IV

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Limerencia

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-- Me pregunto, ¿siempre es así? --preguntó Luna observando como Klaus se encontraba bailando en un club nocturno

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-- Me pregunto, ¿siempre es así? --preguntó Luna observando como Klaus se encontraba bailando en un club nocturno.

-- Si --contestó Ben, observando a Klaus con brazos cruzados.

Luna observo como Ben se encontraba serio, amargado, y afligido, así que le agarro de la mano para empezar a bailar ella enfrente de Ben, quien la miraba confundido.

-- ¿Qué haces, Luna? --preguntó él tratando de detenerla, pero ella seguía.

-- Estamos en un Club Nocturno, Ben --dijo Luna con una sonrisa, mientras se agachaba hasta el suelo para luego levantarse y seguir bailando.

-- ¿Y? Se supone que debemos ir a ver a tu tía --dijo él.

-- ¿Y? Hay que divertirnos en el proceso --dijo Luna, agarrando a Ben de las manos para acercarlo a ella, y empezar a bailar los dos.

Ben la observo, mientras intentaba bailar, Luna era buena bailando, pero había algo en su baile que hacía que el bábeara. Entonces observo a las demás chicas, era eso, Luna al igual que las demás, estaban bailando sensual, para ella misma. Klaus se acerco a Luna para bailar con ella, la música sonaba ruidosamente, mientras Klaus y Luna bailaban juntos, divirtiendose.

Los celos se apoderaron de él. Ben rápidamente, salió del club, con el propósito de ya no ver aquel acto sexual que parecía tener Luna con Klaus. Entonces sintio como alguien lo tocaba por el hombro, al voltearse se encontro a Luna confundida.

-- ¿Por qué te vas? --preguntó sin entender--. ¿Quieres ir al hotel?

-- Si, por favor, si --dijo.

Era sorprendente como Ben había cambiado, Ben de pequeño era tímido, pero ahora él era normal, un poco más atrevido. Ambos se fueron al hotel para acostarse a en la cama, ambos podían dormir, pero no mucho. Ya que no sentían, no podían soñar; tampoco era como si lo necesitaran como los vivos.

-- ¿Qué piensas, Ben? --preguntó ella.

Ben se encontraba enfrente de la ventana, observando la Luna, ¿la causa? Porque estaba recordado que Luna se quería ir, descansar en paz. Pero, si se divertían en el proceso, y tardaban más en buscar a la tía de Luna, significaría que Luna nunca se iría, y eso le interesaba a Ben.

-- ¿Ben? --la voz de Luna llamo su atención.

-- ¿Si? --habló Ben, observando los ojos marrones de Luna.

-- ¿Estas bien? --preguntó.

-- ¿Sabes? Ahora si quiero bailar --dijo con una sonrisa.

Luna sonrió, fue hacía la radio y puso música, para ambos bailar, ambos se movian con una sonrisa en su rostro, ambos reían por los pasos del otro, Luna paso por debajo del brazo de Ben, para luego dar vueltas, ambos siguieron bailando divirtiendose.

Todo pasaba como una distracción para Luna, y eso quería Ben, hacer todo lo posible para tardar y así que Luna nunca se fuera, ambos por tanto bailar y divertirse, se aventarón hacía la cama para así descansar, Luna se avento a su lado, para abrazarlo.

-- Fue demasiado divertido bailar contigo, Ben --dijo--. Me alegra saber que pasaremos tiempo juntos y divirtiendonos antes de irme.

-- ¿Luna? --un 'ajá' de Luna se escucho, dando entender que Ben siguiera--. ¿No te puedes quedar? No quiero que te vayas... Quedate conmigo, por siempre, por favor.

Luna se quedo callada. Ben la volteo a ver, para luego darse cuenta que Luna se había quedado dormida. Tiempo después, Klaus llego al hotel todo dorgado y con una sonrisa, observo como Ben y Luna se encontraba abrazados mientras dormian, hubiera deseado tomarles una foto, pero no se podía.

A los muertos no se les podía tomar fotos.

🌙🌙🌙🌙

Ben caminaba por las calles, a lado de Klaus, quien solo observaba a Ben, Luna se encontraba hasta atrás observando las tiendas. Ben y Klaus se detuvieron al ver que Luna entraba a una tienda.

— Dios, el agudo gijón del amor —soltó Klaus con ternura, observando el cielo gris.

— ¿Qué dices? —preguntó Ben confundido.

— Te gusta Luna, me pude dar cuenta —dijo, Ben lo iba a negar pero Klaus se le adelantó—. Siempre tratas de estar a su lado, siempre hablas con ella, quieres que se quede, le ruegas mucho, empiezas a querer perder tiempo, deseas ser el único para ella, te pones celoso que este conmigo.

— ¡No es cierto! —soltó Ben enojado.

— Estas en la etapa de negación, eso es algo bueno... Luego sigue la etapa de hacerte preguntas a ti mismo, y luego la aceptación.

— Yo no estoy en ninguna etapa —dijo Ben, cruzando sus brazos.

— Son tres estapas cuando estas enamorado, debes de reconocerlas almenos... ¿O eres gay? —preguntó sorprendido.

— ¡No soy gay! —reclamó Ben— Me gustan las chicas, pero Luna no.

— Eso es raro, porque estas en la etapa uno, la Limerencia —dijo, llevandose una mirada confundida de Ben—. ¿No sabes que es la Limerencia? —se burló—. La Limerencia es esa etapa donde son algunos cambios físicos como enrojecimiento, los temblores o palpitaciones; excitación y nerviosismo, pensamiento intrusivo, obsesión, pensamientos fantasiosos y el miedo al rechazo.

— No le tengo miedo al rechazo —dijo sin creerselo Ben.

— Si claro..

— ¿Tu como sabes todo esto? —preguntó Ben con aspereza.

— Revistas de Luna —dijo simple, para luego ver a Luna salir de la tienda—. Ahí viene tu mujer, Benito..

— ¡No es mi mujer! —exclamó Ben a lo bajo, para luego susurrar:— Aún...

Klaus soltó una carcajada, Luna los observo confundida y curiosa.

— ¿Qué paso? ¿De qué se ríen?

— De nada, Lunática —dijo Klaus, con una enorme sonrisa, mientras personas que pasaban a su alrededor lo observaban como si estuviera loco.

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Antes de que se vayan, las demás historias estaran en pause, ya que primero tengo que acabar las que empece hacer antes.

Así que primero tendré que acabar esta, luego la de «APOCALYPSIS» y después la de Diego Hargreeves.

Desde Nunca Jamas, besos.

—Wendy D.

Moon | Ben HargreevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora