Estando muy cerca de la muerte.

capitulo 11

Pov Lucy:

Ya han pasado varios días acá, quizás ya llevo el mes... la verdad no tengo claridad del tiempo, ni siquiera sé qué día es hoy.

Solo sé que a lo mejor saldré pronto de aquí.

-¿puedo preguntarte algo Lucia? – dijo, ese muchacho que quizás, es más extraño de lo que me consideran a mi

-qué?

-esas dos hermosuras que vienen a visitarte en las mañanas son

-son solo amigas – lo interrumpí

-como sea, a ti te gustan las niñas, ¿no?

-a lo mejor si

-esa no es respuesta

-para mí, si lo es

-no sé qué le ven a una vieja que se las da de intelectual y madura, cuando en realidad es solo una niña que quiere llamar la atención

Algunos compañeros que se encontraban allí, iniciaron un festejo gritando " Fuertee!! Fuerteeeeee!!!!"

-ok, eso piensas tú, pero ellas no –

-no te soporto, sabes?

-si lo sabia

El tipo este, comenzó a molestarse simplemente por que ignoraba sus comentarios, hasta que se lo llevaron. En esta casa me llevaba bien con casi todos, exceptuando a unos dos o tres.

Ya me sentía mucho mejor

Pero en realidad quería irme

Solo quería eso.

Verónica, no la había visto hace una semana

Es diferente esto, porque ella, está todos los días y ¿Será que se habrá ido?

Espero todo el día, igual que ayer, igual que antes que ayer, igual que esta semana y nada

Me decido levantar y voy a la dirección

Tun- tun

Toco la puerta del despacho de Gabriela

-¿puedo pasar?

-adelante – dice

Entro y la observo, está mirando el atardecer desde la ventana

-¿Qué sucede Lucia?

-emm... lo que pasa es que...yo.

-¿Si?

-echaste a Verónica?

Se voltea mirándome graciosamente

-no

- ¿y por qué no ha venido?

Siguió sonriendo...

-tu respuesta está tras de ti

Con pena "suponiendo lo más obvio" volteé a mirar y allí estaba ella...

Llevaba puesto un pantalón blanco con botas, y una blusa negra elegante... se veía algo mayor para la edad, que suponía que tenía, pero eso no quitaba de que se viera realmente hermosa y atractiva.

Su cabello, estaba recogido y sobre sus ojos, se posaban unos lentes de descanso que - como siempre – le daban, ese aire intelectual

Ella es delgada y tiene un lindo cuerpo. me gustan sus piernas – aunque siempre está de pantalón, de tez blanca pero está bronceada, es bastante linda.

-¿me buscabas? – prontamente, me sacó de mis divagaciones, su voz tenia ese toque de ternura mezclada con seriedad – sonrió

-eh... no, no, no – mentí