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Ese momento tan incómodo no sabía que hacer, mi garganta está seca, le pido a Mia que me acompañe a beber algo. Era una excusa para pasar cerca de el. Mía está muy concentrada cantando una canción y mientras caminábamos no se perdía del vals. Debo admitir que Nina, es muy querida, sus padres no podían contener las lágrimas. Cuando llegamos el vals acaba, y empiezan los aplausos. Tomo un jugo de naranja, estaba delicioso, y Mía uno de maracuya. Se torna un silencio, los ayudantes de la música buscan un micrófono, era el momento del discursó. No falto uno de sus amigos del chico misterioso que grita, y para colmo me apunta: "esa no es la chica que te sonríe?!".

Ese momento sólo pensé en que la tierra me trague, esta loco, todos volcaron a mirarme. Me hago la des enterada y me pongo a tomar mi jugo de golpe. Mía me mira con sus ojos bien abiertos, y cuando dejo el baso en el taburete, suelta una carcajada más fuerte, no se que me dio más risa el grito de aquel loco o la risa épica de mi amiga.

Ignore lo sucedió, no pienso hacer esto de nuevo, nunca. Aquella mujer despampanante quiso hacer el primer discurso. Hablo con tanto cariño y con fluidez que se le caían las lágrimas a más de uno, sin contar a ella, su esposo y sus dos hijas. Dijo que era el momento esperado por todos, que nunca esta noche se borre de la memoria de Nina, y que siga siendo aquella hija maravillosa. Termina y le pasa el micrófono a Nina, ella a comparación de su mamá, su voz tambalea las primeras palabras. Agradece a todo por venir, sus amigos y sus familiares, a su madre por: "esta noche fabulosa". Ella luego le pasa el micrófono a su padre. El lo agarra y sólo nos desea buenas noche-muy breve. El dj puso al instante la música para que no se repitiera es silenció.

Elio se acerca a hablar conmigo, y me pide que bailemos. El no era tan alto, ni era muy amigo de Hugo porque ni se saludaron -eso es lo que pienso, esperó no estar errónea- su cabello era negro, su piel blanca y sus ojos eran verdes azulados. Por que no me habré fijado en el?. Tal vez porque, cuando llegó, llego con Fabiana. Son primos, nunca me paso eso por mi mente. Quiero bailar, esta sonando la famosa Canción Lepo Lepo. Acepto y me lleva de la mano a la pista de baile. Dios por qué me lleba de la mano!? -pregunta gritando mi mente intrigada-. En la pista de baile me suelta la mano y empezamos a bailar. Estira su brazo y me agarra de la cintura hacía el. Su cara se acerca a mi cara. Mi torso está pegado al de el. vuelca su cara y me dice al oído: "estas muy bella para esta noche". Aleja su cara de la mía, y me proporciona media sonrisa. Me pongo roja, la única palabra que sale de mi boca fue "gracias". Pongo ambas manos sobre su pecho eh intento separarme de el. Se aleja de mi, puso una cara rara, pero seguimos bailando. bailamos unas cinco canciones. Es mucho tiempo y ya estoy cansada, los tacos me están matando. Me acerco a el y le digo que por favor, fuéramos a sentarnos. El asiente y nos juntamos con Mía y con Gretta -para mi suerte Fabiana no estaba con ellas-. Ellas como nunca me empiezan a molestar con el. Lo veo a el incómodo, pero sería mas incomodo para ambos que estuviera ella aquí.

Ese momento intentó despejar mi mente, quiero calmarme. Pongo ambas manos sobre mi cara y no veo nada. Siento una mano en mi hombro. Las bajó y veo que es Hugo -gracias dios por este empujoncito- me pregunta si estoy bien y yo asiento con la cabeza. Luego con su bella voz me dice: "quieres tomar algo? vamos". Se me quita el cansancio inmediatamente y me paro frente de el. Elio al verme que me estaba yendo con Hugo me agarra la mano y me da un pequeño tirón mientras me grita: "Vanesa, que acaso no estabas cansada?". Mía y Gretta eran las beneficiadas de ver todo este espectáculo. Ambas gritaron: "Uhhhhh". Ese rato mi cara cambió completamente y las miro con cara furiosa. Mis ojos se abren como platos y clavó una mirada asesina ah ambas.

Luego lo miro a Elio y le digo con toda la amabilidad posible -ese momento que me grito quería patearle la cara- : "Lo estaba, ahora voy a tomar algo, ya vuelvo".

Voy a lado de Hugo atravesando toda el salón para llegar a la área de los jugos. En estos momentos solo quiero agua. Mientras caminábamos charlábamos y me dice:

-Menos mal que te salve de ese tipo, vi como quería poner tu mano en tu cintura mientras ustedes se abrazaban.

-Como?! sólo me acerque a el para pedirle que nos sentemos. Y que tiene el de malo ese chico?

-Vanessa, los estuve viendo todo el rato, además ese CHICO que vos decís, ya salió del colegio el año pasado y no se sí estudiará o no!

Bueno, al escuchar esa respuesta mi cabeza se divide en dos: la primera es que como voy a ser tan estúpida de no preguntarle su edad, parece tan joven, yo tengo quince y el cuantos tendrá dieciocho o diecinueve. Y la segunda que me pone de buen humor por un momento es que me estuvo viendo, o sólo me habrá visto ese momento en el que me agarró de la cintura? Se preocupará por mi?-estoy dando brincos al compás de la música-Bueno ignoro ese pensamiento porque el chico misterioso me agarró más tiempo y no me dijo nada, o será que la única que se dio cuenta fue Mía?

Quien creía que erasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora