Reina de Dragones (Sasuhina)

Renacimiento

Reina de Dragones

Capitulo 1

Esta es una historia Sasuhina, llena de ficción, romance, algo de erotismo, y vocabulario vulgar por favor leer bajo su propia responsabilidad.

"Sasuhina" : pensamientos

"Sasuhina" : cambio de escena

-Sasuhina- diálogos

Por favor perdone cualquier falta de ortografía o de gramática.

&&&&& Hinata Hyuga &&&&&

Mire aquellos ojos rojos que tenían activado aquel Sharingan, pero este hombre era diferente, Sasuke no tenía el cabello tan largo ni aquellas marcas debajo de los ojos. Este hombre era Itachi Uchiha. Detrás de el se encontraba un hombre azul con dientes de tiburón y una gran espada, también estaba un rubio de cabello largo y un hombre con mascara naranja, todos poseían una capa de color negro con nubes rojas, Akatsuki.

-Q-que e-es l-lo q-qui-quieren? – mi voz temblaba y mi corazón palpitaba a gran velocidad, tenia miedo no por mi, sino por las criaturas que tenia escondidas, si me las quitaban?.

-Pasamos dos días completos buscan la fuente de aquella explosión de poder, y nos encontramos contigo – el hombre azul bufo molesto, - pensaba que encontraríamos un oponente fuerte con el cual podríamos divertirnos, es decepcionante - .

-Cállate Kisame! , maldición! No ves que asustas a esta preciosura – el rubio me miro de forma lujuriosa, trague en seco.

-Deidara-sempai, porque le llama preciosura? Es porque es bonita,- La voz de imitación a un niño era escalofriante, algo me decía que tenia que cuidarme de el mas que nadie.

El pelinegro solo seguía en silencio observándome aun con su Sharingan activado, mientras los demás seguían discutiendo, la mirada negra clavada en mi me incomodaba y asustaba. Estaba empezando a sudar mas y a temblar, los dragones empezaron a sentir mi miedo y se removieron incómodos entre mi ropaje, llamado la atención del Uchiha, quien empezó a ver mi cuerpo con más atención.

-Y-yo – susurré llamado la atención de los hombres, que viraron sus cabezas solo observándome, también desviando la atención del Uchiha - n-no s-se d-de q-que p-poder ha-hablan, y-yo no he se-sentido na-nada-

-Nos damos cuenta preciosa- Kisame soltó una carcajada- tu no has visto nada o si? – me miro fríamente .

-S-si – mentí – vi a-a u-unos ho-hombres, e-en e-esa di-dirección – apunte con mi temblorosa mano al este.

-Viste a unos hombres? – Deidara se acerco tanto que temí que sintiera de alguna forma a mis dragones – estas segura? – afirme repetidamente con la cabeza – excelente desde que me curaron me he sentido con ganas de una gran pelea – se alejó y solte el aire que sin querer estaba reteniendo.

-Enserio, Deidara-sempai?! Yo también! – el hombre de mascara soltó un grito de alegría y empezó a salta como un niño quien le han regalado una paleta.

-Eso es bueno, tener ejercicio, - el hombre azul empezó a caminar en la dirección que le indique.

-Si vamos – el rubio y el de máscara le siguieron – vamos Itachi – el Uchiha seguía parado ahí sin dejar de observarme, el no me creyó. Se acercó y cada paso que el daba era un paso que yo retrocedía, hasta que mi espalda chocó contra un árbol, movió su mano con una lentitud matadora, la acercó hasta mi capa exactamente a mi hombro donde unos de mis bebes estaba reposando, antes de que lo tocara golpee su mano con la mía.

-No me toques – dije firmemente, mientras lo observaba, no iba a dejar que lastimarán a mis hijos

-Nos has estado mintiendo, no es así? – su voz sonó tan fría que me heló el alma por unos segundos.