–No puedo hacerlo... no puedo.
ChanYeol sintió como los labios de su esposo abandonaban la calidez de los suyos, y en cuanto abrió los ojos se percató de que él había establecido una distancia considerable. Tal vez era menos de un metro, pero el alto sintió que era lo más similar a un abismo.
–BaekHyun...
–No, ChanYeol. –El castaño se negó y le dio la espalda– Tienes todo el derecho de ver a ChanHyun, cuando quieras, y mientras esté en mis posibilidades llevarlo contigo a un lugar neutro... o incluso la Señora Hye puede llevarlo si me encuentro ocupado, pero yo no puedo hacer esto. No puedo permitirme volver a pasar por esto, yo...
ChanYeol estaba harto de no entender nada. No entendía ese cambio tan brusco en su esposo, y por eso y con la única finalidad de saber de una vez por todas que estaba pasando por la mente de su lindo y aún esposo, fue que lo tomo del brazo, jalando su cuerpo hacia el suyo.
–Chan...
–Cállate.
El más bajo lo miro confundido, y se sintió completamente vulnerable al no poder romper el abrazo de su marido.
–Tú sabes que soy pésimo en entenderte, BaekHyun. No soy el mejor, claro está, pero necesito que dejes de hablarme con palabras que no entiendo. Necesito saber a qué le temes tanto, saber por qué dices que no puedes hacerlo cuando hace un segundo tus labios tocaron los míos como antes –el castaño desvió la mirada–, te amo Byun BaekHyun. Te amo tanto que no cabe segundo desde que se que soy papá en que te agradezco una y mil veces por nuestro hijo. Es un niño sano, fuerte, amoroso... y eso es gracias a tu esfuerzo y dedicación.
–Es mi hijo...
–Y mío también.
El profesor lo miro sintiendo como el miedo comenzaba a apoderarse de él nuevamente.
–ChanYeol...
–No voy a quitártelo, BaekHyun.
Y fueron esas palabras las que llenaron de tanto alivio al más bajo, quién dejo salir el aire de sus pulmones, logrando que se desvaneciera entre los brazos de su marido, quién amortiguó la caída.
–BaekHyun...
–Promételo... –el nombrado lo miro con los ojos acuosos– Prométeme que no me quitaras a nuestro hijo, ChanYeol. Prométemelo...
–Baek...
–Hazlo, y te diré todo lo que quieras saber.
BaekHyun tomó una postura fuera de sus brazos, y ahí sentado frente a su marido, espero por aquella confirmación. Por su parte ChanYeol estaba conciente de querer saberlo todo, por eso no dudó ni un minuto más, lo miró, y dejando un beso sobre sus manos dijo:
–Te lo prometo.
🎂
ChanYeol no podía creer lo que escuchaba.
Nunca, ni siquiera un instante se pudo imaginar la atrocidad bien planeada de su madre, quién no solo le bastó con hacerle la vida imposible a su esposo, sino que también había amenazado la vida de su hijo.
–ChanYeol ¿a dónde vas? –Le preguntó el castaño al ver como su marido se dirigía a la salida– No, no vayas, Chan...
–Ella tiene que escucharme, BaekHyun, por una mierda ella va a escucharme.
El bajo mordió sus labios al escuchar la firmeza en la voz de su marido, la cual solo había escuchado mientras negociaba, pero nunca dirigida a su familia. El había estado tan inmerso y atento a cada palabra que formaba parte de la historia por la cual eligió proteger a su pequeño tesoro, que podía sentir la manera en la que su esposo se sentía al respecto.
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La magia de un deseo [ChanBaek]
FanfictionPark ChanYeol y Byun BaekHyun tienen un pasado. Uno al que este último no quiere volver, mientras que el menor busca de manera desesperada traer de regreso a quién fuera su esposo. Y si, ambos estaban casados y justo ahora gracias a un investigado...