Ale el Blanco (spin-off)

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En el origen, no todo fueron: cenizos, plateados, sucios y neutros. Mucho tiempo antes de la llegada de: Él Gris, existieron otros que habitaron este cuerpo en su lugar. Como es elemental por lógica general, otro no pudo ocupar su posición en el principio que: el vacío, el espacio pleno y plano, el conjunto de la nadeza (nothingness) en su máxima expresión, la luz con la que nacemos (juntos) y no lo sabíamos. Estaba escrito con el lenguaje divino en el pergamino de nuestro destino.

Cuando era bebé y hasta alcanzar la edad cercana a los 5 años aproximadamente, mi madre procuraba vestirme de blanco por una promesa religiosa. Una promesa causada por un milagro (quizá para ella por sus creencias, yo más bien lo llamaría una lección de vida...). Mi madre relata sobre aquel día, un accidente automovilístico que infortunadamente se cruzó y coincidió en nuestros caminos: Después del choque vi un bebé pálido y desfallecido, ahora sus cobijas están envueltas de su propio color rojo, creí que te perdía, -ella me dice-, la oreja te colgaba de apenas un pedazo de piel... Aún conservo esa cicatriz (mental y superficial), la guardo celosamente bajo mi cabellera.

Jamás imaginamos que el primer color llegaría tan pronto. 'Ale el Rojo' uno de muchos Ales que nos sucederían a partir de este momento de nuestra vida...


La lengua perdidaWhere stories live. Discover now