Esta es la segunda temporada de La persona que pudo abrir mi corazón - Draco y Tu -.
¿ Que pasara con la vida de Stella ahora que sea quedado sola?
El dolor y la sed de venganza inundan en su corazón...
Comienzo abrir mis ojos lentamente, no se donde me encuentro no logro reconocer el lugar. Parece una cueva hay una fogata encendida. Me levanto de donde de me encuentro acostada y camino hasta salir de la cueva.
Sombra: Hasta que por fin despiertas- dice Sombra con una mezcla de reproche y alivio-.
Stella: Que paso?
Sombra: Te desmayaste.
Stella: Oh ya lo recuerdo.
Sombra: Apresúrate y come algo que tenemos que comenzar con tu entrenamiento, no podemos perder mas tiempo.
Stella: Tranquilo, solo estuve dormida unas cuantas horas.
Stella: QUE?- digo mientras casi me atraganto con un trozo de pan-.
Sombra: Al parecer estabas muy agotada después de utilizar tu energía en el templo.
Stella: Whoa no creí que pudiera dormir tanto.
Termine de comer y Sombra me guio hasta la cascada, para ser mas especifico en un pequeño rico donde fluye el agua que cae de la cascada.
Stella: Que hacemos aca Sombra?- pregunto curiosa-.
Sombra: Tienes que aprende a controlas tus emociones, debes estar en armonía para no dejar que tus emociones negativas fluyan.
Stella: Y eso de que me servirá?
Sombra: Te ayudara a no perder el control de tus poderes.
Stella: Bien, dime que debo hacer.
Sombra: Siéntate quiero que hagas ejercicios de meditación. Eso te ayudara a mantener la calma y a abrir tus pensamientos.
Stella: Cuanto tiempo debo hacer esto?- pregunte una ves que me encontraba sentada en el suelo-.
Sombra: El tiempo que sea necesario.
Suspire, esto va a ser muy largo. Cerré mis ojos y intente relajarme, no podía conseguirlo todo mi interior era un como un volcán a punto de hacer erupción. No puedo dejar de pensar en como vi morir a cada uno de mis seres queridos. Siento unas ganas inmensas de vengarme, no puedo dejar que Voldemort se salga con la suya. No lo permitiré.
Sombra: Niña tonta contrólate.
Al oír su voz abrí rápidamente mis ojos. De mis vamos se desprendía una extraña energía negra.
Stella: Lo siento no se que me ocurrió- dije asustada-.
Sombra: Tranquila debes tratar de dejar todo lo negativo de lado.
Stella: No puedo...
Sombra: Se que puedes hacerlo.
Stella: ¡NO!¡ TU NO ENTIENDES LO DIFÍCIL QUE ES, ESTO PARA MI!- grite con furia. Sentia mis ojos agua dos, mis lagrimas querían brotar de ellos-.
Sombra: Se que no es fácil pero, debes hacerlo si quieres salvar a los que amas- dijo con vos tranquila, pero a la ves sería-.
Suspiró cansada de todo esto. Pero en el fondo se que tiene razón, no puede permitir que mas gente inocente salga lastimada.
Stella: De acuerdo, lo haré.
Sombra: Eso quería escuchar.
Tiempo mas tarde...
Stella: Estoy exhausta.
Toda el día estar sentada en la misma posición es agotador.
Sombra: Tampoco es para tanto.
Stella: Tengo hambre...
Sombra: Ya ve a comer no has parado de decirlo en un buen tiempo.
Me fui felizmente a comer algo. Sombra parece algo mando y serio, pero me cae bien se que se preocupa mucho por mi. Estaba tan metida en mis pensamientos que no había nota que un dragón me miraba atentó. Me levante de donde estaba sentada y me acerque lentamente a él. Al principió me veía con desconfianza pero luego se acercó a mi y se inclinó, como si estuviera haciendo una reverencia. Con mucho cuidado lo acaricié lentamente. Por alguna razón me sentía muy tranquila a su lado. Es un dragón muy hermoso su piel color gris oscuro casi negro, sus alas eran por dentro de un rojo intenso, su mirada era hipnotizante parecía como si me estuviera llamando.
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Sombra: Te respeta.
Stella: Cómo sabes eso? - pregunto curiosa-.
Sombra: Cuando un dragón se inclina de ese modo ante ti, te muestra su respeto y lealtad. El sabe que tu lucharás por el bien.
Stella: Y si no puedo hacerlo? Y si el odio me domina y Voldemort termina usando a su antojo? - pregunto molesta e insegura-. Todo esto me aterra, parezco fuerte pero se que no lo soy- digo cabizbajo-.
Sombra: Se que no lo harás niña, estás destinada a algo tan grande y sin embargo, aquí estás luchan contra tus demonios y esas voces que te dice que te rindas.
Stella: Tengo miedo...
Sombra: Es normal y eso demuestra tu humanidad.
Stella: Tienes razón no puedo rendirme, debo luchar por mi familia y amigos. No me rendire- digo muy decidida y segura de lo que digo-.
Sombra: Así se habla niña tonta.
Stella: Estoy lista, enséñame todo lo que deba saber.
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Hola tanto tiempo, lo siento estuve ocupada. La continuaré quizás no tan seguido pero no la abandonaré. Gracias como siempre por sus votos y comentarios.
