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- Goldy... hijo, tenemos que ir a un lugar.- habló despacio el azabache.

No podían hacer nada, por el momento debían abstenerse a seguir las órdenes de su madre.

- ¿A dónde vamos? Espero que sea rápido, tengo que hacer tareas.-

Una característica muy clara del menor era su responsabilidad, seriedad y madurez para su edad. Fred y Gold trataron de detener este cambio, dándole más cariño, pero bueno, su personalidad resultó ser de esa forma. Tan similar a ellos.

- Bueno... eso depende de ti.-
- Por lo pronto sólo cambiate  y... trae tu collar.-

Normalmente, sus papás no lo dejaban usar aquel objeto. Lo que despertaba cierta curiosidad en el inteligente niño. 


Teddy, desde su cuarto estaba dibujando. Se sentía muy nervioso, hace unos momentos su papá vino a decirle que deberán viajar. Pero, no había visto a sus padres alistar maletas. Incluso si sólo viajaban un día, Freddy siempre era precavido y llevaba un pequeño maletín junto a él.

Teddy, estaba con ansiedad. Por más que sus mayores intentarán ocultarlo. Sin duda, estaban escondiéndole algo.

- ¡No! ¡No, No!.- gritaba frustrada la reina.

Su cabello estaba recogido en una cola alta, para que no pudiera interferir en su ardua investigación. Pero, el no encontrar nada, sólo podía frustrarla. Su reino estaba en peligro.

En ese momento las puertas de la biblioteca se abrieron, dando paso a sus hijos y nietos.

Los más pequeños la miraron con curiosidad y desconfianza. Era alguien que nunca vieron en su vida. Vitea se acercó a ellos lentamente, no quería asustarlos, suficiente con la extraña forma de llegar al lugar.

La reina escuchaba todos los murmullos de sus nietos. Se notaban inquietos.

En ese instante ella abrió una de las grandes puertas llenas de polvo del Palacio. Aparentemente está daba a un jardín, pero estaba casi todo en ruinas.

Con un chasquido de dedos, ella logró poner todo en orden, dejando atónitos a los niños.

- ¿Pueden venir un momento?.-

Era claro a quienes se referían. Ambos pequeños caminaron tomados de las manos hacia la mujer desconocida.

El rubio oji-azul se armó de valor y le pregunto directamente.

- ¿Quién, o qué eres?.-
- Soy su abuela.-
- ¿Abuela? Pero ni mamá  ni papá tienen padres.- respondió Teddy
- Ellos se lo explicarán luego, pero ahora, ¿pueden hacerme un favor?.-
- ¿Qué clase de favor?.-
- Quiero que me escuchen atentamente ¿Si? Les voy a hacer preguntas y necesito que sean sinceros. ¿Pueden hacer eso?.-

Ambos se miraron, no conocían a la mujer para nada pero, por algo los habían traído sus padres ¿No?

Probablemente necesitarían, más tiempo para entender las cosas

Disculpen la demora es que tenía que ensayar y tbm tareas y otras cosas. Pero bueno

Con cariño su autora ^^

Nuestro Destino Esta en el Universo (Golddy)(GoldFred)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora