Rumores

Indirecta

En el parque.

Todos en clases organizaron un picnic, para celebrar que Kim dejaría de hacer bobos desafíos por lo que resta del año.

Kim, Iván, Nino, Alix, Alya y Rose, estaban jugando al fútbol, siendo Mylene y Juleka las arqueros, y Nathaniel una especie de árbitro, pero ignoraba a todos ya que estaba viendo como las hormigas llevaban migas de pan que hizo.

Sabrina, hablaba de temas del colegio con Max y Chloe, parecía estar mensajeando con alguien, mientras reía y se enojaba, como toda una bipolar.

Mientras todos ellos estaban en lo suyo, Adrien y Marinette eran los únicos sentados, muy juntos, disfrutando de la paz.

-¡Ah! Que pereza.

Dijo la azabache antes de acostarse en el césped, estirando sus piernas y usando sus brazos como almohada, antes de cerrar sus ojos.

Adrien, quien estaba comiendo bizcochos que había, miró disimuladamente a Marinette.

Últimamente le venían diciendo que a ella le gustaba él, siendo Kim quien empezó todo éso gracias a que él creyó que era una broma de su parte, tomandolo él como un simple rumor, pero... ¿y sí no era un rumor y le decían la verdad?

Su amistad con Marinette era muy fuerte, así que era normal que los confundan con novios de vez en cuando, pero ella no tenía otro tipo de sentimientos por él ¿verdad?

Le podía preguntar directamente, pero sí ella lo negaba, nada le garantizaba que le estuviese diciendo la verdad; le podía mentir por no estar preparada para revelar sus verdaderos sentimientos.

El chico, suspiro de manera sonora, agotado por toda ésa confusión.

Los rumores sí que podían ser muy molestos.

-¿Qué pasa, Adrien?- preguntó la azabache, al oír el suspiro de su amigo.

El rubio, la miró y vio que ella seguía acostada, con sus ojos cerrados.

Marinette era muy inteligente y daba buenos consejos, así que le preguntaría de manera indirecta sobre ése tema.

-Bueno... verás... mi primo, Félix, últimamente andá muy confundido por que escuchó ciertos rumores, que dicen que su mejor amiga, gusta de él y éso lo tiene muy pensativo.

Al oír éso, Marinette abrió sus ojos y sonrió con burla.

Pagaría por ver la cara confundida del gran Félix Agreste, sólo para molestarlo.

-Bueno, Félix es algo... amargado, pero es muy atractivo...

Al oír éso, Adrien fruncio ligeramente el ceño.

Su primo no era atractivo, estaba bien feo.

Él sí era atractivo.

-No me sorprende que una chica se sienta atraída por él, hasta yo lo haría sí fuese más amable...

Adrien paso una mano por su cabello, algo estresado.

¿Por qué de pronto tenía la urgencia de borrar todo lazo con su primo?

-Pero rumores son rumores, no le debe hacer casó. - explicó la azabache y Adrien asintió, algo malhumorado.

Marinette tiene razón, los rumores sólo son cosas que la gente inventa para molestar a alguien que está tranqui...

-Pero...

¡No puede ser! ¡¿Por qué siempre debe haber un "pero"?!

El chico, miró a la ojiazul, que veía el cielo con la mirada algo pérdida.

-Los rumores aveces surgen por algún motivo.
Su amiga sí puede sentir algo por él y es mejor que no se lo pregunte por que ella le puede mentir al no estar lista para revelar sus verdaderos sentimientos. - explicó y Adrien se sintió inteligente.

Sus sospechas eran acertadas, era mejor no preguntarle a Marinette sobre...

-Adrien...

La chica lo llamó mientras se sentaba y pronto lo miró fijamente a los ojos, con una pequeña sonrisa.

-Me gustas.

Y con oír éso, Adrien abrió sus ojos con espanto.

¡¿Ella se dio cuenta de que hablaba sobre ellos?!

¡¿Los rumores entonces eran verdad y Marinette sí gustaba de él?!

¿Qué debía hacer ahora?

-¿Lo ves? Sí alguien se te confiesa de la nada, puede ser muy raro.
Las confesiones deben tener un momento y lugar, no decirse de la nada o con alguien presente por que sí te rechazan, prepárate para las burlas.

Explicó la azabache, mientras agarraba un bizcocho y lo comía, mientras Adrien la miraba, en shock y con el ceño fruncido.

¡¿Sólo le dijo qué le gusta para que vea lo raro que sería sí tu mejor amiga se te confiesa de la nada?!

Marinette podía ser muy cruel y pésima bromista aveces.

Bueno... al menos ahora, gracias a éso, pudo confirmar que todo lo que le decían, era un simple rumor, inventado para molestarlos... pero...

¿Y sí Marinette sí se le confesó de verdad pero él lo tomó como una especie de ejemplo?

El chico fruncio el ceño y miró a su alegré amiga.

No sabía por que, pero quería saber si ése rumor era falso o verdadero.

Continuará...
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¡Hola!

Próximo capítulo, será un tanto más largo.

Espero que haya gustado.

Gracias por su tiempo.

Volveré...