2. Toque de queda(te)

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Taehyung había soñado de nuevo con su mejor amigo e inconscientemente comenzó a llorar abrazándose a si mismo mientras repetía el nombre de Yoongi una y otra vez.

Seokjin, quién se encontraba en la planta baja preparando el desayuno, subió al cuarto de su compañero al escuchar golpes provenientes de la habitación de Taehyung.

Al entrar, pudo ver al menor aventar cosas hacia todas las direcciones, así que rápidamente lo abrazo impidiendo que se moviera.

— Lo extraño. — dijo Taehyung mientras comenzaba a calmar su respiración.

— Lo sé. — Seokjin se limito a responder.

— Cada año sueño lo mismo, hoy se cumple otro año más desde que... eso sucedió. — habló tratando de dejar de llorar.

Seokjin se alejo de él y se dirijo al armario del menor.

— Ya es tarde. — dijo sacando un par de prendas. — No querrás llegar tarde a visitarlo.

Taehyung asintió y comenzó a tomar las prendas para dirigirse al baño.

Seokjin sonrió triste y salió de la habitación para comenzar a servir el desayuno.

Taehyung termino de arreglarse y salió de su habitación para despedirse de Seokjin.

— Taehyung, el desayuno está servido. — anuncio Seokjin mientras se sentaba en una de las sillas para comenzar a comer.

Taehyung llegó al comedor.

— Hyung, ya es un poco tarde, me tengo que ir ahora. — gritó mientras corría hacia la salida antes de ser alcanzado por Seokjin y que este lo obligará a comer.

Al estar fuera, lo primero que hizo fue ir a una florería a comprar un ramo de lirios, pues aunque Yoongi nunca se lo haya dicho, sabía que eran sus flores favoritas, ya que siempre sonreía cada vez que Taehyung le regalaba una.

Después de comprar todo se dirigió al cementerio y antes de entrar se arregló un poco el cabello y la ropa.

Con pasos seguros camino hacia su lápida.

— Hola, soy yo de nuevo. — comenzó a hablar al estar al frente de él. — Te traje este bonito ramo, se que siempre decías que no te gustaban las flores... pero no puedo olvidar tu sonrisa cada vez que te regalaba un lirio. — dijo mientras lágrimas se acumulaban en sus ojos tratando de no salir.

» Te extraño mucho, en serio lo hago. No puedo pasar un día sin recordarte, Seokjin dice que nada fue mi culpa, pero yo sé que sí. Nunca debí de haberte dejado solo. — Hablo cayendo de rodillas y lágrimas bajaban por sus mejillas. — Me siento tan frustrado por no saber que era eso tan importante que me tenías que decir, si tan solo no hubiera sido tan torpe y no me hubiera caído de ese maldito columpio... me hubieras contado...
Tal vez no fuí el mejor amigo, pero pudiste haber recurrido a mí sí te sentías mal, entonces... ¿por qué, Yoongi? ¡¿Por qué?!

Taehyung comenzó a llorar mientras cubría sus ojos con sus manos y repetía una y otra vez el nombre de Yoongi hasta que, aparentemente, quedó dormido sobre la lápida de su mejor amigo.

Horas después, Taehyung abrió sus ojos poco a poco, dándose cuenta de que se encontraba en un parque.

Desconcertado, comenzó a caminar hacia su casa dónde vivía con Seokjin, pero al llegar encontró todo diferente, la puerta de la entrada era muy colorida, cosa que no le gustaba a Seokjin.

Cuando entro, creyó haberse equivocado de casa al ver todas las cosas acomodadas de diferente manera.

Pero antes de que pudiera salir escucho una voz.

— Taehyung, amor ¿llegaste?

El moreno se paralizó en su lugar, conocía esa voz perfectamente.

— ¡Estoy en la cocina! — lo escucho gritar.

Así que con pasos temblorosos se dirigió hacia donde había escuchado la voz.

— ¿Amor, estás bien? — preguntó Yoongi mientras se acercaba a Taehyung y acunaba su rostro limpiando las lágrimas que comenzaban a caer por sus mejillas.

Taehyung no respondió y abrazo a Yoongi dando un pequeño brinco para enrollar sus piernas a la cintura del pálido.

— ¿De verdad eres Yoongi? — preguntó llorando.

— Claro que soy Yoongi, ¿qué pasa?

Taehyung no respondió y lloro aún más fuerte.

Yoongi aún cargandolo lo llevo a la sala sentándose con Taehyung encima.

— ¿Qué tienes? — preguntó el mayor

— Yo... te extrañe mucho, te he extrañado tanto, Yoongi y verte de repente... ¿esto es real? — preguntó aún llorando y tocando por todas partes la cara de  Yoongi.

El mayor aún sin entender la situación tomo de las muñecas a Taehyung y lo beso. Al principio el moreno se sorprendió, pero poco a poco correspondió el beso poniendo sus manos sobre los hombros de Yoongi y Yoongi sobre la cintura del menor.

— ¿Estoy soñando? — preguntó Taehyung y el mayor río para volver a besarlo.

— Si lo es, es el mejor sueño que he tenido. — respondió Yoongi dando un pequeño beso en su mejilla. — Me gustaría quedarme así todo el día pero tengo que terminar la comida.

Taehyung se levantó sonrojado y siguió al mayor.

Cuando Yoongi termino de hacer todo, ambos se sentaron a comer.

— ¿Sucede algo? te noto raro. — hablo Yoongi mientras comía un trozo de carne.

— ¿Recuerdas cuando teníamos 16 años? — preguntó Taehyung de repente.

Yoongi asintió confundido.

— Yo... realmente no es nada, olvídalo. — dijo mientras sonreía.

Todo el tiempo estuvieron en silencio, Taehyung se sentía extraño.

Cuando terminaron de comer Yoongi se arreglo bastante.

— ¿Qué haces? — preguntó el menor.

Yoongi lo miro notando que aún seguía con la misma ropa.

— ¿Tú qué haces vestido de esa manera? — el mayor se acercó al armario y comenzo a sacar ropa para su novio. — Es nuestro aniversario, ¿No lo recuerdas?

— Pero solo somos amigos. — Respondió el menor.

— Auch, eso dolió. ¿Estás terminando conmigo? — preguntó el mayor fingiendo estar dolido.

Taehyung se sentó sobre la cama tratando de procesar todo.

— ¿Cómo pasó? — preguntó sin ver al mayor.

— Wow, realmente me dueles, Taehyung.

— Yo... no quiero salir, quiero quedarme aquí, contigo, ¿Podemos ver películas? — preguntó haciendo un puchero.

— ¿El grandísimo Kim Taehyung prefiere quedarse en casa en lugar de ir a una lujosa cena que estuvo pidiendo... no, rogando por meses en querer ir? — preguntó el mayor con una sonrisa.

Y Taehyung asintió.

— Así que quítate ese aburrido traje y ven conmigo — dijo Taehyung haciéndole un espacio en la cama al mayor.

Yoongi negaba mientras sonría.

— Bien, que quieres ver, podemos poner una serie en Netflix. — sugirió el mayor.

— No quiero, hay que ver Barbie y las doce bailarinas. — Respondió Taehyung con una sonrisa.

Yoongi sonrió por lo feliz que se notaba el menor y puso la película, pues él nunca le podía negar algo a su novio.





































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평행하는 연인들」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora