¡Esto no es un diario!

Nota

Cuando era pequeña los profesores no tenían esperanzas en mi.

Actualmente tampoco.

Pero con el tiempo de los años me he dado cuenta de una cosa.

No importa cuales sean tus notas.

Que tan bueno seas en matemáticas o en lengua.

A medida que iba pasando el tiempo era capaz de comprender que la escuela, a pesar de que nos enseña todo lo que debemos sabe, también nos corta las alas.

Hay personas, como yo por ejemplo, que no servimos para memorizar formulas, fonemas o cualquier otra cosa.

Pero en cambio pueden crearte un mundo ideal con unas cuantas palabras. O crear el mayor invento de la historia. Incluso puedes encontrar personas que improvisan de la nada historias fantásticas, o crean platos extraordinarios con cuatro cosas que encuentra en la nevera.

Pero a todas esas personas les enseñan una cosa. Las notas lo valen todo en este mundo.

Pero cuando llega la verdad. Cuando el momento, para el que nos han estado entrenado toda la vida. El talento nato siempre gana a una simple nota.

No pienses que una nota va a marcar tu futuro.

Te lo dice alguien que esta cumpliendo su mayor sueño y ni siquiera se ha sacado el graduado en el bachillerato.