Isekai no maho to bōken: Zaga

Capítulo 1 "Conociendo Aika"

Tras aproximadamente media hora de viaje, al final llegamos a Aika, la ciudad donde empezaría a vivir en zaga, este mundo de fantasía el cual pareciese sacado de un anime de aventuras, cuando bajamos del barco, pude ver la ciudad, era una ciudad bastante grande, con casas de piedra. La ciudad estaba construida en una especie de montaña, tenía varias alturas, para ir de una a otra, había que bajar por largas escaleras de piedra. La ciudad estaba separada a la mitad por un largo río, el cual caía por las diferentes alturas en unas grandes cascadas que salpicaban los extremos más cercanos a ella, en sí, el río no parecía tener corrientes fuertes a pesar de las cataratas y pareciese que el agua estuviese a una temperatura en la que uno podría meterse a darse un baño.

"¿A dónde se supone que vamos?" –Pregunté a Rao-

"Vamos a ir a la casa del líder de la aldea, es un antiguo amigo mío, si le comentamos tu situación y le doy algo de la mercancía que he traído, te dejará una de las casas libres"

"Ojalá la casa que me toque sea cerca de las cataratas, me gustaría escuchar el sonido del agua al caer, tiene que ser tranquilizante."

"Si haces eso, tienes riesgo a que si llueve mucho se te inunde la casa." –Mitsu apareció delante de mí con una sonrisa- "No creo que quieras que se te inunde la casa."

"Pues la verdad es que no."

"En ese caso, lo mejor será esperar que tu casa esté en la zona más alta y cerca del bosque."

"Tampoco eso, no vaya a ser que al chaval se le cuelen bestias del bosque en la casa." –Dijo Rao mientras reía en alto-

Me giré para echar otro vistazo a toda la ciudad, esta vez desde la zona más alta. A lo lejos, se podía ver la torre la cual no se puede ver la cima.

"Esto... ¿Qué es esa torre?"

"Es la Torre Morella, en su interior solo hay escaleras, pero nadie ha conseguido nunca subir hasta el final, así que seguimos sin saber qué hay. Está considerada como uno de los grandes misterios de Zaga, como no se sabe qué hay, ni quién la construyó, ni el propósito..." –Dijo Mitsu acercándose a mi.- "La verdad... Me gustaría ir un día a explorarla, pero me da miedo ir sola, hay bastantes monstruos en esa zona y no quiero arriesgarme."

Tras andar aproximadamente una hora, al fin llegamos a la casa del líder de la aldea. Era una casa enorme, de dos pisos y tenía una granja al lado. Desde allí se podía observar todo Aika y gran parte de la llanura que hay a las afueras de la ciudad. Tras un rato, entramos a la casa.

"¡ESTAMOS AQUÍ!" –Gritó Rao-

"Que sí, que sí, he visto aterrizar tu barco. ¿Ahora a qué venís? Si es que te haga otro préstamo no lo haré hasta que me devuelvas los diez mil zénits que me debes." –De las escaleras bajó un hombre con el pelo negro revuelto, bastante alto y fuerte. Iba vestido con una camiseta negra con mangas rotas y unos pantalones cortos.- "¿Quién es ese crío?" –Preguntó mientras se encendía un cigarro-

"Este es Nanashi, es un chico que encontramos en una isla, no sabe cómo llegó y no tiene recuerdos de nada, venimos para preguntarte si le dejas una casa a cambio de que trabaje como guardián de Aika."

"No puedo decir que sí ni que no. Antes de nada debería ver sus habilidades de combate, no quiero que me metáis a un inútil en las filas de defensa de Aika." –Dijo mirando con seriedad a Rao-

"Tranquilo Morinaga, me comprometo a entrenarle yo."

"Eso me deja aún más intranquilo..." –Morinaga suspiró, se quitó el cigarro de la boca y echó el humo- "Chico, ¿Qué talentos tienes?"

"No sé... Nunca he manejado espadas ni nada."

"En ese caso, será mejor que te entrene yo" –Morinaga cogió una espada colgada en la pared y me la dio- "Vayamos a la parte de atrás de la casa, te enseñaré allí a luchar."