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«May, llegué» la mochila cayó al sofá de la casa mientras Peter buscaba a su tía.

«Oh Peter, ¿qué tal el trabajo?» Encogió los hombros dándole una sonrisa torcida.

«Bien, supongo, algo fastidioso y molesto» no sabía si de verdad estaba hablando de su trabajo o de él señor Stark.

«Que mal amor, bueno la cena estará lista en breve, tienes que hacer tu tarea» Asintió, tomó su mochila del sillón y desapareciendo por el pasillo hasta su habitación, pronto vio todo algo desordenado, no le molestaba en realidad, pero era molestoso tener que encontrar las cosas. Hizo su tarea lo más rápido que pudo, para cuando estuvo listo su tía había llamado para cenar, ceno rápido, dio las buenas noches, regresó a su habitación y se puso el traje. Puede que fuera algo pobre y pareciera pijama, pero se había acostumbrado hacía ya un tiempo. Abrió la ventana y con un salto y una telaraña de por medio, fue a dar su patrullaje nocturno en Queens. Realmente estaba tranquilo, sin realmente nada fuera de lo común.

«Es tarde para ti ¿no crees?» La voz ronca del hombre de hierro lo asusto provocando que se echara hacia atrás. La máscara de hierro se removió dejando ver su Perfecto rostro. Y tal vez Peter tenía que dejar de pensar que el señor Stark era sumamente atractivo.

«¿Usted que hace aquí?» El mayor estuvo sentado junto a él segundos después.

«Tomar aire, ¿no te parece que eres demasiado agresivo? Tal vez deberías controlar tu temperamento» Peter lo miro, no podía ver sus facciones, pero él estaba incrédulo ante sus palabras.

«Si claro, lo siento» se disculpó y siguió viendo hacia los edificios.

«Eres Spiderman ¿verdad?» Asintió «¿tu nombre real?» Lo miró otra vez, él no podía darse el lujo de decir su nombre real, pero recordó que el imbécil de Stark no había dejado que terminase de decir su amigable línea en el café. Así que, daba igual.

«Peter» Stark asintió.

«¿No eres el adolescente de la cafetería?» Dios, en serio, que lo odiaba. Asintió. «Mmm... lindo traje, te pegan las mallas» dijo burlón y la paciencia de Peter había desaparecido.

«Escuche señor Stark, le suplicaría que dejara de ser tan cómodo conmigo, nos conocimos hoy y ya estoy odiándolo» Tony río.

«No te enfades arañita» Peter lo miro incrédulo. «No me disculpare por nada, yo no hago eso»

«Bien» el menor terminó con la charla algo rara.

«Eres un exagerado, ni siquiera hice algo malo.»

«Sí, está bien» se quedaron en silencio por unos minutos.

«Bien tú ganas» ¿que gana? Y por qué. «Confeccionaré un traje para ti, como disculpa» Parker trato de darle credibilidad a sus palabras, pero no pudo. «Es verdad» Stark se puso la máscara y se levantó del techo empezando a volar y desapareciendo en el cielo, sin duda moldear a Iron Man era lo más fácil del mundo, psicología inversa. Él de verdad amaba su mente, sus sentidos arácnidos se activaron, la viejita de los churros necesitaba de su ayuda una vez más.


-Mirio

Sr. StarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora