Un futuro brillante [Killerchainsaw]

Quiero ver su pequeña risa

Resumen: Dos años después del capítulo anterior, Maiya ya tiene  cuatro años, Yui tiene 1 año (ya que todavía no ha cumplido 2 años), Harumi y Matsuri ahora están casadas ​​y tienen un hogar.

Recientemente, han dado a luz a una pequeña y linda bebé.

Con cada día que pasa, la joven Maiya se da cuenta de que su hermana pequeña casi nunca sonríe a otra persona que no sea su "Mama" (Mei), y desea poder verla sonreír más a menudo, este deseo se vuelve más evidente para todos cuando la abuela de las pequeñas y Harumi van de visita.

Mei dejó escapar un suave suspiro mientras estaba de pie en la cocina, apoyada en el mostrador, mientras que había dejado de secar los platos limpios de ayer, y ahora estaba mirando a su esposa y a su hija mayor, observándolas mientras hablaban alegremente.

Sin embargo, la Madre de cabello oscuro frunció el ceño cuando notó qué tan rápido la joven comía su desayuno, apenas permitiéndose respirar entre bocados grandes.

"Reduce la velocidad, Maiya, te vas a atragantar así"

Con los brazos cruzados sobre el pecho, Mei hizo que su hija de cuatro años la mirara y frunciera el ceño, mientras disminuía la velocidad y continuaba comiendo su cereal.

Yuzu solo se rió nerviosamente y pasó una mano cariñosa a través del cabello negro azabache de Maiya.

"Aww Mei, sabes que solo se está apresurando porque está emocionada por lo de hoy" la rubia le dio a su esposa una sonrisa comprensiva, lo que hizi que Mei abriera los brazos y solo suspira levemente, volviendo los brazos a los costados mientras se acercaba a su hija de mayor, inclinada a su lado para que la joven se volviera a mirarla en respuesta.

"Escucha, Maiya, sé que estás emocionada de que tu abuela venga hoy, pero apurarse así no hará que aparezca más pronto, me temo", explicó mientras apoyaba una mano reconfortante sobre la de Maiya, lo que hizo que ella haciera un puchero y cruzara los brazos, casi burlándose de cómo su madre madre había hecho lo mismo hace unos momentos.

"Pero Mamá Harumin también vendrá. ¿Vendrá Matsuri con ella?" Preguntó la niña cuando retiró su atención de su madre natal y, en cambio, se volvió hacia Yuzu, con esa sonrisa alegre característica que regresaba a sus labios mientras hacía que su madre rubia le devolviera la sonrisa nerviosa y encogiendo los hombros ligeramente en respuesta.

"No sé, Maiya-chan, tendremos que esperar y ver por ahora"

Declaró como era de esperar, dio como resultado que la feliz sonrisa de Maiya se desvaneciera y en cambio pareciera decepcionada, antes de que pareciera que su estado de ánimo casi había desaparecido, sin embargo, para mantener feliz a la pequeña niña, Yuzu rápidamente pensó en algo para cambiar el tema y, con suerte distraer a Maiya de lo que sucedería más tarde en el día.

"Oye, lo sé, una vez que hayas terminado tu cereal, ¿por qué no vamos a despertar a tu hermanita? Creo que todavía está en la cama" sugirió Yuzu con una expresión alentadora para la pequeña, causando que ella se animara casi instantáneamente cuando solo asintió con la cabeza rápidamente en respuesta, antes de no perder tiempo en terminar su cereal, para que pudiera ir y despertar a su hermana menor.

Viendo que su plan había funcionado exitosamente, Yuzu simplemente le guiñó un ojo a Mei y le hizo sonreír suavemente y asintió, antes de levantarse de nuevo y comenzar a regresar a la cocina, pero se detuvo cuando notó que la joven Maiya había devorado bastante rápido el resto de su desayuno para poder saltar de su silla y salir corriendo a la habitación de su hermana pequeña para ir a despertarla.