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Aquí estoy de nuevo,
No sé que decirles a ustedes detrás de una pantalla.

No sé qué peso cargan mis palabras,
Pero si sé lo que pesa en mi alma está verdad,
Miró dentro de mí, miró infinitas caras a distintas escalas,
Pero todas ellas ven al mismo punto, mi fragilidad.

No es el mejor asesino quien precisamente mato a mi anterior yo sin compasión,
Pero si fue un inmenso deseo desde el interior quien dejó el pasado sin resurrección,
Tal vez no pueda mirarme a los ojos pero si puedo darles un vistazo de mi interior,
No sé si brillar o aparecer en oscuridad pues mi alma desea un deseo inferior.

Dentro de mí siempre hay un dolor consumiendo mi vida,
Dando un camino de tortura mientras me muero en texto sin salida,
Hoy les soy sinceridad sin condiciones ni peticiones más que me escuchen,
Puesto que son aquellos mis pecados que hacen que mis verdades relucen.

No importa ya volver a mirar atrás, sabiendo que es imposible hacer algo,
Pues es la sentencia que me inclino al vacío dentro de mí donde caigo,
Es divertido ver la gente alrededor de mi sin preocupaciones,
Pero es aún más satisfactorio ver cómo ocultan su verdadero ser sin interrupciones.

Poemas propios de un amor insanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora