Me sentí raro, el echo en el que miro ahora todo con más sentido; no me agrada de una manera.
Mi celular vibro por novena vez avisando que tenía un mensaje, no eh querido mirar mi celular por un largo tiempo.
Me recoste en la orilla de mi habitación y con las manos abrazando mis piernas comprendi; el por que, del jamás que sería aceptado de esta forma.
Pero no me importa, o eso creia.
Taehyung podía hacerme sentir bien y todo eso, pero siempre me sentía vacío en la hora en la cual llegaba a casa.
El día el cual lo conoci; y un impulso me llevo a hablarle fue el mejor, miraba su rostro desde lejos mientras que el se sentaba en la banca a tomar fotografías.
Era una bellesa, un poema echo con las rimas más hermosas, pero sí digo que sus ojos son una esfera que brilla, mostrando, que en su futuro estoy yo.
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