Cap 43 Santi

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POV

Maca

Pensé que no iba a poder dormir, entre el dolor que sentía en el corazón y el pensar en todo lo que estaba pasando, jure que mi ansiedad iba a hacer complicidad con mi insomnio e iban a robarme el sueño, pero la pesadez de mi cuerpo y el cansancio que todas las emociones estaban dejando en mi, me ayudaron para dormir de nuevo por horas.

Sin saber cómo, volví a dormir 12 horas, despertándome a las 1 pm del siguiente día. Al inicio mi cerebro me quería hacer olvidar lo que había vivido, desperté sin entender nada y sin acordarme de nada, hasta que pasaron unos minutos y pude despertar al 100%, recordé todo.

Esta vez ya no me dolió el cuerpo, pero si el corazón, ese dolor no se había ido y seguramente no se iba a ir, no por un rato.

Majo estaba dormida en el sillón, me sorprendió que siguiera dormida ya que ya era tarde. Me senté en el otro sillón y solo me quede viéndola, pensando en lo mucho que le había dolido perder a su novia, que seguro no había sido fácil manejar su muerte sabiendo que jamás lucho por ella.

Todos esos pensamientos no me ayudaron en nada, solo me deprimían más, sabe que si fuera el caso, Bárbara tampoco pelearía por mi, y una parte de mi lo comprende, le duele, pero lo comprende. Pero otra parte de mi se enojada, no lo entiende, quiere ir y mentarle la madre y decirle que es la persona que menos vale la pena en este mundo, que merezco algo mucho mejor.

- No, no - dije en voz alta 

- ¿Maca? - mi voz despertó a Majo

-Perdón, no quería despertarte - le dije apenada - ya es tarde de todos modos

- Lo sé. Pero estuve toda la noche cuidándote. Gritabas a veces en tus sueños y me preocupada - me dijo rascando sus ojos 

-Perdón también por eso, no tienes que quedarte, esto ni siquiera es tu problema - le confesé acostándome en el otro sillón

-Maca, te quiero y me preocupas. Aparte, a mi me hubiera gustado tener a alguien cuando estaba pasando por todo esto - lentamente se sentó en el sillón y me sonrío tiernamente 

-¿Sabes? No es justo - me queje

- Nadie dijo que lo fuera, pero la vida no es justa. Y nos toca luchar, a veces - se levanto del sillón y se sentó junto a mi. 

-No sé si quiero seguir peleando, ¿su ex?¿de verdad? - me volví a quejar 

-Maca, no dejaste ni que te explicara - me regaño ¿Qué me iba a explicar majo? - me levante del sillón

Camine hasta la ventana del balcón en donde me quede parada contemplando la vista, era un bello día y el sol estaba iluminando las hojas de los arboles, el cielo estaba azul, y podías ver más allá de los edificios. Esa escena me hizo recordar cuando Bárbara decidió hacer algo valiente por primera vez y pedirme que fuera su novia, yo estaba justo parada aquí, y ella cruzando la calle, tan hermosa como siempre.

Una lagrima derramo de mi ojo, rodo por mi mejilla y en cuanto toco el piso, unas cuantas más la acompañaron.

La entiendo, de verdad. Pero ya no quiero explicaciones, merezco poder amar a quien yo quiera sin miedo Majo - lloré Lo mereces, lo merecemos pero por algo debes vivir esto - me dijo aún sentada en el sillónLas cosas serán más fáciles si solo hubiera sido no... - majo me interrumpióNi se te ocurra, no tiene nada que ver eso, no seas tu la primera en ponerte etiquetas. Sabes que no hay nada de malo con lo que estas sintiendo - me regaño de nuevo Lo sé - empecé a llorar aún más

De la frustración le pegue a la ventana, por suerte no se rompió, pero si sentí como mañana me iba a salir un moretón. Majo corrió por hielo y un trapo, regreso conmigo y me lo puso al rededor de la mano, cubriendo el golpe.

Confusión, amor y matéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora