La Caída de Metlan

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Todo se encontraba listo para terminar con la última horda de los demonios calavera, quienes yacían en el cerro del sombreretillo amurallado con sus muros de oxidina y robustos troncos mirando a sus alrededores llevaban llamas en vez de ojos, llenos de carne putrefacta en sus bocas y manos deseosos del agua sagrada que poseían los humanos por dentro, humanos a quienes maldicen eternamente por haber acabado con su líder y estar ahora varados esperando su regreso. El ambiente era inmejorable parecía que los mismos antiguos estaban ayudando al demonio azul. Las nubes caían sobre la fortaleza espesándose por toda la falda del cerro cubriendo la vista de los demonios quienes no lograban ver más allá de su primera línea, el silencio se apoderaba de todo el valle anunciando a un depredador.
El ejército de maíz dorado, bien inmaculado de los dioses era guiado por el demonio azul, quien había ordenado ir a pie y ligeros, con escudos en las espaldas y espadas desenvainadas. Todos los guerreros iban caminando apoyándose con sus manos para hacer el menor ruido posible subiendo por la espesa neblina que caía desde el cerro simulando una cascada. Más de mil hombres estaban listos para morir, en sus mentes la posibilidad de regalarles a sus hijos un mundo nuevo, en sus corazones el sentimiento de ser guiados por el más gallardo de todos, el único hombre que se había llenado de valor inspirando coraje y espíritu a toda su especie. En la espalda del demonio azul un escudo hecho por su compañero Cuhautelo, recolectando la tierra y los materiales a las afueras de
Coluacan, se dice entre los hombres de guerra que es la única arma hecha con el soplo de un dragón lo que la hace indestructible ante cualquier ataque y ser que habite en la tierra, un arma tan especial solo puede ser portada por un hombre así de especial. Sus manos eran enormes dedos gordos y anchos, de sus ojos emanaba una rabia que paralizaba hasta los habitantes del Mictlan los "no muertos", sus labios eran grandes y carnosos su rostro llevaba varias cicatrices que eran escondidas por su máscara de guerra que sólo dejaba ver su mirada, nariz y labios. La macara intentaba simular lenguas de fuego cual vela encendida en la parte los ojos, imitando el rostro de sus enemigos, pintada de color azul, porque el portador pensaba que era el color del fuego que escupia su Dios padre y en honor a él había escogido ese color, el color de la libertad y la valentía. Su cuerpo era demasiado robusto y bien fornido su torso era grande y sus brazos daban la sensación de que podía cargar el mismo sol con ellos. Su corazón latía llenado en su garganta un grito de euforia y valentía para inspirar a los suyos con cada latido que daba. Cada paso que realizaba hacia la cima la ausencia de todo sonido se notaba más atormentando a todos en sombreretillo, ni siquiera el grillido que armoniza el silencio se encontraba esa mañana.

El demonio azullevanto el puño y lo bajo rápido en señal de alto, frente al ejército se veíanuna docena de pequeñas llamas flotantes, era evidente que estaban frente a losseres del inframundo cuyos ojos eran lo único que podían visualizar, rápidamenteel jefe militar hizo traer a los mejores arqueros pues era imposible avanzarsin empezar la batalla a lo que solo 5 hombres respondieron el llamado--Necesitamos que les metan una flecha justo en la boca, recordad que poseendos una encima de otra, así que apuntad justo abajo, en ese horrido huecollevan lengua, solo tendrán una oportunidad alla donde ven las lenguas justounos centímetros por debajo-- dijo en voz baja tocándole el hombro a uno deellos en señal de confianza y apoyo. Los cinco arqueros se postraron sobre susrodillas estirando la cuerda gastada del arco de madera negra lo más que podían,haciéndola chillar a tal grado que le quito el suspiro a más de uno en ellugar, pues habían imaginado que el sonido había llegado a sus enemigos. Losarqueros cerraron un ojo y el otro se postro justo en medio de las lenguas defuego que flotaban en la espesa niebla, uno de ellos tuvo que desistir antes deponerse en posición de nueva cuenta, el frio se había apoderado de su cuerpo yle era imposible dejar de temblar para calentarse, una vez posicionadoscontrolaron su respiración y la cortaron por un momento exhalando un suspiro.El demonio azul se movió junto con su grupo de elite al escuchar como la flechacortaba el aire frente a ellos, corrieron y ante los guerreros se hallaban losdemonios calavera, criaturas enormes de más de dos metros de altura con doscabeza, una sobre de la otra, dos bocas una para gritar y la otra para comer y destrozar lo que cruza en su camino, en sus largos brazos una poderosa hacha de obsidianay su escuálido cuerpo cubierto, en partes, por pedazos de carne putrefacto, enotros lugares de sus cuerpos un brillante color blanco por el que se asoman sushuesos. El tiro fue perfecto y logro romper una de las mandíbulas de losdemonios que ahora no podían gritar para atemorizar a sus adversarios ni avisara los suyos, Los guerreros decididos blandieron sus armas para romperpiernas y cabezas en el menor tiempo posible para no ser advertidos por losdemonios que aguardaban en el fuerte. Tras la pequeña riña todos los humanosestaban acalorados más que listos para sacar ese grito ahogado en sus gargantas,estaban sedientos de batalla, El demonio azul se acercó lo más posible con sugente a las puertas donde de nueva cuenta se observaban unas pequeñas lenguasflotando en el espesor de la neblina que arrastro la fría mañana, esperaba laseñal del caracol para poder tomar por sorpresa la entrada que tenía por puertaa unos cuantos demonios calavera, detrás de ella unas docenas de los mismos aguardandode pie esperando a que algo sucediera. El primer caracol que se escuchó, vinodel sur, sucedido de otro al occidente y así uno tras otro cada vez más fuertehasta unirse en un solo sonido que resonó en los oídos de los guerreros, altermina la llamada... el silencio se apodero del cerro ni un bando ni el otro emitíaruido alguno, fue el demonio azul quien rompió con el aterrador silencio con unfuerte grito que regreso el valor y coraje en todos ellos, se le empezaron aunir todos mientras levantaban armas al aire y embestían por primera vez contodas sus fuerzas, el primer grupo logro entrar sin problemas y con pocas bajasal fuerte para encontrarse con una lucha sin cuartel, el lugar de pronto se llenóde sonidos de hachas y espadas chocando entre sí, y aquellas criaturasgritaban, era el sonido de la muerte, hacia tambalear el espíritu de loshombres, como cuando un chubasco de gran fuerza golpea tu casa y el temor se apoderade tu corazón al escuchar como resopla el viento con tal brutalidad, era elsonido de la muerte, un sonido regalado por el mismo dios al que todos se hincanante él aunque sea solo por una vez en sus vidas, un sonido que solo podíaprovenir de esas bocas. El trabajo de los guerreros que llevaban con sí elenorme caracol era soplarlo cada vez que escucharan ese espeluznantesonido y la indicación para todos los que estaban de pie era gritar lo másfuerte posible cada que escucharan el caracol y así mitigar la llamada de lamuerte.
Al cabo de unos minutos los hombres que se encontraban al rededor del fuertelograron escalar los altos muros de madera entrando por todos lados, losdemonios calavera eran torpes sin un líder que los dirigiera, al ver comoentraban por la puerta los primeros humanos, habían abandonado sus puestos paraevitar que la puerta callera en manos de los mismos, por lo que el acceso porlos muros era más fácil y seguro que estar en la puerta. Esta acción dio granventaja al ejército del Demonio azul quien seguía astillando y pulverizandohuesos y cráneos de sus adversarios. Uno tras otro iban cayendo sin oportunidadal bien organizado ejercito de hombres que no dejaba de romper y astillarhuesos de sus contrincantes, la batalla habría durado mucho más tiempo de nohaber sido por los hombres que embistieron por las espaldas a los demonios quese encontraban enseguida de la puerta, solo podía intentar gritar pero eso yano tenía efecto alguno ante el clamor de furia de los hombres que exigíanlibertad para su raza. Tras terminar con el último demonio cráneo en pie, todosse miraron entre sí y empezaron a contar las bajas, pero lo más importante sies que todos los cuerpos caídos tenían su corazón en su lugar, de lo contrariose daban a la tarea de buscarlo. Para purificar el área y dar gracias a laserpiente emplumada se tocaba una pequeña flauta y tambor. En medio de lapurificación otro grito de muerte fue escuchado por todos ensombreciendo suscorazones, petrificando sus cuerpos, el espíritu de aquellos valientes hombresque desbordaba de alegría por la victoria se había encogido. Pronto el Demonioazul que tenía algunas heridas menores en sus brazos, puso su escudo en la manoderecha y encamino su paso hacia el posible lugar de donde se originaba elsonido de muerte, que no dejaba de encoger el coraje y valía de sus compañeros.Era un pequeño pasadizo con escaleras talladas en la propia tierra y que esamañana solo servía para ampliar el sonido de lo que parecía un lugar sinretorno, a lo lejos se podía ver un ser retorciéndose en el piso llorando de agonía acercándose,sus gritos eran más agudos y menos fuertes
-Yo Yaótl maldigo a los tuyos demonio falso, tú y tu abominable razadesaparecerá de la tierra dorada y serás traicionado por tu propia sangre, yaunque hoy se apague este sol, el suyo se apagará y traerá aires de renovacióny muerte para todos y mi reino no tendrá fin- hablo con voz profunda ytenebrosa el Dios que usurpo el legado de su antecesor e intento matar a laserpiente emplumada-- Yo no soy un demonio falso, eso entiéndelo, yo soy elmismo azote de los demonios yo soy más que un simple demonio, los de tu sangreme temen y temerán a mi descendencia-- respondió el Demonio Azul clavando lamirada en Yaotl -- Lo contemplo falso demonio y por eso tu sangre se volverá entu contra y cuando llegue ese día surgiré más hambriento de sus corazones queson vida y sediento de su sangre que es sagrado entre nosotros sus deidades yno habrá perdón para nadie, ni siquiera para los adeptos, recuerda que la vidadesaparecerá de este mundo y sólo oscuridad y muerte reinará. --Ya calla yahora descansa que tus restos serán bien guardados en esta montaña dondeempezará nuestro sol, que iluminará todo lo que no represantas y odias, y aunque seas un Dios y no puedas morir, dormirás aquí por la eternidad hasta queasí lo quieran dioses.
El Demonio Azul finalmente sentenció a la deidad cortando el cráneo, mismo querodó por todas las escaleras de tierra manchando el suelo de negro, entrevarios hombres, temerosos tomaron su cuerpo y el Demonio Azul rompió sus costillascon una hacha para extraer el corazón y levantarlo en señal de triunfo a todoslos guerreros que eran testigos de cómo el mal era destruido --!Aquí empiezanuestro sol, este es el final del tercer sol!, !Esta es la era del cuarto sol yle pertenece a los hombres!,! Le pertenece a la vida! --todos gritaban ybramaban de felicidad y alegría, la humanidad finalmente había acabado con larevuelta de Yaótl y la guerra celestial había concluido. Los hombres eranquienes había ganado más, había conseguido su libertad y ya nunca más sevolverían a esconder en cuevas y cavernas ni volvería a depender directamente de la serpiente emplumada, quien había caído por la mano de Yaótl apodado el enemigo del hombre.
Y así la humanidad comenzó a escribir su historia, forjando su destino en elmundo, empezando con el imperó de METLAN lugar de magueys, planta divina, símbolo de prosperidad y buena fortuna. Su primer emperador '' El Demonio Azul''

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⏰ Última actualización: Feb 04, 2022 ⏰

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