rose colored (glasses) ; wonhui

22 ; promesas

silencio.

había sido un viaje eterno, el silencio se convirtió en su mejor amigo y la tensión en su fiel acompañante. algo causaba que su corazón se estrujara cada vez más.

llegó a casa en silencio, sin ninguna pizca de esperanza de recibir algo por parte de HaNeul, quien no le había dirigido la palabra desde su confesión. en ese momento, ella se puso de pie y fue en dirección a la parte principal de la tienda,  ignorando completamente lo sucedido. fue así, como WonWoo sintió más miedo e incomodidad de lo normal.

al entrar a casa, dejó sus zapatos a un lado de la puerta, mientras veía el reloj de la pared. nueve. eran las nueve de la noche, pronto acabaría el día. lo único que lograba tranquilizarle.

dirigió su vista a HaNeul, se encontraba pálida y su semblante estaba apagado, no había nada de emoción en sus expresiones. eso dolía. fue muy tonto al creer que todo iría de maravilla.

"buenas noches, HaNeul" respondió dándose por vencido. no todo iba a ser un cuento de hadas, quizá su madre estaba demostrando su rechazo hacia él.

"descansa" fue lo único que se atrevió a decir en esos momentos.

dolió. realmente dolió.

caminó en dirección a las escaleras sin muchos ánimos, sintió un nudo en su garganta, que su respiración se entrecortaba, leves mareos y un terrible dolor en su pecho. al parecer tenía razón, no porque fuera su madre biológica significaba que sería aceptado.

entró a su habitación arrastrando los pies y soltando quejidos por las sensaciones que le invadían. se echó sobre su cama tomando la primera almohada que alcanzó, la colocó sobre su rostro y finalmente, soltó un grito entre pataleos al aire.

dolía. dolía demasiado.

sintió que las lágrimas saldrían en cualquier momento y no quiso permitirlo, al contrario, decidió hacer algo más para apaciguar el dolor.

se incorporó de la cama para así sacar su móvil que se encontraba en uno de sus bolsillos y llamar a la primera persona que apareció en su mente, de los seres más maravillosos que había conocido en su corta vida. esperó impaciente escuchando los tonos antes de que respondiera, comenzaba a sentir nervios, pero si por él fuera, iría corriendo a casa ajena solo para verle, desgraciadamente, ya era algo tarde y eso sonaba demasiado atrevido de hacer.

"¿Won..."

"creo que cometí un error" soltó bruscamente. "lo arruiné"

guardó silencio un rato para procesar las palabras de WonWoo, sin embargo, su tono de voz ya le avisaba su estado de ánimo. "¿qué sucedió?"

"le dije cosas que posiblemente no quería escuchar" mordió el interior de su mejilla un tanto nervioso. "HaNeul me odia"

"¿es malo?" inquirió con tranquilidad. "¿te parece algo malo?" se sintió torpe al preguntar eso. era obvio que para el azabache lo sucedido había sido malo. se arrepintió de haber dicho aquello.

"estoy acabado, muy acabado" respondió alterado cerrando con fuerza sus ojos. "demasíado aca..."

"tranquilízate, WonWoo" pidió con calma entre dientes. "cuéntame, te escucho"

mordió su labio con fuerza intentando no soltar los chillidos, gruñidos y gritos que llevaba reprimiendo desde la reacción de HaNeul.  ¿cómo se suponía que lo diría? sentía que se rompería al mencionarlo.

"WonWoo... tranquilo" su voz se volvió más suave. "te escucho, puedo esperar lo necesario"

"lo siento... no puedo" negó con la cabeza cuando la humedad invadió sus mejillas. era una sensación fría y dolorosa.