Cada cierto tiempo, Satan, el gobernante del infierno realiza,como medio de entretenimiento, un tribunal para dar a dos de sus muchos habitantes, la oportunidad de concederles cualquier deceo que quieran. Con algunas excepciones, como por ejemplo: mandarlos al cielo para luego ser interrogados por Dios y determinar si vuelven o no al infierno. Eso depende de el y nunca sucede.Satan, siempre escogía para los tribunales a los más malvados y perversos de sus habitantes. De esta forma, se entrenia al ver que diabólicos deseos tenían estas personas en sus corazones y así, podía corromperlos aún más, y volverlos almas sin esperanzas de redimirse y asi, que nunca puedan llegar a salir del infierno.
Pero... en esta ocasión, el gran Satan, decide hacer algo nuevo. y escoge para el tribunal, a una de las personas que más tiempo haya estado en el infierno y a unos de los mas nuevos.
Es así como en el día del tribunal comenzó. Satan llamo a las dos almas desafortunadas que hiban a ser juzgadas.
_ ¡Llamó ante mi a William Kellog y Sheldon Miller!
De la nada, aparecen dos personas enfrente de Satan. Quienes a la vez, estaban totalmente atemorizados, sin saber porque se encontraban delante del temible soberano. Al ver esto, Satan les habla.
_ Tranquilos, mis afortunados amigos.!- habla con un tono carismático- No hay nada de que temer, han sido convocados aquí porque hoy pienso concederles cualquier deceo que tengan.
Ambos oyeron estas palabras pero solo uno se entusiasmo por ello.
satan ve al humano entusiasmado y se dirige a el.
_ Muy bien William, creo que tu quieres ser el primero en pedir tu deseo- le habla teniendo una gran sonrisa en su rostro- y tu Sheldon, espera tu turno.- y así como lo hizo aparecer? lo desaparece, y dirige su mirada a William- y bien William, cual es tu deseo?
_ ¡Quiero volver a la vida!- pronuncia estas palabras con tanto ímpetu que se queda sin aire-
Satan, al oír esto, no puede aguantar la risa.
_JAJAJAJA- se ríe sin control, y fijándose al causante de su diversión... le dice- pobre William... jajaja, Ni te imaginas cuántas almas desesperadas me han pedido ese deceo, con esos mismos ojos llenos de esperanzas que tienes- y entre risas le responde- lo siento amigo mio, pero eso no se podrá hacer, jaja.
William frustrado ante tal respuesta, pregunta:
_ Entonces quiero ir al cielo
Súbitamente, satanás, para sus carcajadas y mira a William, con un rostro lleno de furia, como si hubiera sido insultado y se proponiera a masacrar a golpes al que oso ofenderlo.
_ ¡Mira, basura insignicante! ¡llevas aquí en mi imperio 20 minutos y ya quieres largarte! ¡será mejor que deseches la idea de que podras salir de aquí! ¡¡y pide tu miserable deceo de una puta vez para poder arrojarte de nuevo en las llamas eternas de mi imperio!!
William, atemorizado ante la reacción del moustro, vacila y pregunta:
_ Entonces que puedo desear?
satanás ya impaciente le responde.
_ ¡¡Puedes pedir cualquier cosa!! desde lo materiales hasta inmaterial...- satan hace una pausa y sonríe- hasta puedes influir en el mundo mortal.
William, queda sorprendido y también sonríe.
_ Entonces... ¡¡Quiero que mates al desgraciado que me asesino.!!
Satanás al oír esto, empieza a reír nuevamente a carcajadas.
_ JAJAJAJA bien hecho mi querido William, has hecho muy bien. Es justo que el que mata este preparado para morir. ojo por ojo... William, jajaja.
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Cuentos para pensar
General FictionUna colección de cuentos cortos, para ponerse a pensar sobre algunos aspectos de la vida cotidiana.