¿Realmente eres tú?

Capítulo 2

"Hay un mundo vacío y profundo en mi corazón, sálvame.
Quiero reiniciar.
Ojos solitarios atrapados en la oscuridad.
¿Hay alguien que tome mi mano?Incluso si soy una existencia pequeña.
No me pisotees, ven conmigo".
-Reset, Tiger JK, Jinsil.

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Detroit

Desperté acostada en una cama de hospital, no recordaba absolutamente nada; mi nombre, ¿quién soy?, ¿de dónde soy?, ¿con quién vivo? y lo más importante, ¿Cómo terminé en un hospital?

Volteé a mi costado y estaba una señora delgada y alta, con cabello castaño atado en una coleta, ojos pequeños color café claro, su cara era un tanto ovalada y tenía labios muy delgados, se veía aproximadamente como de unos 45 años; me tomó de la mano diciéndome que la tenía preocupada, la miré un tanto confundida, dijo que era mi mamá y que todo estaba bien pero yo no recordaba nada, ni siquiera a ella.

El doctor dijo que estaba sufriendo de una pérdida parcial de memoria debido al trauma y el estrés por el que pase, que podía ser temporal y que existía la posibilidad de que no recuperara mi memoria jamás.

A las pocas horas me dieron de alta, me quedé sentada esperando a mi madre en lo que iba por el auto; a los pocos minutos llegó una chica con el cabello corto, ondulado y café oscuro, tenía los ojos negros y muy profundos, una nariz respingada y labios ligeramente delgados y estaba observándome con desprecio, empezó a tironearme del cabello y decirme que me extrañaba y que ya no tenía con quien divertirse, mi mamá la detuvo de inmediato en cuanto la vio, la chica la miró confundida y mi madre dijo que llamaría a las autoridades, la chica se excusó diciendo que me confundió con otra persona, me pidió perdón y se retiró.

Después de lo que paso seguía confundida, ¿quién era esa chica de hace rato?, tenía muchas preguntas en mi cabeza, así que decidí dejar de pensar y disfrutar el viaje de regreso a Nueva York.

Cuando llegamos a Nueva York teníamos que ir al hospital a revisar mis heridas, me encontraba sentada en una cama mientras leía un libro y de la nada un chico con cabello rubio, labios gruesos, una cara redonda y unos ojos pequeños marrones; estaba bajando por la pared del hospital, se detuvo en mi ventana, me miró y me dijo "hola Irene", lo miré un tanto asustada y confundida, no supe que responderle, no tenía ni la menor idea de quien era pero él parecía conocerme, siguió bajando por la pared hasta llegar al suelo y corrió perdiéndose así de mi vista.

Me encontraba ahora caminando hacia el elevador después de haber comprado unas galletas en la cafetería del hospital, un chico se subió conmigo y empezó a hablarme como si nos conociéramos incluso me iba a abrazar pero me retiré, me preguntó si lo recordaba que era mi mejor amigo Harry pero aun así no tenía ni la menor idea de quien se trataba, pensó que estaba jugándole una broma y empezó a jugar conmigo dándome pequeños golpes en la cabeza, una chica de cabello castaño con rulos y un rostro muy lindo se acercó a nosotros preguntándonos que estaba pasando pero yo tampoco tenía idea, fuimos al cuarto en el que me encontraba y les expliqué que había perdido la memoria pero les agradecí por visitarme, ambos estaban sorprendidos y sin alguna palabra que decir al respecto; al poco rato se excusaron diciendo que debían irse ya que tenían deberes, se despidieron y sin más se fueron.

Al pasar de unas horas, el doctor a cargo de mi cuidado me dijo que podía retirarme y que estuviera tratando de recordar sobre lo que pasó, así como también intentar recordar un poco sobre mi vida.

Al salir del hospital nos dirigimos directo a casa en el auto de mamá, durante ese transcurso me quedé dormida, al poco rato mi mamá me despertó para que bajara del auto y entráramos a la casa, era bastante grande por fuera con la fachada de color azul y una cerca que tapaba el jardín, por dentro era bastante amplia, se encontraba el comedor, la sala, la cocina y un montón de puertas que no sabía a donde daban; mi madre me guío a mi habitación que se encontraba en el piso de arriba, las paredes eran celeste y lila, era bastante grande e incluso tenía un mueble donde estaba una torre hecha de bloques de construcción, realmente me encantaba mi habitación.

Por la noche me encontraba en la cama de mi mamá, me mostró unas fotos del álbum familiar para tratar de recordar, me preguntaba por qué no había fotos mías de bebé, mi madre dijo que era adoptada que si no lo recordaba, pero no tenía ni la menor idea de aquello; después de unas horas de risas con mi mamá, me quedé dormida.

A la mañana siguiente me levanté y me puse mi uniforme para ir al colegio, mi mamá se ofreció a llevarme y al cabo de unos minutos me dejó en la entrada principal, al entrar ya se encontraban dos chicas Tiffany y Sunny, supongo que eran mis amigas antes de perder la memoria; me llevaron al salón de clases y me indicaron cual era mi asiento, mis compañeros empezaron a cuestionarme sobre si enserio había perdido la memoria y que se sentía, esa clase de cosas.

El profesor me mandó llamar no dijo nada importante solo que tratara de seguir con mis notas a pesar de haber perdido la memoria, mientras regresaba al salón por el pasillo, escuchaba ciertos murmullos de los demás alumnos sobre mi desaparición, por un momento tuve un pequeño déjà vu donde yo estaba parada en medio del pasillo y varias compañeras se reían de mí, estaba bastante confundida acerca de eso así que decidí mejor ignorarlo.

Terminando las clases Sunny había dicho que fuéramos con los demás al karaoke, al poco rato se percató de que olvidó su billetera así que invitó a nuestra otra compañera Nicole para que ella pagara, técnicamente la usó, cuando llegó la hora de pagar al parecer su tarjeta no tenía crédito así que fuimos llevados a la estación de policía, nuestro profesor tuvo que ir a hablar con el oficial para que nos pudiéramos ir, ofreciéndose él para pagar la cuenta, después de terminar de hablar con el oficial y regañarnos nos dejó ir a nuestras casas.

Mientras esperaba por el autobús me di cuenta que Nicole estaba sentada a un lado mío, decidí hacerle platica y le dije que mañana yo compraría algo para ella debido a que nos invitó, la intenté tomar del brazo pero se alejó me dijo que si estaba fingiendo mi pérdida de memoria, así que supuse que no éramos tan cercanas antes; al llegar el autobús me dijo que fuéramos por separado ya que no quería verme, asentí y dejé que se fuera primero.

Tomé el siguiente autobús y al cabo de unos 10 minutos me encontraba caminando de regreso a casa, mientras recorría la calle me encontré con una de mis vecinas afuera de su casa, se encontraba reportando un robo de sus joyas a la policía; en eso me topé con mi mamá que estaba esperándome afuera de la casa, decidimos entrar y dejar que los oficiales siguieran con sus asuntos.

Por la mañana salí a correr y después de un rato decidí regresar para alistarme e ir al colegio; estando ya en mi salón llegó Nicole junto con un detective preguntando por mí, lo miré y me dijo que abriera mi casillero de mala gana pero yo no recordaba la contraseña así que no podía abrirlo, el detective pidió un martillo pero no fue necesario ya que el chico que me saludo por la ventana aquella vez en el hospital, tomó la silla de su escritorio y golpeó con gran fuerza la puerta de mi casillero, cayéndose así por completo, me miró y me sonrió y de ahí regreso a su lugar a dormir; cuando me fije que había en mi casillero estaba una caja delgada de color gris, la tomé en mis manos y decidí abrirla, se trataba de un collar con unos pendientes, Nicole dijo que era de su madre así que el detective me dijo que lo siguiera pero aún estaba sin entender cómo es que las joyas estaban ahí, el detective volvió a decirme a gritos que lo siguiera pero yo no reaccionaba y justo cuando el detective me iba a llevar, Harry me tomó del brazo cayéndose así la caja y me sacó del salón, a pesar de que le dijeron que se detuviera no lo hizo y de la nada dejé de escuchar los gritos de los alumnos y el detective.

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