un amor desequilibrado "La llamada" capitulo 4

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-No te preocupes, le diré al profesor que te dejé entrar cada vez que llegues tarde 一Al terminar de hablar Nahomi se levantó y volteo a verme

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-No te preocupes, le diré al profesor que te dejé entrar cada vez que llegues tarde 一Al terminar de hablar Nahomi se levantó y volteo a verme.

-No necesito tu ayuda, no es necesario. Solo nesesito llegar más temprano, esto no se volverá a repetir.

__¿Sigues enojada con migo por lo de esta mañana? Si es así te ofrezco una disculpa, no era mi intención faltarle al respeto 一Tener a Nahomi tan cerca me inquieta, su olor, su ecencia, siento que no podré controlarme. Tome un cigarillo del bolso de mi pantalón y lo encendí para poder relajarme.

¿Qué estás asiendo? Es una escuela no puedes fumar 一Rei ante su ignorancia, yo puedo hacer lo que quiera siempre asido asi, sin tomarle importancia a sus palabras y seguí con mi cigarillo mientras opservava su cara de disgusto que me provocaba gracia.

一¿Puedo pedirte un favor?

一¿Cuál?

一Alejate de Ciel, el ya tiene muchos problemas y no quiero que se enbuelva en un escandalo con tigo. Ya ahí rumores no lo tomes a mal sólo lo quiero proteger 一Tire mi cigarrillo se me quitaron las ganas de fumar al recordar lo de años atras.

NARRA NAHOMI

¿Proteger a Ciel? ¿Qué ya tiene muchos problemas? ¿Es probable que sea por el intento de asesinato que cometió hace 15 años?

一¿Qué problemas tiene Ciel? 一Le dije curiosa.

一No creeo que este sea un buen lugar para hablar, aparte no quiero hablar 一Dijo Dante viendo me fijamente a los ojos asiendo que bajará la mirada.

一Responde mi pregunta 一Le dije evitando verlo a los ojos.

一Te eh dicho que no, deja de estar de curriosa no te conviene 一Una vez dicho eso Dante se fue sonriendo de lado.

NARRADORA

La joven de inmediato se dirigió a la biblioteca para despejar su mente, tomo un libro y se dirigió a sentarse en una de las tantas mesas que había ahí . Después de un rato leyendo su teléfono comenzó a sonar ella lo tomo y jamás imagino la noticia que le estaban apuntó de dar.

¿Hola? 一Dijo dudosa ya que el número era desconocido.

一Hola, buenos días hablo con la señorita Nahomi 一Dijo una voz masculina del otro lado del telefono.

ㄧSi, soy yo 一Dijo algo nerviosa y con un nudo en el estómago, algo no andaba bien lo podría plesentir y lamentablemente no estaba equivocada.

一Me presentó señorita, soy el oficial Alfredo Martínez el motivo de mi llamada es para comunicarle que el orfanato en el que usted habitaba ah sido destruido en un incendio hace un mes. Nadie sobrevivió, bueno sólo la madre superiora ella fue la que quiso que nos comunicarramos con usted le sugiero que venga a verla ya que está sumamente delicada y no creo que sobreviva más de una semana.
Nahomi no podía creer lo que ohia, no podía comprenderlo, no podía asimilarlo de inmediato las imágenes y recuerdos la indundaron dejando la total mente muda
一¿Hola? ¿Hola? 一Repetía una y otra vez el oficial Alfredo pero no optenia respuesta. La joven aún seguía en shock  con un nudo inmenso en la garganta, su boca estaba seca, su respiración se agitaba, su rostro se tornaba palido. La joven temblorosa colgó para luego apagar su celular y levantándose de su aciento, puso sus manos sobre la mesa asiendo que su largo cabello negro callera sobre su cara mientras que trataba de controlar su respiración y su cuerpo para que dejará de temblar, cero sus ojos mientras negaba con la cabeza para evitar colapsar.
La encargada de la biblioteca se dio cuenta que la chica estaba mal y se acercó a ella para poder ayudarle. Nahomi estaba tan concentrada en sus pensamientos que al centir la mano de la encargada de la biblioteca gritó muy fuerte asiendo que la encargada se asustara y todos los presentes la boltearron a ver.

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