Las tazas de té

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Nino descansaba plácidamente en su nuevo palacio. Alejada de sus traidoras hermanas y del molesto e irritable Fuutaro. Sobre todo después de saber que aquel insignificante humano había jugado con sus sentimientos. Pero Nino se sentía abandonada, traicionada, olvidada por sus hermanas, pero este nuevo palacio era un lugar que le daba el cobijo que necesitaba, y aquello curaba sus heridas. Pero aquel lugar idóneo no era mas que otra trampa del demonio Negi. Y la que sabia de aquello era su hermana Miku. Ella sabia que tenia que rescatar a Nino antes de que fuese demasiado tarde, antes de que el demonio Negi hiciera de las suyas con su pobre hermana.

Entre la calma y tranquilidad del palacio una silenciosa figura apareció. Camino por los pasillos sin levantar la mirada de los guardias reales. Se dirigió hasta la habitación principal. Abrió las puertas mientras que una perpleja Nino observaba la situación. Inmediatamente Nino la encaro, diciéndole que a pesar de todo lo que ella le dijese ella majas volvería a casa. Miku le sonrió y continuo sin tomar mucha atención a Nino. Le pregunto si quería tomar te con ella. Nino inmediatamente empezó a reclamar por aquel entrometimiento, pero Miku continuo de forma tranquila porque eso es lo que quería lograr. Buscaba con esta conversación liberar las trabas que habían en el corazón de Nino para poder ayudarla. Por lo que Miku se dispuso a buscar esa palabra que abriese el corazón de Nino. Ambas se encontraban sentadas tomando el te y conversando de la elección respecto del sabor, y en la conversación Miku encontró las palabras perfectas para poder entrar en el corazón de Nino, y tomando un poco de te dijo lo siguiente "Veo que aun eres una niña".Nino al oír eso, fue como si le hubieran insultado de la peor forma y la herida que tenia se volvió a abrir, pero en vez de estallar violentamente se contuvo. Miku noto eso y dejo que la conversación continuara para encontrar otra puerta para entrar en el corazón de Nino, pero esta vez involucrando a Fuutaro en la temática. Tomo una pausa después de dar otro sorbo de su te y le pregunto a Nino "Nino, ¿Dime, que ocurrió contigo y Fuutaro el día anterior?". Miku había dado en el clavo ahora, solo bastaba ver como Nino dejaría fluir sus sentimientos, lo podía ver en sus ojos y en su expresión, ahora Nino no tenia como bloquear esa pregunta de la misma forma que antes, debido a que ahora su corazón se había suavizado mucho mas en comparación a un principio. Nino apenas pudiendo contener sus emociones exclamo con fuerzas mientras apretaba sus dientes "Ese sujeto. Nunca lo perdonare"

Al oír eso Miku quedo sorprendida y asustada, no esperaba aquella respuesta, que cosa terrible había hecho su amado Fuutaro. Rápidamente le presto mas atención a Nino y dejo que su hermana hablara. "El es de lo peor, se disfrazo y me ha engañado", decía Nino mientras dejaba que lentamente sus emociones salieran al exterior. Pero aun seguía conteniéndose, por lo que Miku paso a una acción un poco mas agresiva y comenzó a responder de forma mas cortante y poco interesada, para quebrar a Nino. La conversación continuaba entre sorbo y sorbo de te. Nino ya no podía soltar mas sus emociones, se escapaban cada vez mas junto con sus palabras y sus gestos. El hecho de que la persona que había germinado aquellos hermosos sentimientos de amor dentro de ella haya sido ese castroso humano había provocado que Nino diera rienda suelta a sus emociones. Pronto se produjo la catarsis que Miku buscaba en un principio, y Nino empezó a hablar de como sentía que sus hermanas la habían abandonado y la habían dejado sola, y que ya nada volvería a ser lo mismo, finalizando con la pregunta de que si realmente valía la pena seguir viviendo en el templo con el resto de sus hermanas.

En ese momento Miku la detuvo con una sola frase "Porque nosotras somos familia, hijas de una sola madre. Somos las 5 puntas de una estrella que cayo del cielo, No es eso suficiente para nosotras". tomo otra pausa y prosiguió "¿Crees que hemos cambiado mucho y que tu no has cambiado nada?. Te equivocas. Te equivocas mi querida hermana. Para nosotras tu también has cambiado. Todas a pesar de provenir de la misma estrella hemos cambiado y eso nos ayuda a ser mejores porque entre nosotras nos ayudamos a completar los quintos que nos faltan para alcanzar el cielo, por eso es bueno ser diferente. Pero no por eso debemos dejar de estar juntas. No puedes separar lo inseparable. Y sin ti el templo es un caos y nosotras no estamos completas". Con cada palabra de Miku el corazón de Nino se abría cada vez mas dejando escapar aquellas emociones que la tenían atormentada y atrapada en el pasado. Pronto, la maldición de Negi comenzó a desaparecer, y el templo había cambiado, ya no era el mismo. Nino ahora lo entendía todo. Cerro los ojos y exclamo "Supongo que ya es hora de que me endurezca, olvidar el pasado y aceptar el presente". Terminada la frase se retiro de la habitación y regreso con unas tijeras en sus manos.

Miku creo que también debes endurecerte.

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