Dear Kylie.

tres

Querida Kylie Lew,

Hace ya dos semanas desde que te fuiste, dos malditas semanas, todavía no puedo aceptarlo, parece todo tan irreal.

Está última semana me ha ido horrible, en la escuela y en casa, resumiendo todo; He vuelto a golpear a Thomas y me han suspendido. He peledo con mis padres y me han echado de casa. Te necesito, necesito que me digas que todo estará bien, que me digas que me amas, y que me beses como solo tú sabes hacerlo. (No diré "como tu sabías hacerlo", porque para mí no has muerto en lo absoluto).

Necesito un abrazo de esos que me alegraban cuando estaba en mis peores días, necesito uno de tus besos, de esos que tanto me encantaban y que ya no volverán, jamás.

Necesito que seas tú la que este en estos momentos conmigo, que seas tú, otra vez la que me saque sonrisas y la que me cure las heridas. No Courtney, no la quiero a ella, te quiero a ti, te quiero de vuelta.

He decidido perdonarte por lo que has hecho, pero no puedo perdonarme a mí mismo por no demostrarte cuanto te amaba todos los días de tu corta vida, de no abrazarte cuando tuve la oportunidad de hacerlo, de no decirte cuanto amaba tu cabello naranja, cuando amaba tu boca, tus ojos, tu nariz y tu piel tan blanca como la nieve, en resumen, por no decirte que amaba cada pequeña parte de tu cuerpo.

No sabes cuan agradecido estuve siempre de que a pesar de todos los chicos, muchísimos mejores que yo en todos los aspectos me hayas elegido a mí.

Y antes de finalizar, quiero pedirte perdón, no espero que me perdones, y se que no lo harás y no podrás, pero necesito creer que me has perdonado todo mal que te he hecho.

Citaré una frase de tu libro favorito "Sería un privilegio que me rompieras el corazón" y vaya privilegio tuve. (Sí, lo he leído, por qué soy masoquista, y quiero recordarte siempre).

              Te amo, Kylie.

Tuyo, Jay Sky.