[ Taming Pitch ] Jack Frost & Pitch Black

He's in Trouble

A Jack le gusta bastante su nuevo compañero, este extraño y gruñon Pitch Black. Le resulta divertido tirarle bolas de nieve y trenzar copos de nieve en su cabello. Él hace los ruidos más graciosos en la frustración. Jack piensa que es realmente entrañable. Pitch se niega a compartir el sentimiento.

El Nightmare King lamenta el día en que conoció a Jack Frost. El pequeño infierno de un chico se había pegado rápidamente a su lado. Al principio, Jack había mantenido un poco de miedo, permitiendo que su presencia fuera tolerable. Pitch nunca fue uno para rechazar una comida gratis. Pero el terror pronto se desvaneció, la familiaridad tomó su lugar. Ahora, el niño es francamente insoportable. Se comportó como un cachorro desaliñado y perdido y siguió a Pitch a donde fuera. Incluso si Pitch lograba perder a Jack, una vez que regresara a su vivienda, allí estaría Jack. El cachorro leal siempre ansioso por los momentos de diversión. Aunque la idea de diversión de Jack involucraba ver lo loco que Pitch podía volverse antes de que comenzara a atacarlo activamente. Hasta ahora, no tomó mucho.

En este momento, Jack se sienta a su izquierda, lanzando bolas de nieve y observándolas estallar contra el techo. Está hablando de algún incidente de ventisca o trineo. Pitch realmente no podría importarle menos. Hoy no había sido el mejor de los días. Había perdido a algunos de sus ya escasos creyentes. Las colonias otroramente frágiles habían crecido en tamaño y estabilidad. Los colonos ya no estaban llenos de miedo o plagados de dudas. Era un mundo nuevo y valiente que no dejaba espacio para Pitch. Así que no, no tuvo un muy buen día.

La presencia incesante de Jack, un dolor incluso en su mejor humor, se manifiesto como la tortura que era.

Él es Nightmare King. No necesita sufrir las mil horas sin rumbo de la compañía del sprite. No tiene por qué soportar las bromas pútridas y las carcajadas incesantes. Ha vivido desde que el Hombre respiró por primera vez, más viejo que la Luna siempre vigilante. Jack Frost es un gusano bajo sus pies y es hora de que sepa su lugar.

Pitch dibuja las sombras a su alrededor. Oye a Jack hacer una pausa en su parloteo, su atención atrapada. Una sonrisa encantadora se agrieta en los labios de Pitch cuando él convoca sus oscuros portales. Jack lo seguirá. Jack siempre lo sigue. Pero si Pitch permanece solo un respiro más largo, casi llamando al niño, bueno, el sprite no es nada más sabio.

Se teletransportan a alguna isla olvidada cerca del ecuador. Es el hogar de unos pocos resistentes, todos deliciosamente supersticiosos y desconfiados del mundo. Es uno de los lugares favoritos de Pitch. Pero lo que es más importante, es reprimentemente cálido.

Jack se tropieza después de él. Sus mejillas se vuelven más pálidas cuando el calor se acentúa sobre él. Parece físicamente incapaz de sonrojarse. Curioso.

"Guau." Jack jadea, tirando de su cuello. Un fino brillo de sudor ya se forma en su frente. "Entonces, uh, wow. ¿Qué-qué estamos haciendo, uh, aquí?"

"No estamos haciendo nada. Estoy aquí para ver a mis creyentes". Pitch responde impasible, cambiando de una sombra oscilante a la siguiente.

El viento, el compañero constante de Jack, está marcadamente ausente. Lo deja a tierra. Intenta seguir a Pitch solo para quemarse en la arena lavada por el sol. El chico se tambalea detrás de él, sin embargo, apoyándose pesadamente contra su bastón. Pitch elogia su tenacidad pero se burla de su insensatez. El niño tenía las habilidades de auto conservación de un mosquito. No, espera. Eso sería un insulto para el mosquito.

Pitch avanza, aparentemente ajeno a las dificultades del sprite de invierno. Él verifica a sus creyentes. Pero se acerca el mediodía y, en realidad, hay poco que pueda hacer durante el día. Jack había comentado aquí y allá y luego se quedó felizmente en silencio. Logran llegar a la mitad de la isla antes de que suceda.

Pitch escucha un ruido sordo detrás de él. Se gira para encontrar a Jack tendido contra la arena blanca y caliente. Sus ropas están empapadas de sudor y las extremidades delgadas casi parecen gotear. Parece que se está derritiendo. Su piel se blanquea como ek hueso y permanece inmóvil.

Y hay algo simplemente malo en ver a Jack tan quieto. Pitch intenta formar explicaciones, explicaciones coherentes y eruditas, para el latido distintivo en su pecho. Es el sol. Es el calor. Pero en realidad, todo lo que puede pensar es que Jack, brillante y travieso infinitamente molesto, siempre dando vueltas, siempre riendo, siempre haciendo un lío vivo y burbujeante, tan honestamente y fervientemente vivo. Ver a Jack todavía es ver salir el sol desde el oeste. Simplemente no se supone que esto suceda.

La presión en su pecho se niega a aliviarse. Sólo crece cuanto más se queda mirando la forma inerte de Jack. Intenta apartar la mirada, alejarse. Él había planeado esto. Es el castigo correcto y adecuado para todos los problemas que causó Jack. Pero, él no puede. El no puede. Él simplemente no puede.

Pitch mierde su labio inferior y aprieta los puños antes de soltar una respiración lenta y constante. Se arrodilla, tocando la mejilla del niño. Jack sigue siendo fresco al tacto, increíble.

"Debo ser una especie de masoquista". Él suspira, deslizando sus brazos bajo la forma floja de Jack. "Vamos, entonces. Vamos a sacarte de aquí".

Levanta al niño, despiertando al sprite en el proceso. Jack parpadea hacia Pitch, una pequeña y perezosa sonrisa se enrosca en la comisura de su boca.

"Gracias". Susurra con voz ronca.

"No me lo agradezcas todavía". Pitch resopla, convocando sus sombras. "Planeo torturarte lenta e íntimamente, en todas las formas que temes".

Jack se echa a reír. Pitch había usado esa línea una docena de veces antes. Es una amenaza vacía, ambos lo saben.

"No, quiero decir..." Jack murmura y se presiona más cerca de Pitch. "Nunca antes había estado en la playa. No creo haber visto un cielo tan azul. Así que, gracias".

Pitch hace un ruido estrangulado en la parte posterior de su garganta. Quiere gritar, gritar: "¡Casi te mato, idiota!" Pero él permanece en silencio, tratando de no saborear el frío peso de Jack en sus brazos. El tacto es un lujo y ha sido demasiado tiempo.  Pitch cierra los ojos mientras las sombras se los llevan.

El esta en problemas.

Porque en algún punto del camino, en su tan complicada relación, Jack Frost se convirtió en una constante en la vida de Pitch. Jack era el ruido blanco de fondo. Una molestia hecha costumbre. Llegó a casa esperando una ráfaga de aire frío o una bola de nieve grande escarcha para saludarlo. Esperaba ser arrastrado por una escarcha parecida a un helecho y una capa de hielo. Esperaba echar un vistazo a su lado y allí estaría Jack.

Él está en muchos problemas.

Al llegar a casa, Pitch pone a Jack en una plataforma elevada. El sprite está profundamente dormido o desmayado. De cualquier manera, él está felizmente inconsciente y Pitch se permite pasar una mano por ese pelo blanco como la nieve. Sería un acto de afecto si hubiera sido por alguien más.

"¿Qué voy a hacer contigo, Jack Frost?" Pitch murmura, sinceramente perdido.

Jack solo sonríe en respuesta, apoyándose en el tacto.