Fleto Culiao 《Changlix》(Chilensis)

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El chasquido de sus besos y sus jadeos era lo único que se oía en la casa, mientras se quitaban con lentitud, pacíficamente la ropa. Changbin bajó sus besos por el mentón del menor, a su cuello, deteniendose ahí.
Claro, sin dejar marcas muy notorias. Una que otra, pues ya tendría lugar en el pecho del menor. O en sus piernas.
Felix lo rodeó con estás, mirándolo con lujuria.

-Esto de verdad me estorba mucho.- dijo señalando la camisa abierta del uniforme. La quitó y acarició los fornidos brazos de su ahora, pololo. Le excitaba el simple hecho de pensarse entre aquellas extremidades, siendo apresado, víctima del placer.
Changbin sonrió con diversión, y se recostó.

-Se que querí tocarme.- dijo y Felix mordió su labio, acariciando el abdomen y brazos del pelinegro. Se sentó sobre sus piernas, tomándole el mentón entre los dedos.

-Siempre voy a querer tocarte, Binnie.- dijo y lo besó, pegando sus pechos, moviendo su cintura, logrando encender al momento a su mayor.
El menor relamió sus labios con un jadeo.
Sus caderas batallaban por llevar un ritmo, pero se distraía fácilmente entre los besos y apretones que el mayor le daba.
Sus prendas inferiores desaparecieron, dejandolos desnudos. Felix puso la mano sobre su muslo, entre sus piernas, con algo de pánico.

- ¿Qué pasa?- Felix mordió su labio.

-Me da algo de vergüenza.- dijo.- no el hecho de estar desnudos... me dan vergüenza mis cicatrices.- dijo, mientras el mayor acariciaba su rostro. Quito la mano del menor lento, pasando la mano por aquellas ligeramente abultadas marcas, las observo, de color piel, casi invisibles a la vista, pero ahí.

-No te avergüences. Es tu pasado. Eso quedo atrás, ahora somos tu y yo. Y te lo juro por lo ma sagrao, que yo no voy a permitir que lo vuelvas a hacer, te voy a hacer tan feliz, que nunca lo vai a hacer de nuevo. - dijo y acarició las cicatricez. El pecoso se escondió en su cuello.

-Pero.. se ven feas ahí.- dijo. Changbin chasqueó la lengua.

-¿Aonde?- dijo y con sus dedos dejo un beso en éstas. - Les daría un beso pero no me puedo doblar en esta posición. - dijo riendo. Felix rió con él.
Changbin repartió besos por su cuello y pecho, hasta lo que alcanzaba. Felix sujeto su cabello, disfrutando el tacto.
Changbin lo recostó, y entonces, pudo besar las cicatricez.
Felix sonrió, agradeciéndole a todo, por haber cruzado a ese Ángel ordinario en su camino. Changbin se levantó y acarició la silueta de Felix.
El menor se preparo mentalmente para lo que venía.

"-Ya pero... ¿De verdad nunca..?- preguntó Chan. - ¿Ni por curiosidad?-
Felix negó.

-No lo sé, siento que sería raro, hacerlo ahí.- dijo mirando su mano. Chan suspiró, mirándolo en plan "¿porque estos niños no reciben educación sexual? O bueno, educación sobre estimulación."

-Bien, pero el Binnie si lo va a hacer, con sus dedos. - dijo y el pecoso se sonrojó, tal y como esperaba Chan.- así que si quieres prepararte, podrías... practicar un poco. - dijo sugerente. Felix tragó saliva.

-Y-Yo... Ay no sé.- dijo. Para él iba a ser muy raro, pero haría el intento."

Y claro que intento, en un principio, la vergüenza y la incomodidad casi pudieron con él, pero espero, hasta que se sintió mejor. Pero eso no lo diría.

-En mi bolsillo, hay un condón que me dio el Chan.- dijo el rubio, Changbin asintió, y lo tomó del pantalón de Felix.
Se ganó entre sus piernas y lo besó.

-¿Estás 100% seguro de esto, cierto? - preguntó. Felix asintió, dándole otro beso.

-Sí, estoy completamente seguro, amor.- dijo dándole una sonrisa para tranquilizarlo.
Changbin besó su frente y puso tres dedos frente su rostro. Felix los introdujo en su boca, mirando fijamente al pelinegro, para provocarlo. Changbin sonrió lacsivo, notando las intenciones del menor, y cómo estás fueron cumplidas. Cuándo sus dedos estuvieron cubiertos de saliva ajena, los quitó de la boca de Felix, llevándolos a otro sector. El pecoso se puso nervioso. Pero ya no había vuelta atrás. Changbin inspiró antes de introducir su dedo medio.
Felix mordió su labio, sintiéndose algo incomodo.