Vendido por mi padre

Capitulo 13

Llegamos a la casa y Daniel solo se paró a decirme que tenía cosas que hacer así que me podía ir a dormir.
Este hombre me confunde mucho si bien un día me trata de maravilla al siguiente prácticamente me quiere ver muerto, me siento atrapado en una historia demasiado cliché para ser real.
No puedo negar que cuando me trate  bien y es considerado conmigo me agrada pero no podré confundir eso con el amor.

–Sigues despierto.

–Ha si estaba pensado.

–¿En qué pensabas?

–En nuestro viaje ¿Si iremos verdad?

–Claro que iremos, te llevaré a la playa de mi infancia.

–¿Enserio?

–Si ahora duerme mañana planearemos lo del viaje.

–Esta bien de descanses amo Daniel.

–Puedes llamarme Daniel si te place. - Sonreí tal vez no es tan mal hombre como yo lo llegue a pensar.

&

–Dilan... despierta.

–Mmm... - Abrí los ojos para encontrarme a Daniel justo frente ami.

–Bueno hasta que despiertas.

–¿Que pasa?

–Levantate hoy saldremos de viaje.

–¿A dónde vamos?

–De viaje así que levanté ya. - Me levanté de la cama y me cambié y note algo.

–¡Estoy de pie y mi pierna no me duele!

–Llamaré a Raúl para que venga a ver cómo sigues y si te pueden quitar ya el vendaje - Daniel salió del cuarto y yo terminé de prepararme para salir . Baje las escaleras con cuidado se siente bien volver a esta de pie.

–Alicia, hay algo que pueda comer.

–¡Hoo! Cariño estás de pie

–Si no es increíble, me siento fabuloso aun siento una pequeña molestia pero puedo tolerarlo. - Alicia me preparo un delicioso desayuno. Y para cuándo termine de comer me levanté y cuando está apunto de salir por la puerta entro Cameron corriendo.

–¡Hola Cameron!

–¡Ho por dios estás de pie!

–Si lo sé ¿No es fabuloso?

–Si que lo es.

–Pero no me explico cómo es posible

–Ya tenia mucho tiempo en descansó. - Ya no quería hablar de mi pierna y la realidad es que me quería sentar no tenía mucho que me había empezado a mover pero el pequeño dolor punzante y creciente en mi pierna era suficiente como para decirme que aún no está del todo bien.

–Dilan ¿Puedes venir a la sala?

–Si amo ya voy. - Salí de la cocina en cuanto escuché la voz de Daniel, llegue a la sala y note una mirada rara en el rostro de Daniel.

–Hola Dylan ¿Cómo sigue tu pierna?

–Bien hoy he despertado mejor incluso e podido caminar.

–Si eso veo ¿Y tú brazo como sigue?

–Lo siento un poco entumecido pero apuesto a que igual y ya lo puedo mover un poco más.

–Bien qué tal si te quito el yeso y vemos realmente como se encuentran. - Raúl se acercó y comenzó a cortar esas vendas duras que me impedían el movimiento, en cuanto mi brazo fue libre el me pido que hiciera algunos movimientos yo los hice pero al igual que con la pierna persistía una pequeña sensación de dolor.

–en efecto parece que ya te puedes mover con más libertad, sin embargo aún sientes dolor y desde mi punto de vista es preferible que sigas en reposos aún que considero que puedes empezar con unos ejercicios para que recobres tus fuerzas. - Después de eso Raúl me dio unas pastillas para el dolor y me sugirió que no era bueno que comenzará a moverse más de la cuenta pues la fractura seguía ahí aún que ya estuviera sanando. Se limitó a ponerme una especie de bota en el pie volvió a vendar mi brazo y a poner el cabastriyo. A Cameron por su parte le importo poco el hecho de que aún no había sanado por completo y se enfocó más en le avance que ya había tenido.

– ¡No es fabuloso ya te puedes mover!

–Cameron no se si no lo sepas pero siempre me pude mover.

–Bueno me refiero a que ya puedes caminar tu solo.

–De hecho eso está a medias. - Daniel entró en la habitación y yo de inmediato me callé al ver su cara, está tan serio y tiene una mirada tan sombría que da miedo.

–Cameron Raúl ya se va debes ir con él y tal vez en otro momento puedas estar con Dilan.

–Si ya me voy a dios Dylan, Daniel. - Espere en silencio hasta que Cameron salió de la habitación. Cuando sentí una bofetada en mi rostro. Inmediatamente unas cuantas lágrimas salieron de mis ojos.

–¿Sabes lo que hizo tu padre? No por supuesto que no lo sabes ¿Quieres que te diga? Pues bien te diré que el muy maldito violó a la chica que envié a hacer el aseo. - No lo puedo creer nunca pensé que mi padre haría algo así, pero y aún así por qué Daniel se desquita conmigo yo no lo hice.

–Perdona.

–¿Por qué te disculpas?

–Yo...–¿Por qué me disculpo? Esa es una gran pregunta ¿Hice algo mal? No quien lo hizo fue mi padre porque tengo que disculparme. Aunque pensándolo bien eso parecía ser lo que Daniel quería que hiciera.

–¿Sabes que va a pasar ahora?

–No

–Bien pues te lo diré, tu padre va a recibir un castigo aya abajo en el sótano con Luka amenos que tú quieras ir en su lugar. - Ya entiendo Daniel piensa que yo volveré hacer lo que hice hace unas semana atrás. Es mi padre y debería de ayudarlo si es necesario, pero el me vendió y por su culpa me violaron y me lastimaron. Daniel me veía esperando una respuesta, es cierto que cuando me ofrecí a tomar su lugar en ese momento su vida estaba en juego pero ahora ¿Lo está? Tengo solo una forma de saberlo.

–¿Lo matarás si no lo hago?

–Pagará lo que hizo viviéndolo en carne propia.

–Osea que si él violó a la chica a él lo van a violar y si ¿Yo tomo su lugar que me pasará ami?

–Are que pagues cien veces más que el por su ofensa. - No puedo amo a mi padre pero no puedo permitir que me vuelvan a dañar. Llega un momento donde tenemos que pensar en nosotros mismos.

–No tengo por qué pagar algo que no hice. - Concluí.

–Si esa es tu dedicación a mi me parece bien...