Capitulo 3.

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— ¡Te dije que estoy bien Sam, no tienes por qué preocuparte! — Le aclaré tratando de darle fin a su inesperada llamada.

Al parecer mi silencio repentino al mensaje de Adela le había dado la potestad a mi amiga de decirle a Sam que la fotografía junto a Kate había causado una separación entre las dos. Lo que era completamente una locura. Al encender mi teléfono en la mañana encontré un montón de mensajes de Kate y Sam explicándome la situación y lo mal que se sentían ambos por no haberme dicho antes lo que ocurría entre ellos y mientras arreglaba mi casillero la primera llamada de Sam contrario mi día. Sam me había hecho algunas llamadas todas sin éxito pero luego de ver su insistencia decidí contestar su llamada.

— Luna, sé que todo fue difícil para los dos pero puedo asegurarte que lo que ocurrió con Kate no fue planeado.

— Quiero dejarte algo bastante claro Sam, en este momento nos encontramos a 2000 Km de distancia por lo que no me importa lo que ocurra lo que pase al otro lado de mi teléfono. No me importa si la besaste, si te acostaste con ella o si piensas que hiciste una brecha entre Adela y yo lo que me importa es que no vuelvas a levantar tu teléfono para llamarme ¿Quedo claro?

Y era completamente cierto, lo que ocurriera al otro lado de la línea había dejado de importarme justo en el momento que mi cuerpo abandono el condado. Antes de que pudiese decir una llamada más corte nuestra conversación. Deje algunos libros para la próxima clase y cerré mi casillero con rudeza sin percatarme que detrás de él se encontraba Lucas.

— ¿Cuánto tiempo tienes allí?

— Lo suficiente para saber que tuviste un mal rompimiento.

— No es eso, terminamos en buenos términos pero ayer recibí unas fotografías y cree que estoy molesta por eso.

— ¿Y lo estás? — Preguntó

— ¡¿Parezco molesta?! — Expresé estresada de su pregunta.

Él me lanzó una mirada cuestionando mi respuesta.

— Bien lo estoy pero no por eso, me irrita la idea de saber que me pueden asignar como la madrina de Kit y eso me perturba.

Había pasado la noche pensando en lo que sería mi vida si a alguno de los encargados del programa se le ocurriera ponerme de Madrina de Kit, incluso una de las tantas pesadillas que había tenido a lo largo de la noche hizo que despertara más temprano de lo habitual. Eso sería la cereza del pastel; un pastel que me aniquilaría en el primer bocado. Lucas soltó una carcajada al ver mi expresión de pánico, algo que seguramente también haría si fuese yo la que estuviese viéndome

— Ellos escogen a sus padrinos, Leslie le da la oportunidad de escoger entre los perfiles de los voluntarios y dudo mucho que ella le permita escoger una chica. Eso nunca ha pasado. Así que tranquilízate un poco. — Aseguró dándome un poco de tranquilidad.

Las palabras de Lucas me dieron algo de tranquilidad y la esperanza de que probablemente terminaría mi último año escolar en serenidad y paz. La presencia de Kit realmente me resultaba intimidante y pensar que estaba a punto de exponerme al verdadero peligro me hizo creer que Leslie me detuviera había sido una señal celestial. ¿En qué demonios estaba pensando? Me cuestione al darme cuenta de mis acciones. Estaba segura de que no quería pasar mi último en el hospital o en una celda de prisión esperando ser condenada por un crimen que no había cometido. Lucas y yo caminamos hasta mi salón de inglés y mientras mi profesor llegaba le hable de mis viejos amigos en la escuela, le explique algunas cosas de mi reciente drama con Sam y lo escuche reírse de las viejas anécdotas en Atlanta.

El primer periodo de la escuela fue tranquilo, leer algunos libros para la próxima clase y hablar de verbos y conjugaciones. A la hora del almuerzo me senté en una de las mesas a esperar a Lucas pero cancelo por una junta en su club de teatro. Termine de comer mi fruta sola y al finalizar el receso regrese a mi clase de historia. A mitad de la clase una notificación de correo electrónico encendió la pantalla del celular. Había un documento adjunto del programa, no había indicaciones solo el documento con las siglas NDA.

Déjame Soñar Contigo(Disponible En Librerías)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora