Es un día perfecto, por fin veré a Penélope y no volverá a irse de mi lado; tengo todo listo para que ya no haya razón para ello.
-Sr.Millán, buenas tardes-
-¡Penélope! Qué gusto tenerte aquí nuevamente ¿Qué tal va la tesis?-
-Algo lenta, a veces voy a la biblioteca y los libros que necesito están ocupados por alguien-
-Yo creía que te pagaba un sueldo bueno ¿porque no los compras?-
-Estoy tratando de ahorrar para la titulación sr.millán-Me da mucho gusto que las cosas sean tal cual yo imaginaba, será más especial cuando vea lo que tengo para ella
-Ven Penélope, acompáñame-
Me dirijo a la habitación que había permanecido durante tanto tiempo vacía y al abrirla Penélope ve lo que tengo para ella, le he mandado a hacer una biblioteca para ella sola, tiene todo tipo de libros, desde los antiguos hasta los más nuevos; y además esto garantiza que ya no tendrá que estar lejos de mi, al contrario; ahora deberá pasar más tiempo conmigo.
-Ha construido una biblioteca?-
-Es para ti Penélope, es tuya-Penélope me mira con cara de incredulidad y enseguida comienza a revisar en los estantes más cercanos
-Sr. No puedo aceptarla, es mucho-
-La necesitas no? Yo puedo darte esto y más, no tengo problemas Penélope-Me acerco a ella y la tomo de los hombros, ella al sentir mis manos, huye hacia otro pasillo, pero no me enojaré, trataré de entenderla
-Creí, que no sabía qué hacer con su habitación-
-No podía haberla ocupado mejor, tengo todo, menos una biblioteca; podemos compartirla-Le sonrío pero ella no me devuelve el gesto
-Muchas gracias por su ayuda sr.millán, sé que lo hace sin interés alguno-
Nuevamente toma distancia y remarca que no debo tener ningún interés, volteo mi rostro y miro hacia la pared, debo contener mi enojo, y trato de mentalizar que solo será así por un tiempo más, después será mía
-Te dejo para que disfrutes tu biblioteca, debo salir, más tarde vuelvo ¡ah! Y no hagas planes porfavor, yo te llevaré a tu casa-
Esa es una clara manera de hacerle saber que no quiero que permita que alguien más la lleve, y sé que lo entiende.
***Trato de no demorarme en volver y cuando lo hago veo a Penélope, corrigiendo algunos documentos
-Te imaginaba leyendo algo de tu biblioteca-
-Mañana tomaré los libros necesarios para la tesis, pero por ahora; es momento de trabajar-Tiene en su boca esas palabras que para mí siempre serán verdad.
Desde mi asiento, miro a Penélope ¿Porque no me dice que si? Sé que no hay nadie en su vida ¿Porque no a de darme una oportunidad? Decido invitarla a cenar y me acerco a su mesa con nerviosismo-¿Vamos a cenar?-
-Por supuesto sr.millán-Tan fácil? De saber que aceptaría tan pronto la hubiera invitado antes, pero mientras me dirijo hacia la salida veo que ella no me ha seguido, ha entrado a la cocina?
-¿Penélope?-
-Dígame sr.millán-
-Me refería a salir, tú y yo; a donde tú quieras-Ella voltea a verse los pies y noto inseguridad por la vestimenta que lleva puesta
-Te dejarán pasar a cualquier lugar, vas conmigo-
-Eso es claro, pero no me siento cómoda-
-Estás bien, ven; vamos-
***En la cena todo estuvo bien, la he llevado al mejor restaurante, le he comprado la mejor comida, la mejor botella y hemos tenido unas charlas grandiosas, pero ya es momento de llevarla a su casa
-Gracias por esta noche Penélope-
-Gracias por la cena sr.millán-Cuando abro la puerta para que descienda, la tomo del hombro y la sujeto contra mi, con otra mano sujeto su cabeza y la beso; quizás debería de ser un beso más tranquilo pero no puedo contenerme, ella quiere quitarse pero yo la sujeto del cabello, claro, intentando no lastimarla; después de unos segundos responde a mi beso y acaricia mi rostro, siento estar en mi lugar favorito.
***Después de ese beso estoy seguro de que ella está vuelta loca por mi, nunca se me olvidó mi cometido y puedo darlo por cumplido; claro que ahora no solo quiero acostarme con ella, quiero una relación, no como la que tenía con Salma pero tampoco muy seria, después de todo, lo que he ganado es gracias a todos los regalos y preferencias que he tenido con ella... supongo que solo ha sido por eso.
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Permítame presentarme (Si Te Quiero, Te Consigo) [✓]
RomanceMillán Caruso es un hombre de 28 años que ha vivido desde muy joven entre todas las comodidades que alguien puede soñar, esto gracias a sus padres. Pero el mantenerse así de bien es crédito suyo; ha tenido parejas pero nunca se ha enamorado del todo...