VIAJERO ENTRE ALMAS

Todo mal.

Maicol.

Me estaba colocando la ropa en la habitación, ella se había quedado dormida después de hacerlo, parecía complacida, nada mal creo yo para mi primer vez, me empece a poner el traje una vez más, fue entonces cuando lo que nos tomamos empezó a hacer efecto, me sentía mareado, no tanto como para no poder caminar, baje, no me interesaba pensar mucho en las cosas, no pensaba en donde estaba Eren, solo me importaba yo y que tanto alcohol podría tomar, le pedí una botella al bar tender, me dio un tequila, le di un trago largo, empece a acercarme a chicas, empece a darle trago a todas las que se me atravesaban, le di la botella a uno que estaba rodeado de mujeres -haz mi parte- mientras me alejaba le decía y le guiñe el ojo, si me estaba alejando porque me estaban jalando al baño, eran dos chicas, al parecer mejor amigas, creo que me habían visto subir antes con la chica, por que una de ellas dijo -somos mejor que ella- y otra vez empezaron a quitarme el traje, y a desnudarse, yo, solamente me quedaba sentado viendo como ellas trabajaban.

Eren.

Su cuerpo era inexplicable, era mejor que como se veía con el traje, creo que comprendía como era la más popular de la escuela, después de un rato que terminamos, ambos empezamos a vestirnos, creo que ella estaba decidida a pasar la fiesta conmigo -lista para la segunda ronda chico- me decía como si estuviera como nueva.

-listo- le respondí en una sola palabra, me sentía un tanto reiniciado, listo para bajar y seguir con la fiesta, no encontraba a Micael desdé hace rato, pero bueno, no me importaba, algunos tipos me veían con claros ojos de envidia, que podía hacer, ella me escogió a mi, no a ellos, vimos a alguien con una botella de tequila, dando tragos de a larga distancia mientras la gente alzaba la cabeza para recibirlos, principalmente por chicas, me hizo seña con la cabeza de "vamos", entonces, nos formamos, avanzaba muy rápido, hasta que nos formamos nosotros, creo unos 30 segundos entré los 2, jugamos beer pong, jugamos dardos, nos metimos de nuevo a el baño de el paso de arriba, nos la estábamos pasando espectacular, aún no sabía nada de Micael, eran las 2:00 de la madrugada, la fiesta estaba a todo lo que daba, yo estaba muy mal y me encontraba con la más popular, teniendo sexo, en un baño.

Maicol.

Estas chicas son buenas, lo pensaba mientras me ponía el traje, una de ellas saco una bolsa con polvo blanco y en la parte de el lavabo hizo tres lineas que partía con una tarjeta y enrollaba un billete para inhalarla -esa es la tuya- me dice la otra chica, obediente, la inhale, esto apenas estaba comenzando, salí y hice la fiesta mía, estuve bebiendo con todas las personas que se me cruzaran, salía y entraba de el baño con diferentes chicas, estaba siendo la mejor noche de mi vida y todo se lo debía a Eren, al cual ahora que lo pienso, no encontraba por ningún lugar, bueno eso pensaba, el estaba bajando las escaleras.

Eren.

Ahí esta, al fin lo encontraba, después de estar buscando por mucho rato, bueno en realidad no, yo también estaba ocupado, Stacy venía bajando conmigo, detrás, tomada de mi mano, Micael solo puso cara de sorpresa, era de esperarse, ni yo podía creerlo, me uní a el y a una chica que tenía a su lado, a la cual no le tomé mucha importancia, no era con la que se había ido en un principio, como sea, ahora estando juntos, seguimos la fiesta, escuchando música a todo volumen, bailando, besándonos con nuestras respectivas parejas, inhalando el polvo blanco, tomando a más no poder, fue por mucho la mejor noche de mi vida, y creo que también la de Micael, no recordaba a mi novia en ese momento, no pensaba en ella, no pensaba en sus sentimientos, solo me enfocaba en mi, en como lo estaba pasando, en los movimientos de baile de Stacy que para estar drogada y ebria, no lo hacia nada mal, seguíamos tomando mientras la gente empezaba a irse poco a poco y también a llegar, pareciera que esa fiesta no iba a terminar jamas, pero conforme pasaba el tiempo ambos nos empezábamos a cansar, era hora de sentarnos, empezar a jugar juegos de mesa, nunca nunca, la botella, cualquier cosa que fuera, con tal de descansar, la fiesta por otro lado seguía pero nosotros estábamos cansados y listos para irnos, fue entonces que nos paramos y buscamos al valet parking, estaba dormido en uno de los sillones de Stacy, Micael estaba vomitando y yo empece a despedirme de Stacy, otra vez, en un baño, una media hora después ambos estábamos listos para irnos, drogados y ebrios, pero listos, fue entonces cuando nos dieron las llaves, y ambos nos subimos al auto, en primera pedimos el auto por que la casa de Stacy quedaba un poco lejos de la ciudad, por eso ella siempre llegaba en auto a la escuela junto con sus amigas, arrancamos, mientras nos dábamos la vuelta y empezaba a arrancar Micael, un poco rápido, veía como se empezaba a alejar y esconder la casa de Stacy, como se había acabado la noche, con la mirada hacia atrás, veía como se alejaba la mejor noche de mi vida y tal vez el regreso a mi vida cotidiana, estaba pensando en todo eso, pensando en muchas cosas, mirando hacia atrás, una vez más perdido en mi mente, entonces sentí como el auto se movió de una vía a otra -deberías de bajar la velocidad- le dije regresando al mundo real

 -tranquilo lo puedo manejar, pase una noche increíble- me dijo Maicol despegando la vista de la carretera, poniendo sus ojos en mi, cuando regreso la vista a la carretera una vez más había un carro que venía hacia nosotros, estábamos en sentido contrario, se paso rápidamente al carril, tan rápidamente que el carro no lo hizo de la manera correcta, ahí estábamos, volteandonos lentamente, era nuestra hora, tal vez, todo paso muy lento y de un momento a otro perdí la conciencia.