One-shots Alastor x Charlie (Hazbin Hotel)

Etapas - Parte 1/2

ETAPA 1

"Para comenzar una relación siempre tienes que tener en claro los defectos, pensamientos, personalidad, e ideas de la persona que vaya a formar parte de tu vida, y obviamente convivir con ello; si de verdad l@ amas esas cosas no serán ni el más mínimo problema, y verás siempre su lado bueno".

Era un día como cualquier otro en el infierno, común y corriente si lo ves de la perspectiva de los habitantes, lo que se refiere a prostíbulos con sus damas y caballeros dando sus eróticos espectáculos, bares abiertos y llenos de demonios, un/a prostitut@ en alguna esquina a la espera de un posible cliente, ya saben, lo típico. Pero eso no va al caso, ahora nos centraremos es en cierta chica que caminaba exasperada de un lado a otro en el centro de su oficina, siendo ella dueña del mismo local en el que se encontraba dicha área de trabajo; murmuraba nerviosa cosas que ni su compañera, la cual estaba en la misma habitación, lograba entender del todo.

- ¿Que tal si me dice que no? o ¿Que pasa si no le gusta lo que pienso planear? ¡SEGURAMENTE ME ODIARÁ DESPUÉS DE ESTO! _ No detuvo su agitado caminar en ningún momento, solo se limitó a poner su mano cerca de sus labios para morder sus nudillos con preocupación.

- Exageras demasiado Charlie, se le es muy notable lo que siente por ti _ Pronunció la joven de sedoso cabello blanco que la acompañaba.

- Pero quien sabe si es así solo por ser amable y no porque esté enamorado de mi ¡Aaaaghhh, ya no se que hacer! _ Se detuvo frente a su escritorio y apoyó ambas manos en él, bajó un poco la cabeza causando que parte de su brillante pelo cubriera un poco su cara.

Su amiga se levantó del sillón en el que estaba y se acercó a ella, al estar ya a su lado le tomó el rostro con una de sus manos obligándola a verla, lentamente le quitó los mechones restantes de su frente e inesperadamente le propinó una leve bofetada para luego agarrarle los hombros.

- Deja de preocuparte tanto ¡Es obvio que le gustas a ese hombre! ¡¿Cómo carajo vas a decir que todo saldrá mal si es más que evidente que le atraes?! _ Decía a la vez que la movía de atrás hacia adelante sin aplicar tanta fuerza.

- O-OK PE-ERO YA PA-RA DE BA-TUQUE-ARME _ Hablaba con dificultad entre el vaivén.

La de piel grisácea paró de moverla y retiró sus manos de los hombros de la contraria, mantuvo su mirada frunciendo el entrecejo clavada en la de ojos azabaches y sus brazos cruzados mostrando firmeza.

- Lo siento ¿Está bien? Es que tengo miedo d-de lo que pueda llegar a p-pasar, lo amo demasiado aunque sea un psicópata, caníbal, algo aterrador, no me importan esos detalles que tenga, y-y no me imagino un futuro en el que él ya no me vuelva a tratar de la misma manera si me llega a rechazar y... _ Fue interrumpida por otro pequeña bofetada en la otra mejilla.

- Te mereces a alguien que en serio te valore, si ese estúpido venado no ve lo especial que eres no deberías de seguir detrás de él, pero ahora voy a entrar al caso real, que es en el que de verdad te ama porque se le nota a leguas, y te va a aceptar así sea muy ridícula la forma en la que te le vayas a declarar _ Posó una de sus manos en uno de los hombros de la princesa para acariciarlo, mostrando su apoyo y consideración.

- Gracias Vaggs, muchísimas gracias _ Dijo esbozando una dulce sonrisa llena de sinceridad y agradecimiento por la ayuda de su fiel amiga.

Un rato más tarde...

La joven heredera real se encontraba en el balcón de la terraza del hotel, en ese momento estaba sola, tenía los brazos apoyados del barandal mientras escribía y tachaba en una libreta tanto ideas para el local como para maneras de mostrarle lo que sentía a su persona especial.