ÉXTASIS

CAPITULO 4: Algo inesperado

Esta mañana amanecí de muy buen humor, todo iba a ser perfecto, pensé yo...como que había una luz especial, me puse un vestido ajustado rojo, algo abierto por detrás que dejaba ver claramente todas mis atracciones físicas, la forma que marcaba mis curvas y dejé el pelo suelto.
Lisa y yo nos separamos con una abrazo, ella a su oficina y yo a la mía. Y como siempre lo primero que hice fue llevarle su café.

-buenos días kath- me saludó él antes de que pudiera articular palabra alguna

-buenos días Alex- le respondí, me dijo que nos tuteáramos.

-quiero que salgamos a cenar esta noche, tengo algo que decirte- hablaba tranquilo cosa que me hizo no preocuparme

-de acuerdo, bueno voy a trabajar- me despedí

*Narra Kath*

Qué querrá decirme?? Ummm....ya lo sabré

A las 17:39 h de la tarde estaba trabajando hasta que tuve que ir a la oficina de al lado para hacer copia de unos informes.

Pero detrás de mi quedó ocurriendo algo...el ascensor se abrió.

-hola Carmen- saludó

-hola señorita Ferrer, seguro viene a ver al señor williams- la dijo

-a quién si no? Y no hace falta que me anuncies- presume y entra en la oficina

-si claro, si- a Carmen la desagrada

*En la oficina de Alex*

Alex se sobresalta, no la esperaba allí.

-hola mi amor, me extrañaste?- dice coqueta

-Marissa?que haces aquí?- se levanta y la pregunta, lleva un vestido arrebatador.

-dime que no me extrañaste- ella se acerca en plan seductora y le besa apasionadamente.

Yo estoy saliendo de la oficina de copias para ir a la de Alex y entregarle los papeles.

-señora Carmen necesito el sello para los papeles del señor- la pido

-aquí tienes mi niña- me lo entrega, yo los sello

-ahorita vengo- voy en dirección a la oficina

-señorita espere, no puede en...- me dice Carmen queriendo detenerme.

Pero es demasiado tarde, abro la puerta y al alzar la vista, siento como se me cae el corazón por los suelos, como si se me desgarrara el alma...por qué tuve que abrir la maldita puerta?? Maldigo mil veces la hora que abrí la puerta, siento mis ojos cristalizados, un segundo más y echo a llorar...

Están allí los dos, él con el cinturón y el pantalón desabrochado y ella con las tiras bajadas besándose a más no poder.

Pero no Katherine aquí no!, si vas a llorar que sea en tu almohada mami, en tu almohada!!

-Kath!- Alex se asusta y empieza a arreglarse

-lo...lo siento venía a traerle estos papeles que me pidió con urgencia- respondí con el poco valor que me quedaba con la voz casi quebrada por querer llorar

-y? No ves que está ocupado?- respondió la rubia esa, es hermosa eso sí y muy atractiva

-Marissa callate!- Alex la grita

-kath por favor...- Alex comienza ha hablar

-siento haberles interrumpido, regresaré en otro momento- salgo de allí corriendo porque ya no puedo retener las lágrimas.

Me voy a los baños, él me sigue pero soy lo suficientemente rápida como para cerrar con llave.

-ábreme la puerta kath! necesito hablar contigo porfavor, no me hagas esto- se le oye muy desesperado