñado algo
Hya? Maru? - susurraba ella, el volvió a repetir su escritura - podría ser.. Hyakkimaru?
Abrió los ojos en sorpresa - ese es tu nombre? - dijo mirándolo mientras este soltaba su mano
Sonrió feliz, le había dicho su nombre, era un gran avance.
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La continuación! Wuhu, el próximo cap está en procesooo diganme que les pareció, besoos

Compañía para un demonio. (suspendida) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora