Ven aquí chiquita - le agarra de la cintura - ¡No sabes cuánto espere esto! - Dice Luis, cerrando la puerta por la cual entro segundos antes, mirando fijamente a los ojos a su tutora, ahora amante, Ana.
¡Ajá! - Dice Irónica - Como si no me imaginara con todas las que has de haber estado mientras no estaba - le desabotona la camisa que ella le había regalado, avanzando por el pasillo, caminando juntos hasta la alcoba de él - las besaste - dice ella mientras le da besos 'piquito' en la boca - las acariciaste - beso - las sedujiste - beso - y las hiciste tuyas en la cama - beso largo y de lengua.
Te juro que eres la única mi cielo - le dice con voz suave pero varonil, tratante de sonar romántico -
Así, ¡compruébamelo! - le grita eufórica excitada, dándole un último beso de pasión.
¡Te voy a dejar blanca hasta por las orejas! - le susurra de manera lasciva y soberbia, sentándola en la cama inmediatamente después.
No seas cochino - dice excitada, le mira a los ojos, rejuntando sus piernas como colegiada para después abrirlas -
Tú fuiste la que prohibió las palabras románticas mi "cushi cushi" - dice mientras lame detrás de sus orejas -.
¡¡Sí!! Pero tampoco, dime algo más sublime.
Ana
¿Qué?
Es que tú me pareces sublime
¡¡Romántico de mierda!! - se levanta de las piernas de él joven Luis, lo levanta agarrándolo del cuello de la playera y esta se sienta sobre el buró de este que está al lado de la cama, abre sus piernas para que él se pare de frente de ella.
Qué esperas de mí, tú me inspiras, mi musa, - dice mientras alza y besa su brazo izquierdo de meñique a codo - mi diosa, mi, mi...
¡¡Ábreme no oyes que estoy tocando!! - se oye a un hombre gritar de lejos, desde la puerta de entrada del departamento.
¡¡Mi marido!! - dice ella sorprendida -
Qué esperas de mí, tú me inspiras, mi musa, - dice mientras alza y besa su brazo izquierdo de meñique a codo - mi diosa, mi, mi...
¡¡Ábreme no oyes que estoy tocando!! - se oye a un hombre gritar de lejos, desde la puerta de entrada del departamento.
¡¡Mi marido!! - dice ella sorprendida -
¿Tú marido? - dice el alejándose de ella -
¡¡Abran la puerta estoy diciendo!! - se oyen los gritos, cada vez más fuertes -
Vámonos - dice ella mientras se separa de el -
¡¡Qué!! ¿Pero qué coño...?
Por la ventana, no tenemos mucho tiempo - dice ella mientras corre a la ventana de al lado de la cama y saca una pierna por ella -
No me voy a ir - afirma el con un tono escuálido y tibio -
Pues te llevo - dice ella mientras va a donde lo de él, le jala el brazo y lo saca por la ventana.
Pero qué haces, suéltame, ¡¡no iré contigo!! - afirma mientras trata de soltarse de ella -
No seas idiota - dice ella mientras bajan por las escaleras de emergencia de hierro que están pegadas a las ventanas del edificio -
Ambos corren por las escaleras, dirigidos por ella, hasta llegar a el piso de concreto de la banqueta de la calle.
Pero que mierda estoy haciendo - pensada Luis mientras bajaba por las escaleras -
Al llegar a la banqueta, corren por la arboleda que hay al lado del edificio
Aquí no nos vera - dice ella al llegar a la oscura de arboleda -
Él se suelta bruscamente del brazo de ella después de parar de correr
¿Pero que tienes? - dice ella extraña -
- ¿¡Que tengo!? ¿¡Qué qué tengo!? ¡Tengo a una beliperada peliteñida de frente, huyendo de su posible violento esposo, escondida en un bosque que parece sacado de una película de Hitchcock!, huyendo con su amante, y su amante, el boludo, ¡¡que está tratando de digerirlo todo!! - dice el gritando desesperado y triste, con un todo de voz chillona y algo agripada -
Espera, espera - dice ella tratando de calmarlo poniendo las manos de frente, tratando de tocar su pecho -
¡¡Espera las naranjas!! ¡¡¡Me cago en la puta madre!!! - grita más fuerte usando sus brazos para hacer ademanes para ejemplificar su molestia -
Cálmate que estamos juntos en esto - le grita ella en voz severa para calmarlo -
¡¡Juntos la madre!!, tú me mentiste, ¡¡me mentiste!!, dijiste que eras soltera y ahora tengo a un marido celoso que sabe mi dirección ¡y la de mi madre!, y por tus ganas de guardar tus cosas, ¡¡parece que me debo mudar a Haití para salvar mi vida!! - le grita mientras se acerca lentamente a ella, poniendo una cara de ira y odió.
¿De dónde sacas tanta mamada? - le exclama ella, algo alterada y confundida -
Me inspiraba mi ex-musa - dice en tono triste, decepcionado y calmado -.
¿Tú qué? - pregunta extrañada
Yo no pienso seguir en esto - gira para atrás, caminando fuera del bosque -
¿Me estás dejando? - Pregunta asustada -
Pues más bien estoy huyendo, porque no hay una relación que dejar - dice aún con el tono anterior, mirando hacia el piso -
¡¡No me puedes hacer esto!! - grita desesperada -
¡¡¡Y tú mira lo que me hiciste!!! - grita enojado -
¡¡Tú fuiste quién me busco!! Quien me buscaba con sus cursilerías, sus sonrisa divina ¡y su maldita manera de hablarme quedito al oído! - grita en un todo reclamatorio -
¡¡Y tú fuiste la que me dijo que era soltera!! Que no quería compromiso y que sólo quería placer - grita con desesperación de nuevo - pero que mintió - dice serio y con voz profunda - y que tenía, en verdad, un compromiso de 20 quilates.
Ella le cachetea - a mí no me vuelves a faltar el respeto -
- él le agarra el brazo de manera fuerte - Y tú no me vuelves a hablar en la vida.
Ella cierra su puño y mueve su brazo para librarse del agarre de Luis, caminando fuera de la arboleda.
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Vida de Perros
Teen FictionLuis, decepcionado y frustrado por las mentiras de las mujeres decide olvidarse de ellas y seguir su vida, el problema, todas quieren con él. Ahora deberá confrontar los problemas de la escuela, la familia y la sociedad y de un viejo romance amoroso...