Este libro empezó como un diario, por lo
mismo es un libro que no tiene ni pies ni
cabeza. Me gusta la idea de que no
tenga principio ni fin porque la vida es
así. es un libro lleno de
cuestionamientos, contradicciones, y
sobre todo encuentros. Aquí hay
palabras que he reunido para expresar
momentos y emociones. En realidad,
estas reflexiones son una historia de mi
mente fragmentada, de mi corazón y de
mis días. He creado un libro de
pensamientos rebuscados con palabras
sencillas que abarcan temas típicos;
sólo que lo rebuscado va encontrando
un sentido, lo sencillo se va
complicando y lo típico de va
transformando en único.
Soy pintora y escribo como pinto:
siempre me pinto, todas mis pinturas
tienen que ver conmigo, entonces de
alguna forma también me escribo
porque todo lo que pongo en palabras
se convierte en páginas de mi cara, de
mi cuerpo y de mis sentimientos. Al
escribir sobre mi me he dado cuenta de
que escribo sobre lo que todos hemos
vivido hasta hoy; he descubierto que
llegando a conocerte empiezas a
conocer al resto del mundo, y eso no
pasaría si no estuviéramos hechos de lo
mismo. Así que mis obras hablan de mi
y de todos, ¡y yo hablo sola!
Querer abarcar muchos temas en muy
pocas palabras es, de cierta manera, un
reflejo de mi forma de ser: "impulsiva y
extremista", como sí fuera esta la última
oportunidad que tuviera para hablar de
lo que siento y lo que sé. ¿Pero qué tal
si lo es? Por eso hablo del "momento" y
de la enorme fuerza que tenemos para
transformarlo.
Al final todo tiene que ver con el amor.
El amor a todo, no sólo el amor a una
pareja o a personas. El amor que sabe
distinguir entre lo pasajero y lo eterno.
El amor que encierra la satisfacción de
que estas resolviendo el porqué de tu
existencia. El verdadero amor.
Daniela