Poemas propios de un amor insano

¿porque eres así? o mejor aún... ¿porque me obligas a ser un asesino?

Recuerdo cuando te ví por primera vez en aquel amanecer,
Tu mi corazón hiciste estremecer.
Mi mente estaba volando creyendo en una relación,
Pero mi pecado era color carmesí en tal de mi pasión.

Yo borraba mis errores,
Para disgustar sin fin tus hermosos y encantadores olores.
No te podría comparar con un campo de flores,
No mereces tales comparaciones por arcoiris sin colores.

Yo salía con flores y rimas con amor sin piedad, totalmente armado,
Pero solo cambia una idea en mi mente la cual era ser por ti amado.
No me importa si se secan las rosas,
Tu eres la más resaltante entre todas las cosas.

Pero solo intercambiaba palabras con sentimientos,
Solo quería ver tu sonrisa tras mis cariños hambrientos.
No quiero olvidarme de tí jamás,
Haría cualquier cosa más.

Pero nunca alejarme de tí,
Siempre estaré amándote aquí.
Yo soy el único caballero capaz,
Esto es algo que no tiene vuelta atrás.

Seré el que con una roca derrote a la muerte,
Contado por emperadores como David fue tan fuerte.
Pero no merezco una estatua de roca,
Merezco una palabra que te vuelva loca.

Tu sedoso y delicado cabello,
Tu conquistas mi ser cuando acarició tu lindo cuello.
No puedo evitar saciearme con tus ojos,
Son tan deliciosos como frutos rojos.

Esta es poesía llena de amor,
Aguantaré cualquier dolor.
Seré la vela que tú enciendes,
Abrázame con todo tu calor pues eres la única que me entiendes.

Pero como un disparo en la oscuridad,
No lo viste venir tal disparo al pecho por la realidad.
Te veo un poco despistada,
En mi la felicidad ella ya no hallaba.

Después de un tiempo solo te veía muy poco rato,
Y me dejaste vagando por tí sin saber tan siquiera un dato.
Sé que me dolió pero yo lo ví,
Fuiste tú besando con otro hombre y un dolor yo sentí.

Me hiciste un asesino sin piedad,
Me hiciste matar mi felicidad.
Me hiciste olvidar tu cinceridad,
Mataste mi única realidad.

Yo mismo tome el arma y disparé,
Con mis ilusiones acabé.
Yo quería siempre regalarte mi amor,
Pero siempre finges para tener satisfacción sin recibir dolor.

Fuiste el que me manejaste como mariometa durante esto,
Pero después de flores y chocolates por fin hoy te detesto.
Creía que nos amábamos,
Pero siempre fue una ilusión el amarnos.

Solo te fuiste con el otro a por más diversión,
Pero el no te amará como lo hice yo en aquella ocasión.
Nadie te regalará detalles como yo en tu día,
Nadie será mejor que yo, si es que amor sincero esto sería.

Pero el pecado y la confusión este amor envenenó,
Es las ganas de consumir quien intervino.
No te culpo,
Pero tampoco te disculpo.

¡Llore por tí sabes!,
Pero ni cuenta me haces.
No te daré ni una pizca de corazón sobre mí,
Guardaré todos los fragmentos de mi corazón que partiste en mil.

No sé que está pasando,
Pero unas rosas color carmesí en mi pecho están arracando.
Arranca el tegido blando,
Para acabar con lo que eh iniciado.

Creí que estaba vivo,
Pero no es lo mismo que vivir.
Mi corazón tan vacío como el marfil,
Mi yo interior tratando de sobrevivir.

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Debe de haber un mensaje escondido en algún lugar