Llego a casa por fin, tenía el resto de la tarde libre y lo único que quería era dormir como si no hubiera un mañana. Cuando entro a la mansión una mucama se me acerca con un basó de agua sobre una charola de plata.
—Bienvenido a casa, joven Golden. Su abuelo lo espera en su despacho.
Suspiro pesado quitándome el abrigo que antes me había puesto. Tomó el basó de agua y le entrego la prenda.
—Lleva esto a mi cuarto por favor, y preparame un café sin azúcar —camino al lugar donde me espera mi abuelo materno.
En el transcurso le doy un sorbo a mi agua, esto era increíble; yo quería dormir por fin y solo querían ponerme más trabajo, por eso odio ser el famoso Golden Boy. Al entrar al despacho el mayor tiene unos documentos en una mano y se ve algo molesto, esta sentado en la silla de su escritorio y tiene un puro a la mitad en los labios.
—Gabriel, siéntate —ordena dejando las hojas delante suyo.
Hago lo que me pide con cansancio y una mala expresión en mi rostro: irritación.
—¿Ahora que hice?
—Mira, hijo. Yo no soy estúpido.
—Yo nunca he dicho que lo eres.
—¿Tratas de verme la cara?
Lo miro un momento, nuestras miradas tuvieron un contacto algo tenso, con eso comprendí que era lo que lo tiene así. No puedo creer que solo se ponga de mal humor por una pequeñez.
—Si es por mi relación. Ya hemos hablado y creí haberlo dejado claro —doy en respuesta.
—¡No! Creí yo haberlo dejado claro. Y dije que no te quería con ese raro —se pone de pie molesto.
Imito su acción teniendo el ceño fruncido, aprieto mis manos en puños para no hacer una estupidez.
—Freddy no es ningún raro. Lo quiero y-
—¡Ya basta! Gabriel, no has tenido muchos amigos "normales" Y es normal que estés confundido pero, yo te puedo ayudar.
—¡Aqui el único que no es normal eres tú!
—No andare dejando que me veas la cara de imbécil. O lo dejas... O tendras que a tenerte a las consecuencias.
Lo miro sorprendido, ¿En serio esta amenazandome? Yo siendo su único Nieto y heredero. No quiero aurrinar la única parte de mi vida que es perfecta, así que solo me dedicó a respirar lento para tranquilizarme.
—Me atengo a las consecuencias...
—Bien. Tienes dos horas para hacer tus maletas, despedirte de los empleados y largarte de mi casa, no me arriesgare a las críticas de homosexuales.
—¿Y prefieres que te critiquen por hechar me de casa?
¿¡Me hecha de mi propia maldita casa!
Este viejo esta enfermo, le falta más de cien tornillos para poder pensar con coherencia y saber que lo que esta haciendo es una estupidez. El me mira, parece pensarlo un poco, pero solo camina molesto con el puro en su mano derecha mientras llega a la puerta.
—Ya lo dije. No me arriesgare a que aurrines mi Imperio solo por un bastardo... Tienes solo dos horas y Jeffrey te dará dinero —se escucha a mis espaldas como se cierra la puerta.
Esto no puede ser posible, ese viejo esta mal de la cabeza, ¿En que época vive? Solo suspiro saliendo directo a mi cuarto. Quiero irme antes de esas horas, hacer mis cosas lo antes posible y salir de hay, al fin y al cabo, ya me tenía arto ese ansiano; no se como puede llamar así a Freddy, mi osito no es un bastardo.
—Ese maldito se va a arrepentir. Primero me aleja de mi madre y después me corre como si fuera solo una basura... —hablo en voz baja conmigo mientras guardo mi ropa en las maletas.
En una tengo ya hecha ropa, en una mochila tengo fotos mías con mi madre y accesorios como mi cargador, una pequeña lámpara, mis audífonos, cepillo, perfumes, entre otras pequeñas cosas y en un maletín de mano tengo otras cosas como mi colección de conchas de un tamaño específico, que antes le pertenecía a mi madre.
El mayordomo entra a mi cuarto con un semblante triste, preocupado, Ho no Jeffrey, no me hagas arrepentirme de lo que he decidido.
—Joven Gol-
—Llámame Gabriel, Jeff. Ya no tienes que tratarme con respeto —lo miro serio.
—Le prometi a su madre cuidar de usted... —me tiende dos sobres, uno amarillo y uno blanco.
—Has cumplido con tu palabra muy bien, soy yo el que decide irse —los acepto con una sonrisa serena.
—¿A dónde piensa ir? —suelta de la nada.
Mierda, ¿A dónde pasaría la noche? Bueno, eso claro está. Un hotel la primera noche y tal vez hasta la tercera, pero... ¿Donde iba a vivir?
—He llamado a Freddy, me mostrará un departamento mañana —miento con la misma sonrisa.
El adulto me abraza despidiéndose, hago lo mismo sintiéndome mal por el. Joder, si que lo voy a extrañar. Me separo de el tomando mi equipaje ya más que decidido. Jeffrey me acompaña a la puerta y me despido de él por última vez, no vi a mi abuelo ni dos segundos así que se más que nada que esto si esta pasando; pero ya no puedo hacer nada, además ¿Que puede pasar?
Camino en destino al hotel, eran las siete de la noche y no sabía de cuanto era el cheque que me dio mi ex mayordomo; hasta ahora ya había ideado algo perfecto: mañana después de la escuela buscare un empleo de medio tiempo para poder estar en un departamento, con el resto compraré los muebles más basicos.
***
Llego a la escuela como si nada en mi vida hubiese pasado, según todos sigo con mi abuelo. Bueno, pronto cumpliré dieciocho así que independizarme me hará bien en todo y será normal que viva solo, no porque mi única familia sea homofóbica y prefirió su trabajo y decidió de la nada correrme como si fuera el jardinero a quien le habla.
—¡Golden! —me saluda muy alegremente Chica con esa sonrisa llena de energía.
—Hola, Chica. ¿Que tal has pasado tu noche? —le correspondo a la sonrisa.
—Pues eso debo preguntarte... ¿Paso algo ayer en tu casa? —me mira preocupada.
La miro extrañado, ¿Tanto se me nota el enojo? Bueno, que yo sepa puedo estar enojado por cualquier cosa; comienzo a caminar al Salón teniendo esa expresión de rareza, la chica de mi lado me sigue aún preocupada.
—Golden, toda la escuela sabe que pásate la noche en un hotel.
Detengo mi paso sorprendido, ¿Pero como se habían...?
Paparazzi. Olvide que siempre están afuera de mi casa vigilandome, me siento como un tonto ahora.
—Yo... No quiero hablar de eso.
Camino más apresurado ya algo molesto, primero estoy solo, luego todos saben de mi problema y ahora la rubia quiere que le cuente todo. La de ojos violeta me sigue, llamándome para que la mire pero todos sus intentos no funcionan.
Esto será un largo día.
Hola!!? Cuanto tiempo, he?
Espero te haya gustado y la sigas apoyando ;3 . Trataré de actualizar más a menudo, ahora no he podido por problemas en mi hogar y en la escuela :'v
Nos leemos pronto
♡(´。•ㅅ•。')
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Solo un juego.
Fanfiction-¡No lo entiendes, Golden! -gritó el pelirrojo apretando los ojos. No quería llorar. No frente a el menor.