Sacados de un cuento

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-si me haces algo con esas afiladas garras, matare a tu amiga- decía el tuerto y sacando una pistola uno de ellos apunto al cráneo de la amiga.

Conociendo las consecuencias, sus garras desaparecieron.

-¡¡qué bueno!! ya no puedo aguantarme- el tuerto sin perder tiempo se bajo los pantalones mostrando las joyas de la corona, dispuesto a penetrar a la chica felina -tu asqueroso cuerpo me excita-

–NO, NO, POR FAVOR, ¡¡PAPÁ SALVAME!!- está asustada y temblorosa rogaba por no recibir tal injusto castigo.

-no te preocupes después de una hora no sentirás las piernas- aseguraba el tuerto, sonriendo con sus subordinados.

te vas a morir hijo de P.. fue lo que pensé.

-M-Maldito- esto enojo a Amanda.

-fff... pueden eliminarlos ...fff- ordenaba el capitán

-¡PUM!- un disparo en el cráneo, dejo caer al suelo al hombre que amenazaba a la chica dorada.

-¡mátenlos!- ordene disparando mi arma a otro de ellos, escondido.

Otros de mis compañeros lo hicieron más extravagante, para destacar... como cierta persona

De unos matorrales salió Allen "cartera pobre" –¡¡hey panzón de mierda!!, comete esto, ¡PUM!- de un disparo en la frente, cayó en el suelo el maldito gordo

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De unos matorrales salió Allen "cartera pobre" –¡¡hey panzón de mierda!!, comete esto, ¡PUM!- de un disparo en la frente, cayó en el suelo el maldito gordo.

-muéranse, ¡ra-ta-tá!; ¡ra-ta-tá!- decía Roger junto a María disparando con unos fusiles de asalto automáticos (específicamente M4 modificados del 2049)

Varios disparos comenzaron a salir de nuestras armas y se dirigieron a los secuestradores.

Entre ellos Amanda, que le disparo al tuerto

-¡PUM!- un disparo se había realizado, pero no en el lugar deseado, mucha sangre salía de ese lugar, que no quiero explicar –¡Mis teticulos y P..!- pero no pudo terminar la frase pues su cráneo fue perforado por otro disparo

Lo juro esa escena me perturbo -¿Qué carajos hiciste Amy?- Yo dije cabeza, no otra cosa, de la sorpresa termine llamándola por su verdadero nombre, en realidad Amanda es su apodo de familia.

-dijiste cabeza, pero no especificaste- apuesto que lo disfruto y tiene el descaro de usar mis órdenes en mi contra, debo llevarla al psicólogo

-fff...solo faltan dos, ¡PUM!, ¡PUM!, ya no falta nadie ...fff- mis demás compañeros les dispararon a los demás secuestradores, usando nuestras armas silenciadoras, minimizamos el ruido y no hubo ninguna baja.

-fff... los eliminamos todos ...fff- me reportaba Paulette, todavía asqueado confirme mirando a cada uno de los uniformados, tengo que admitirlo todos son buenos disparos en la frente y costado de la cabeza, el capitán Wall estaría orgulloso.

-fff...verifiquen condición de los demás rehenes...fff - me informaba Midman, tenía que sacarlos de inmediato.

Me acerque a las dos chicas y llame al médico del grupo –Tiffany-

Tiffany Reagan pelirroja de nacimiento. Se acercó a las chicas, para verificar su condición física.

-¿Qué PASO?- decía una chica felina en shock al ver tanta sangre, el impacto de la bala termino expansionado sangre y sexos en todo el cuerpo desnudo de la muchacha, tanto fue el miedo que ella termino orinándose –soy tan cobarde- todo su cuerpo temblaba.

-no te preocupes todo está bien- Tiffany, como médico que era trato de apaciguar su temor –nosotros los ayudaremos-

la cubrió con una manta como a su amiga la cual estaba igual.

-Joseph haz un perímetro- Ordené hacer un perímetro para cubrirnos


-Amanda, Charlotte, Allen vengan conmigo- al entrar en el cobertizo me encontré a los 22 rehenes restantes, volví a sorprenderme al ver chicas con orejas y cola de perro, hombres con cuerpo humano y cabeza de lobo, como también personas normales. todos vestidos con trajes mugrientos, posiblemente llevaban un tiempo en el lugar.

-¿cuánto tiempo llevan aquí?- preguntaba Amanda

-30 días para ser preciso- hablo una criatura con la cabeza, los brazos y el torso de un humano y el cuerpo y las patas de un caballo. Un centauro

-e-es m-mucho t-tiempo- decía nerviosa Charlotte, al hablar con él

Pude evidenciar moretones, marcas de latigazos y cortes en algunas partes de su cuerpo, no importa lo que sean, me sentía decepcionado la crueldad de este lugar.

Tenía que darles una buena noticia, pues era mi deber.

-nosotros vinimos a salvarlos- dije con una sonrisa nerviosa, tenía miedo de ser golpeado salvajemente, al ser confundido con el enemigo.

-¿enserio?- decía serio el centauro, el escondía un trozo de hueso que había afilado por mucho tiempo, no dudaría en clávame el cuello.

Pero alguien me ayudo a creerles

- Quirón, yo no los conozco, pero veo que dicen la verdad- decía la chica gato con la manta, como si fuese su líder, también note que su orejas y cola se relajaron, por alguna razón sus iris se tornaron de un color verde brilloso.

-¿se encuentran bien?- preguntaba una preocupada chica de cabello dorado

Yo sé ustedes pensaran, ¿Qué así de simple confiaran en nosotros?, no es que confíen en nosotros, es que somos la única opción que tienen de salir.

tal vez se resignaron y decidieron ver que sucedía, pero no lo podía negar todavía veía temor y desconfianza en sus ojos, ellos como una mascota maltratada temían por volver a ser heridos.

De pronto esas personas salieron corriendo hacia mí, "me van a matar" fue lo único que pensé y esperando lo peor cerré los ojos.

-¡¡señorita Aurora y Sophie!! ¿Cómo están? - decían los rehenes, solo me pasaron de largo y preocupados preguntaban por el bienestar de las dos chicas sin importan lo mal que ellos mismos se encontraban.

Esas dos chicas tienen que ser muy importantes, para que la secuestrasen y para que los cercanos a ella, las pongan como prioridad.

- saque a los rehenes, estaremos esperando en el punto de encuentro- me Midman informaba, tenía que sacarlos de inmediato.


The Last Aircraft CarrierWhere stories live. Discover now