Ya solo me faltaban un par de cientos de metros para llegar al hospital y cada vez estaba mas nerviosa y preocupada, solo podía repetirme que etaria todo bien.
Llegue al hospital y pregunte a la recepcionista la habitación donde se alojaba Eren a lo que me respondió.
-Eren Jeager esta en quirófano ahora mismo pero puede esperar en la sala de espera del quirófano-
Asentí y me dispuse a ir a la sala de espera. Una vez allí vi a Mikasa al lado de una señora que supuse que era la madre de Eren, estaba todo en silencio la madre de Eren estaba hablando por teléfono con una voz apenada mientras que Mikasa estaba sentada mirando el suelo, empecé a caminar a un sitio alejado de Mikasa ya que me daba bastante miedo y no parecía que estaba en condiciones de hablar al igual que yo, mientras caminaba me tropecé con la esquina de una silla haciendo que saliera de mi boca un pequeño quejido.
-Aahg-
Mikasa escucho mi quejido, levanto la cabeza y me miro muy fijamente, solo nos miramos durante poco menos de 2 segundos pero se me hicieron eternos, ella se levantó y se acerco corriendo hacia mi con cara de psicópata.
-Tú, miserable perra, por tu culpa Eren esta así- exclamaba mientras se acercaba a mucha velocidad.
-¿Que..? yo..yo.. no no quería- dije con mucho miedo.
Mikasa se puso enfrente de mi y me pego un cachetón.
-Miserable puta, voy a matarte me oyes guarra-gritaba con la misma cara de psicópata.
Yo por reflejo le metí un puñetazo en la nariz haciendo que esta sangrase.
-HIJA DE LA GRAN PUTAA-grito aguantándose la nariz-
Fue a abalanzarse sobre mi pero justo la madre de Eren la sujeto del abdomen, Mikasa empezó a agitarse mucho dándole en la cara a la pobre mujer, esta por el golpe la soltó, yo ya me estaba preparando para el ataque de Mikasa pero esta se quedo quieta mirando con ojos llorosos a la madre retorcerse de dolor mientras se sujetaba la nariz que estaba con mucha sangre. Poco después vinieron los de seguridad y se llevaron a la madre de Eren a urgencias, Mikasa lo único que hizo fue acompañarla mientras lloraba, la nariz de la madre se veía muy mal así que pensé que seguramente se la había roto.
Me quede estupefacta ante la escena que acababa de contemplar, una vez las dos se fueron me senté, en ese momento solo podía pensar en Eren y la verdad que lo que acababa de pasar no me importó mucho. estuve esperando unas 4 horas en la sala pero nadie aparecía, ni ningún medico ni Mikasa o la madre, estaba completamente centrada en la puerta del quirófano esperando que saliese algún medico y me diese una buena noticia, cuando, note que el móvil me empezó a vibrar, era mi madre que me estaba llamando, sobre la marcha lo cogí.
-¿Hija donde estas?-pregunto mi madre
-En ningún sitio mama- respondí sin mucha coherencia
-Bueno mira me da igual pero como no estés aquí en 30 minutos te voy a arrestar sin play y sin salir- dijo con una voz mas que amenazadora.
-Vale mama ya voy...-
Quería quedarme allí a esperar una respuesta pero no podía así que recogí mis cosas y comencé a caminar con paso ligero hacia mi casa. Una vez llegue deje mis cosas en la estantería de la entradilla y ,e fui cabizbaja hacia mi cuarto.
-Annie donde habías esta... ¿Amor que te pasa?-
Volteé la cabeza para ver a mi madre y no pude contestar ante esa pregunta, lo único que hice fue asentir y retomar mi camino hacia mi cuarto, mi madre ante este comportamiento no supo como reaccionar y solo me dejo ir.
Me tumbe en mi cama mirando hacia el techo y comencé a llorar, puse mi cara contra la almohada para que ni mi madre ni mi hermano me escuchasen, solo podía pensar en Eren y que le iba a pasar...
Continuará...
