capítulo 29

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El frío pasaba a través de mis sabanas congelando mis huesos, no podía despertarme era como esa clase de sueños que tu cuerpo está dormido pero tu mente está despierta. Las pesadillas vienen a mi mente, a la semana sueño dos veces en lo mismo. Siempre es el mismo recuerdo, sueño o pesadilla, yo lo consideró así ya que es una tortura esto. El lugar es un calabozo oscuro que al mirar con atención el color se la Luz que entra ahí es gris clara, Veo a toda mi raza botada en el suelo y este pintado de un rojo espeso. Algunos cuerpos se mueven y empiezan a arrastrarse a donde me encuentro, yo estoy sentado amarrado con cadenas, Athan está detrás mío impidiéndome mover, uno de mis colegas me agarra y levanta su cara dejándome ver su expresión de tristeza y de vacío en sus ojos.

-Fallaste!!-Susurra-Nos Fallaste a todos!

-Queremos la gloria !-Gritan ahora la mayoría

-Victoria-Se oyen más voces -Victoria! Victoria- veo como mis pies se elevan de suelo y poco a poco más Nefilim se acercan a las cadenas que siguen pegadas al suelo y las toman en sus manos agarrando las

-victoria-Se repite a medida que más de ellos se acerca

-Tomadlo! Es suyo- grita Athan aún estando detrás mío-Tomad vierta victoria- Me Toma de los hombros y se acerca a mi oído

-Tu amigo desea su gloria-Pongo mi vista en el suelo y veo ahí a Klaus sentado en el suelo enrollado mi cadena en sus manos -Morirás- comienzo a sentir fuerza que pasan a través de las cuerdas, bajo la mirada a ahora todos están levantados mirando la cadena atentos

-Victoria-Gritan y jalan con fuerza llevando mi cuerpo directo al suelo para que se estrelle allí, y antes de sentir el golpe acompañado de adrenalina de despierto
Mi cuerpo se siente dormido, es imposible moverme cualquier movimiento que haga es como si hubiera tenido encima un ladrillo. Sentía mi corazón a mil era como si tuviera taquicardia, aunque intentaba calmarme mi corazón seguía latiendo rápido casi como el latir de un ratón.
Intento mover mi cabeza hacia el reloj y con dificultad logró ver que ya eran las cuatro de la mañana, me levantó suavemente y cuando intento poner mis pies y apoyarlos en En suelo, caigo pegandome en las rodillas, pero es como si mi cuerpo no fuera mío, no sentí dolor al caer. Intento levantarme Pero es inútil así que mi opción fue arrastrarme hasta las escaleras y encender la luz que estaba a mi altura, bajo las escaleras aún cateando, y al llegar al primer piso me descargo en el suelo aún sintiéndome que el corazón se me iba a salir, me costaba trabajo levantarme, ahora no sentía mis brazos sólo el frío suelo.

Abro mis ojos y ya ha salido la luz, calculó que son las ocho de la mañana, mi cuerpo sigue quieto pero por lo menos puedo mover mis dedos y un poco mis piernas, me arrastró de nuevo para el sillón he intento sentarme, una vez logrado me descargo relajado mi cuerpo frío. La puerta suena con golpes fuertes, maldigo y de nuevo intenté pararme y a paso lento camino y la abro. Me sorprendo al ver a Katie parada mirándome

-Qué haces aquí?-Preguntó enojado

-Quiero hablar contigo, es urgente-Su tono preocupando me hace reir

-Largo no tengo ánimo de nada-Intento cerrar la puerta pero lo impide

-Es sobre eso

-Que?- su sola presencia empieza a molestarme

-Quieren matarte, claus

-Eso ya lo se y es gracias a ti, largo!-La empujó suave pero ella me aparta y entra

-Escúchame!quiero ayudarte--Levanta la voz-Es enserio

-Tu? Ayudarme?-Digo en tono sarcástico

-Hablo enserio! Quieren llevarte a la fuerza al consejo-Se acerca

-No me interesa, no vengas hacerte la víctima aquí, se cómo son ustedes tu al igual que Athan quieren lo poco que me queda de poder

El ultimo nefilimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora